QORBAN PESAJ y la PREPARACIÓN de las MATSOT

¿Qué se solía hacer en la víspera de Pésaj?

El dia antes de Pésaj, el 14 de Nisan era un dia muy intenso en el tiempo del Bet haMiqdash. Cintos de miles, y hay quien dice, millones de Yehudim que habían llegado a Yerushalayim desde todos los confines de israel se disponían a sacrificar el qorbán pésaj (la ovejita que se sacrificaba y se consumía por la noche). La gente se juntaba en grupos de familia, llamados “jaburá”. Cada jaburá, que podia consistir de 50, 60 y hasta 100 personas, compartían un mismo qorbán. La ovejita era llevada al bet haMiqdash por uno o dos representares de cada jaburá, donde era sacrificada.  Luego el animal era asado entero.  Por la noche, que ya era el dia 15 de Nisan, la jaburá realizada el Seder de Pésaj, mas o menos como lo hacemos hoy. Se leía la hagada, se hacían las preguntas de Ma Nishtaná, se servia mucha comida, incluyendo otro qorbanot como jaguigá, y por su puesto matsa y maror. La comida se comía estando reclinados, se bebían las cuatro copas de vino, y al final de la cena, antes de la medianoche, se repartia el qorbán Pésaj como afiqomán (ultima comida, “postre”) entre todos los miembros de la jaburá.  cada uno tenia que probar de este qorbán por lo menos un pedazo del tamaño de una aceituna.  Al finalizar el qorbán Pesah se recitaba el Birkat haMazon.  La Gemará cuenta que al final de la cena la gente salía a las terrazas de Yerushalayim, y desde allí, mirando hacia el bet haMiqdash, que estaba iluminado por la luna llena, cantaban el Halel, una serie de salmos de Tehilim que se recitan en agradecimiento a HaShem por habernos liberado de Egipto.  Las voces de cientos de miles de Yehudim cantando el Halel llenaban la ciudad de una melodía inigualable. La Gemará describe que esas voces eran tan poderosas que (metafóricamente) hacían “colapsar” las terrazas de la ciudad.

Luego de la destrucción del bet haMiqdash, ya no podemos sacrificar el qorbán Pésaj.  Pero aun recitamos el Halel, al final de la hagada, después de comer el Afiqoman.  hay una hermosa costumbre, virtualmente olvidada hoy en día, que se hacia en recuerdo a ese famoso Halel del Bet haMiqdash. Como ya sabemos,en nuestros días  el qorban pesah es simbolizado por la matsá. Por ejemplo, al final del Seder comemos nuevamente Matsa, de “postre” y decimos [Comemos esta matsa ]“en recuerdo al qorban Pesaj que se comía una vez que uno estaba satisfecho” . La olvidada costumbre a la cual me f=refiero es que por siglos los Yehudim no comprábamos las matsot: las hacíamos en casa.  Adivinen cuando hacíamos las matsot?  El 14 de Nisan, después del mediodía (=hoy al mediodía). Exactamente cuando se acostumbraba a preparar el qorban Pésaj. el Shuljan aruj dice que esta es la forma ideal de preparar las matsot, y y el mejor tiempo . El Shuljan Aruj también dice que cuando se preparaban las matsot en la víspera de Pésaj, se acostumbraba a “cantar” mientras se amasan las matsot. Y que se cantaba? El Halel! Hoy en día, esta costumbre lamentablemente se perdió. Excepto en algunas familias Yemenitas y de Kurdistán.




Pesaj, Matsa y Maror

De acuerdo a Rabban Gamliel hay 3 conceptos que deben mencionarse en el Seder para cumplir con la mínima obligación de transmitir a nuestros hijos la historia de Pésaj. Estos 3 conceptos son: Pésaj, Matsá y Maror.

Antes de explicar estas ideas, una por una, veamos como se relacionan entre sí.

Pésaj, es lo que HaShem hizo por nosotros. Matsá, es lo que hicimos nosotros, ‘am Israel, para merecer nuestra libertad. Y Maror es lo que nos hicieron los Egipcios. De esta manera, estos 3 conceptos apuntan al rol de los 3 principales protagonistas de la historia de Pésaj.   Empezaremos por el final.

MAROR

Ayer explicamos el Maror, la forma en la que los egipcios nos maltrataron, nos demonizaron y nos hicieron sufrir (ver aquí). Rabban Gamliel nos dice que no debemos privar a nuestros hijos de esta dolorosa información. Que de alguna manera deben saber que nuestro destino como pueblo elegido implica estar expuesto a la demonización y la persecución de los pueblos. Deben preservar la memoria de nuestro sufrimiento. ¿Por qué? Porque la Tora nos enseña que debemos canalizar positivamente la memoria del dolor y la opresión que nuestros padres pasaron en Egipto. ¿Cómo? No dejando que otra gente sufra! Preocupándonos por el que tiene menos. Y recordando que no debemos oprimir al débil o a quién trabaja para nosotros, judío o gentil. ¿Por qué? ki gerim heytem beerets mitsrayim, «porque fuimos esclavos en Egipto,» y sabemos en carne propia lo que sufre el abusado.  Así, enseñaremos a nuestros hijos a honrar la memoria de nuestro sufrimiento: evitando que el sufrimiento se repita .

MATSA

Matsa representa lo que el pueblo judío hizo para merecer su libertad. El día 10 de Nisán, HaShem ordenó a los Yehudim que tomaran una oveja y la mantuvieran con ellos. Hay que recordar que los egipcios adoraban a muchísimos animales, ya que para ellos los animales encarnaban los poderes de sus dioses. El cocodrilo o el hipopótamo, por ejemplo, eran adorados como seres sagrados por encarnar el poder y la ferocidad.  Las ovejas, especialmente los machos conocidos en español como «carneros», simbolizaban la virilidad y el poder de la procreación. Los Yehudim  se enfrentaba ahora a un gran desafío: debían tomar uno de esos carneros, mientras esperaban las ordenes de HaShem de sacrificarlo. Lo cual era peligrosísimo respecto a los egipcios,  tan peligroso como hoy en día sacrificar públicamente una vaca en la India. Pero lo más difícil, y meritorio, fue que el pueblo de Israel demostró que podía «liberarse» de la cultura idolatra! Recuerden que los Yehudim vivieron inmersos en esa sociedad por 10 generaciones y estuvieron expuestos a todo tipo de supersticiones y fetichismo, propios de la ‘aboda zara (idolatría).
El 14 de Nisan, HaShem ordenó a los Yehudim sacrificar el carnero, exponer su sangre en las puertas, asarlo y comerlo. Imaginases la tremenda dificultad sicológica de sacrificar y comer, un animal que sus amos adoraban. Recuerden que los esclavos naturalmente temen a sus amos, y cuanto más deberían haber temido  a los «amos de sus amos», a los animales que sus amos consideraban dioses!   HaShem quería que los Yehudim «merecieran» su libertad y demostraran que no eran esclavos del pensamiento idolatra. Que ellos entendían que los dioses egipcios eran falsos, productos de la imaginación humana. Los Yehudim no dudamos, y en una sola noche, en un tiempo inferior al que le lleva a la masa del pan fermentar, desenmascaramos la idolatría, nos liberamos de ella, la dejamos atrás y nos entregarnos en las manos de Bore Olam.  El profeta Yrmiyhau recuerda este gran mérito, cuando dijo en nombre de haShem: «Recuerdo tu mérito de joven, tu amor [incondicional por Mi]: cuando fuiste capaz de seguirme hasta el desierto, a una tierra seca [sin agua, y sin más comida que la matsá]» (Jeremiah 2:2).

PESAJ

En Inglés a Pésaj se lo llama «Passover» (i.e., pasó por encima, salteó), lo que significa que cuando HaShem estaba matando a los primogénitos egipcios, «salteó», pasó por encima de la casa de los Yehudim y no los afectó. Esta es la clásica interpretación de la palabra «pésaj».
No obstante, de acuerdo al rab Menashe Ben Israel y muchos otros, la idea de Pésaj es un poco más profunda, y a la vez, desconocida.  El rab Ben Israel explica que la palabra «pésaj» o «pasaj» no debe ser entendida como «salteó» sino como «protegió» (jayis, como lo traduce el Targum Onkelos).  Cuando HaShem desató la décima plaga, la muerte de los primogénitos, lo que la Torá llama «mashjit», (destructor, plaga) esta plaga tendría que haber afectado, «de manera natural», a todos los primogénitos de Egipto, gentiles o judíos, indiscriminadamente. HaShem, sin embargo, «protegió» las casa de  los Yehudim («pasaj) y no dejó que la mortal plaga afectara a los primogénitos judíos (para entender esta lectura, se debe leer detenidamente el pasuq en Shemot 12:13 y 12:23 o ver una explicacion más detallada aquí).
Pésaj, entonces, es la festividad en la que celebramos la constante, directa y «sobrenatural» protección que HaShem le brinda al pueblo de Israel. Esta protección selectiva (hashgajá peratit) que comenzó la noche del 15 de Nisan, en Hebreo conocida como lel shimurim,  es la protección que acompaña desde entonces a Am Israel a través de su historia y hasta nuestros días.  Tal como ocurrió esa noche en Egipto, HaShem protege a Israel de una manera «milagrosa». La existencia de Israel desafía las estadísticas o las predicciones más lógicas. 1. El pueblo judío, el grupo humano más perseguido y hostigado en la historia de  la humanidad, no debería existir, pero existe! 2. ¿Cómo se explica que el estado de Israel -el único país del mundo cuya existencia es deligitimizada y creíblemente amenazada, el único país del mundo rodeado totalmente de vecinos (y vecinos de vecinos) que buscan su aniquilación, y que cuentan con todo el apoyo internacional y con 100 veces más población y territorio–siga existiendo.    La verdad es que Am Israel–el pueblo y el Estado– existe «milagrosamente», porque, tal como ocurrió esa noche (lel shimurim)  HaShem nos sigue protegiendo




Algunas ideas para debatir la noche del Seder

Como explicamos ayer, nuestra misión en la noche del Seder es «enseñar» la Hagadá a nuestros hijos, familiares e invitados, no sólo «leerla» frente a ellos. Para enseñar la Hagadá, entre otras cosas, debemos hacerla presente y relevante, también para aquellos que no están familiarizados con la historia judía. Debemos demostrar que la historia que la Hagadá cuenta no es parte de un pasado olvidado sino sorprendentemente contemporánea. Como si la historia, o la historia judía, se repite después de miles de años, también el día de hoy, literalmente. Con esta idea en mente vamos a analizar un pasaje de la Hagadá. Este párrafo, de cuatro palabras, describe la estrategia que los egipcios utilizaron para esclavizarnos sin ninguna oposición interna.

El pasuq dice: «VAYARE’U OTANU HAMITSRIM VAYA’ANUNU» (Deut. 26: 6). La palabra clave para entender este versículo es la primera palabra «VAYARE’U» …. Por lo general se traduce así «los egipcios nos hicieron mal a nosotros», en el sentido de «nos trataron con crueldad».  Pero como el lector sabrá  esta palabra, VAYARE’U se puede leer también (o principalmente) en Hif’il, la construcción verbal transitiva. Y cuando se lee de esta manera el pasuq dice:  «Y los egipcios nos hicieron malos a nosotros», en otras palabras, «nos hacian ver mal», o en una sola palabra: nos «demonizaron». Como mi hijo Ya’aqob escribe en. su comentario a la Hagadá, el Faraón era «un dictador que señalaba al pueblo de Israel como una entidad irracionalmente mala, culpable de todas las desgracias que afectaban a los ciudadanos egipcios. La propaganda del Faraón era absurda. Básicamente, le decía a su pueblo:.. «Este pueblo de Israel, es muy astuto, tenemos que ser más astutos de lo que son, sino, cuando nos ataquen, los Israelitas se unirán a nuestros enemigos por pura malicia . Su objetivo en unirse a nuestros enemigos será hacernos daño, nada más. De hecho, después de que nos ataquen, van a escaparse de Egipto! «. Los judíos son malos, repetía una y otra vez este precursor de Goebbels. Y de esta manera culpaba sistemáticamente a los judíos de todas las desgracias posibles. El faraón tuvo éxito en erradicar  la impresión positiva que Yosef había dejado en Egipto hace unos pocos años. Sin Yosef los egipcios habrían perecido en la peor hambruna que los haya afectado en su historia. En ese momento, reconocieron a Yosef «nos has salvado la vida!» Pero las contribuciones judías a la sociedad se pueden olvidar tan rápidamente como el tiempo que le toma a un mensaje de odio irracional llegar a los oídos de los ciudadanos en un sistema dictatorial. «

Este fenómeno, demonización> antisemitismo, fue iniciado por el Faraón, pero se repitió innumerables veces. En 1492 la reina Isabel de España expulsó a los mismos judíos que habían hecho tan exitosa a España,  y que incluso habían ayudado a la reina en su guerra contra los árabes. Antes de expulsarnos, los judíos fuimos demonizados en España y en toda Europa, no sólo como «deicidas» (asesinos de un dios) sino también como envenenadores de pozos, usureros, y asesinos de niños cristianos con fines rituales, es decir, para hornear con su sangre las matzot de Pésaj….

Hoy en día, esta demonización se aplica sistemáticamente al Estado de Israel, que es el «judío» entre las naciones de la tierra. Israel es vilipendiado, atacado y acusado falsamente de todos los males imaginarios. El auge del antisemitismo en el mundo no es, como usualmente se suele racionalizar, la consecuencia de las demoniacas acciones del  Estado de Israel, por el contrario, el antisemitismo es la causa de la sistemática denominación de Israel .
Irónicamente, no hay institución en el mundo donde el antisemitismo se practique  más abiertamente que en las Naciones Unidas. Hasta 2013, Israel ha sido condenado en 45 resoluciones por el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas. Desde su creación en 2006, este Consejo ha promulgado más resoluciones condenando a Israel, que al resto del mundo combinado!  Hace dos semanas, por ejemplo, la Comisión de las Naciones Unidas que protege la Condición de la Mujer emitió un informe condenando a un solo país por su maltrato a la mujer – Israel!  Y lo más preocupante es que el mundo no se opone enfáticamente esta ridícula falsa propaganda antisemita. Es más, el mundo parece aceptar como algo normal y tolerable la demonización de Israel.

Tengo un ejemplo muy preocupante de las noticias de hoy. Mientras las negociaciones entre las superpotencias e Irán progresan hacia la firma de un acuerdo sobre el armamento nuclear de Iran, hay un elemento en las negociaciones que se ha ignorado por completo, y que a nadie pareciera preocuparle, ni siquiera al «mejor amigo de Israel «, los EE.UU. Irán ha dicho repetidas veces que tiene la intención «de borrar a Israel del mapa». Esta declaración, que si fuera dicha contra cualquier otro país se consideraría una declaración de guerra,  nunca fue parte de las negociaciones. En otras palabras ¿Por qué los Estados Unidos o Francia o Alemania no exigen que Irán se desdiga de esta amenaza contra Israel como parte de las negociaciones? Si Iran se desdijera abierta y públicamente de estas declaraciones beligerantes contra Israel sus afirmaciones de que está desarrollando energía nuclear con fines pacíficos sería mucho más creíbles, y viceversa? ¿Por qué no se le exige a Irán este simple gesto antes de suspender las sanciones económicas contra él?

Mientras estaba pensando en esta idea, me llego un correo electrónico de «Times of Israel» con algunas noticias muy fresca. A medida que la «hora» límite para firmar un acuerdo con Irán se acerca más y más , el jefe de la milicia iraní fue citado hoy diciendo que para Irán «Destruir Israel es un principio «no  negociable «. Vamos a ver cómo reaccionarán las superpotencias a estas intolerables declaraciones … aunque yo dudo mucho que hagan algo …

Y mientras la historia se repite,  este viernes a la noche, cuando leamos la Hagadá, nos convenceremos una vez más que «VEHI SHE’AMDA LAABOTENU VELANU», que más allá de lo que suceda con nuestros amigos y enemigos, el pueblo de Israel nunca estará solo.  HaShem siempre estará a nuestro lado, protegiendono




Ideas para un exitoso seder de Pesaj

LA MISIÓN
Este próximo viernes por la noche, 3 de abril y el sábado por la noche, 4 de abril, son probablemente las noches más importantes del año. Durante esas noches vamos a cumplir una Mitsvá muy especial: והגדת לבנך, enseñar a nuestros hijos la historia de Pésaj. Inculcar en sus mentes y corazones las memorias colectivas que darán forma a su personalidad y reforzarán su identidad judía por el resto de sus vidas. Pero, ¿cómo hacerlo? Tenemos la Hagadá, el libro que relata la historia del Éxodo y las claras instrucciones  de nuestros rabinos: enseñar a cada niño (o adulto) en el nivel de su comprensión. El resto depende de nosotros.

CAMBIO DE PARADIGMA
Yo creo que lo primero que debemos hacer para enfrentar eficazmente este hermoso desafío es cambiar nuestro paradigma de la Hagadá. Redefinir nuestro verdadero papel en el Seder de Pésaj. Si tuviera que resumir esta idea en una sola frase diría esto: «En el Seder de Pésaj, no estoy leyendo la Hagadá, la estoy ENSEÑANDO». Una vez que entendemos cuál es nustra responsabilidad podemos estar un poco asustado. ¿Por qué? Porque vivimos en una era de tecnología avanzada, de videos educativos sofisticados y pizarrones inteligentes. Y nosotros, los padres, debemos sentirnos intimidados de competir contra los smartphones y los iPads y enseñar a niños cuya capacidad de atención (attention span) es cada vez más corta. Y además de nuestros hijos, lo más probable es que tengamos otras personas (adultos) participando en nuestro Seder. Entonces, ¿qué debemos hacer para enseñar la Hagadá a nuestra heterogénea audiencia?

DIVIDE Y CONQUISTARAS
Mi primera recomendación es que se divida la Hagadá de manera que todos, los familiares e invitados, puedan participar . Para eso, hay que hacer los deberes YA. Escribir un email o un Whatsapp HOY a cada miembro de la familia y a los  invitados y asignar a cada uno de ellos una parte de la Hagadá.
Pedirle a los adultos, por ejemplo, que se preparen para leer un párrafo de la Hagadá en hebreo o en español, o que expliquen o comenten brevemente alguna idea o algún texto de la Hagadá. Para los que van a leer, hay que escanear y enviarles por correo electrónico los textos. Para los que van a hacer comentarios, hay que animarles a que pregunten a los rabbanim o a personas que estudien Torá o en su defecto que busquen online material relacionado con la Hagadá. Hay que pedirles que expliquen por ejemplo, uno de estos conceptos: «Pesaj», «Matsa», «Maror», «¿por qué bebemos 4 copas de vino», «¿por qué comemos reclinados?», «¿por qué comemos Jaroset», etc.
A los más pequeños, hay que pedirles que se preparen para cantar (y tal vez explicar) «Ma nishtaná», «Abadim Hainu o «Jad Gadya «. Que dibujen ciertas partes de la Hagadá y traigan sus dibujitos  al Seder, para que expliquen a todos sus «obras de arte».

QUE SEA PERSONAL Y RELEVANTE
Cuando enseñamos algunas de las ideas de la Hagadá, tratemos de que sea relevante y actual. Y así podremos invitar a cada uno de los adultos que comparten nuestra mesa a expresar su opinión sobre el tema.
Un ejemplo:
«rab ve’atsum mimenu» (Ex. 1:10). En la Hagada leemos que aunque los judíos eran sólo una minoría, los egipcios temían (o justificaban su abuso diciendo)  que los judíos eran demasiado poderosos, y entonces decidieron esclavizarlos. Los judíos en Egipto ¿eran muy influyente? ¿Cuál es la influencia de los judíos, digamos, en Estados Unidos, México o Argentina, en comparación con su número? ¿Cuál es la influencia del Estado de Israel, «el judío entre las naciones del mundo», en comparación con su tamaño o población? Por ejemplo: ¿cuántas veces han aparecido noticias en el ultimo año sobre China o la India (más de 2,6 millones de personas, entre los dos países) en la primera plana del New York Times, y cuántas veces han aparecido noticias acerca de Israel (8.000.000 de habitantes) en la portada del mismo diario? ¿Somos los judíos demasiado poderosos? ¿Es la  desproporcionada influencia judía en la sociedad gentil la mejor excusa para justificar el antisemitismo, ayer, hoy y mañana? ¿Qué tipo de influencia es una buena influencia? ¿Que significa ser Or laGoyim?

(Voy a traer más ejemplos de este tipo de temas BH en los próximos días)

EL SEDER NO PUEDE SER ABURRIDO
No olvidemos la premisa más importante de esta noche:  QUEREMOS QUE LOS NIÑOS SE QUEDEN DESPIERTOS HASTA EL FINAL. Y tampoco queremos que los adultos se duerman. Podemos pedirle a algunos de nuestros invitados, especialmente los niños, que actúen algunas partes de la Hagadá, por ejemplo, las diez plagas o los cuatro hijos.
Para las 10 plagas podemos traer pequeñas ranitas de plástico, máscaras de animales para «deber», pelotas de ping pong para «granizo», lentes de sol negros de cotillon para «oscuridad», etc.
Podemos organizar juegos educativos para los niños, aparte del Afiqomán, como una búsqueda del tesoro de Pésaj, etc. Es muy recomendable tener 20 preguntas y respuestas listas, y lo más importante, con 20 (o más) pequeños premios para recompensar las respuestas correctas de los niños: cada vez que el Seder está a punto de salirse de control, o si está aburrido o si se necesita la atención de todos, se puede preguntar una de esas preguntas, mostrando primero el premio que se recibirá. Así podremos recuperar control cobre el Seder cada vez que sea necsario.

EL SECRETO
Creo que ya no es necesario que les diga cuál es el secreto de un exitoso seder de Pésaj , pero  por si algún lector aún no lo captó, aquí va: Preparación Preparación Preparación. No podemos improvisar. Hay que anticipar y preparar el Seder hoy.  Dividir los roles, las actuaciones, los textos, las canciones, pedir que hagan los dibujos, comprar las pelotitas de ping pong, etc . Y escribir el email a nuestros familiares e invitados, disculpándonos de que escribimos este email a «ultimo momento» y enviarlo hoy.


FUENTES RECOMENDADAS

Para encontrar muchisimos juegos educativos para niños incluyendo una enorme lista de preguntas para Pésaj se puede visitar estos web sites en ingles http://www.simchatyechiel.org/english/pesach.html o http://www.aish.com/h/pes/f/g/48967161.html.

También se puede visitar esta página de  aish en español con juegos para niños. (Si los lectores conocen otros sitios en español, por favor, envienme los datos).

Para encontrar decenas de Hagadot en Hebreo online ver aquí.

Para los estudiantes avanzados recomiendo este fantástico comentario de la Hagadá escrito por el rabino Don Ytsjaq Abarbanel (1437-1508) ver aquí. No se saltee la introducción, donde el rabino Abarabanel cuenta su trágica historia personal.

Para los que quieran disfrutar de una Hagadá en español antiguo, ver esta Hagadá publicada por el rab Ytshaq Yehuda Leon Templo, en Amsterdam, 1728




Las palabras de Gabriel Sassoon, en memoria de sus siete hijos

Hace una semana, en Shabbat de Parashat Vayiqra, en Rosh Jodesh Nisán, los judíos de Nueva York sufrimos una gran tragedia. Una tragedia que por su magnitud resonó en todo el mundo judío. Siete niños, de 5 a 16 años de edad, murieron en un terrible incendio. Eliane (16), David (12), Rebeca (11), Yeshua (10), Moshe (8), Sara (6), y Yaakob (5) Sassoon, Zijronam Libraja.

Cuando nos enfrentamos con tragedias, tratamos de encontrar una razón – es como un desesperado impulso humano que demanda que estos terribles accidentes se entiendan. Algo o alguien debe explicar lo inexplicable. Culpamos a los dispositivos eléctricos o a la falta de alarmas de humo . En realidad, mucha gente me pidió que en respuesta a esta tragedia escribiera algo sobre la seguridad de las Platas eléctricas de Shabbat y cosas de ese tipo. Y la verdad es que estuve a punto de hacer precisamente eso.

Fue entonces que escuché las palabras del padre de los siete niños, Gabriel Sassoon, cuando habló en la levaya de sus  hijos en Nueva York [ este es el link para escucharlo ]. Sentí que estaba escuchando una versión contemporánea de Iyob, y mi perspectiva cambió. Pensé que, si bien la seguridad es muy importante y merece toda nuestra atención, las palabras de este padre exigían una reacción más profunda.

Dirigéndose a más de mil judíos que asistieron a la levayá para honrar a sus hijos antes de ser enterrados en Israel, el rabino Gabriel Sassoon lo dijo todo. La gente vino a consolar al desconsolado padre, pero la verdad es que él terminó consolando a todos. Gabriel Sassoon es, de profesión, un maestro en una escuela judía, y ese día enseñó más de una lección. Nos recordó que muy a menudo «la gente se olvida lo que es importante en la vida …» Después de mencionar sus siete hijos, uno por uno, nombre por nombre, lágrima por lágrima, le dijo a todos los que ese día se transformaron en sus alumnos: «Tenemos que amar a nuestros hijos … Por favor, todo el mundo: quieran a sus hijos!» Simple. Verdad? Pero amar a nuestros hijos es tan obvio que tendemos a olvidarlo. Lo postergamos. No nos damos el tiempo suficiente para eso. Los amamos, pero nos olvidamos de actuar en consecuencia. Ahora, un hombre que está hablando desde la  incomparable perspectiva de alguien que lo tenía todo y lo perdió todo, nos recordó el verdadero significado de «lo que es importante en la vida.» Al oír estas palabras, estoy seguro, todo padre debe haber pensado lo que yo pensé y sentí: «Tengo que querer más a mis hijos: tengo que ser más paciente, más atento, y más interesado en sus cosas. Necesito pasar más tiempo con mis hijos «.

El Rabino Sassoon no sólo habló como un padre. También habló como un pensador. Un pensador judío que, cuando se enfrenta a una tragedia, no busca sus causas sino sus lecciones. Hubiera sido tan fácil, tan esperado, tan común, y aparentemente tan «piadoso» describir a sus niños como sacrificios y luego, reprender a la audiencia sobre los innumerables pecados que todos cometemos. Pero el rabino Sassoon se negó a justificar la teodicea, (la benevolencia de Dios vs. la existencia del mal). En cambio, él aceptó el terrible decreto. En sus propias palabras, «se rindió», se sometió ante la voluntad infinita e incognoscible de D-s.

«No entendemos nada …», dijo. Y sonaba tan creíble… «Me entrego a D-s, [al D-s que] yo sé que es todo bondad.» Al escuchar al rabino Sassoon, sentí que estaba escuchando al Iyob de nuestra generación. Iyob también lo perdió todo (aunque la comparación podría no ser muy justa, ya que, a diferencia de la familia Sassoon, la Guemará dice que Iyob puede haber sido un personaje literario, y no histórico איוב לא היה ולא נברא אלא משל היה). Iyob perdió su fortuna, su salud, y lo peor, perdió a todos sus hijos e hijas en un accidente. Los amigos de Iyob vinieron a consolarlo. Eran buenas personas, creyentes piadosos que intentaron, con las mejores intenciones, justificar ese acto letal de la naturaleza (una tormenta), que cobró la vida de sus amados hijos. «Tú debe haber pecado. D-s, que controla la naturaleza, nunca haría sufrir a los inocentes «, dijeron. Iyob escuchó a sus amigos, pero rechazó sus argumentos e insistió en defender su inocencia. Al final de la historia, HaShem se revela a Iyob en una visión, desafiando a Iyob a entender la forma en que funciona la naturaleza. La naturaleza («la Creación») tiene un mecanismo visible, predecible y relativamente comprensible, que palidece en su simplicidad en comparación con la infinita complejidad y la multidimensionalidad con que HaShem administra Su justicia con la humanidad. Iyod admite su enorme ignorancia y las inevitables limitaciones de su comprensión. Y así D-s disuade a Iyob (y al lector) de la vanidad de nuestro esfuerzo de comprender cómo funciona la justicia divina. Sin respuestas, Iyob humildemente acepta los decretos de D-s: «se rinde» y, como Gabriel Saassoon, renuncia al esfuerzo presuntuoso de descifrar los indescifrables designios de D-s.

Como Iyob, Gabriel Sassoon rechazó las explicaciones hechas a la pequeña altura del hombre para justificar su tragedia. La parte más importante de su corto pero poderosísimo discurso, en mi opinión, fue cuando mencionó una historia, tal vez una leyenda, de la época de la Inquisición. Se trataba de una mujer judía que trágicamente perdió a todos sus hijos. Ella, entonces, le dijo a D-s: «Yo amaba a todos mis hijos, y ahora se han ido. Ahora, todo mi amor está libre para Ti, y yo voy a amarte tanto como me sea posible.».  En este punto del discurso creo que todos esperabamos que el rabino Sassoon adoptará para sí mismo esta «gloriosa» expresión de piedad, lo que lo aparentemente lo hubiera transformado en un ser humano sobrehumano. En cambio, el desconsolado padre sorprendió a todos sus oyentes con una monumental manifestación de humildad, coraje y vulnerabilidad. Al referirse a la historia de la Inquisición, dijo enfáticamente: «No estoy de acuerdo con todo eso. Porque cuando amas a tu hijo, estás amando a HaShem «, que te dio a tu hijo como un regalo, «La sonrisa de un hijo, su risa, su simpatía, sus éxitos, sus sueños … todo eso es un reflejo de HaShem. Amar a la esposa o al marido, eso es un reflejo de HaShem. Amar a un total desconocido, es también un reflejo de HaShem. Cada relación humana que tenemos, es un reflejo de HaShem. Un aspecto diferente del Infinito, que tenemos la oportunidad de experimentar … Ahora, yo lo perdí todo. Y ya no podré experimentar [ese reflejo del amor divino] «.

El libro de Iyob termina con un final inesperado. Iyob, el hombre que no comprendía la justicia de D-s y que terminó sometiendo su entendimiento humano, es recompensado por Dios. Pero, irónicamente, sus amigos, aquellos que trataron de explicar y justificar la justicia de D-s, los que se auto-designaron como defensores de D-s, recibieron la orden de traer un Qorban Jattat, un sacrificio que era ofrecido para expiar un pecado no intencional…

Ahora, mientras nos preparamos para nuestro primer Shabbat después de esta tragedia, y sabiendo que todos revisaremos nuestras Platas de Shabbat y nuestros detectores de humo,  dejémonos inspirar por  las palabras de Gabriel Sassoon. Honremos la invitación de Sassoon de abrazar y disfrutar  «lo más importante en nuestras vidas». Concentremos nuestras energías en practicar el jesed (bondad) uno por el otro. En amar a nuestra esposa o esposo, en ocuparnos de aquellos que nos necesitan.

Y aquellos de nosotros que tenemos la inmensa fortuna de tener un hijo – recordemos que lo tenemos todo! El privilegio de tener seres queridos, nos permite la oportunidad  de reflejar en los demás el amor de HaShem por nosotros. Las cosas buenas que hacemos uno por el otro ,son un reflejo de lo que haShem hace por nosotros.

Si este Shabbat obramos así, respondiendo al urgente llamado del Rab Gabriel Sassoon, vamos a honrar la memoria de sus preciosos hijos, de la manera que él lo quiere.

Pido a Dios que bendiga a la esposa de Gabriel Sassoon, Gayle Sassoon, y a su única hija sobreviviente, Siporah, de 15 años, con salud y una larga vida.

SHABBAT SHALOM



PESAJ: Venta, inspección de Jamets; Pésaj fuera de la ciudad

VENTA DE JAMETS (continuación de ayer)
Ayer explicamos el tema de la venta de Jamets (ver aquí) y enviamos unos links con las fuentes correspondientes. Desafortunadamente los links no funcionaron bien.  Este es el LINK del articulo del Rab Elyahu Zini, que como mencionamos ayer, explica los inconvenientes Halajicos de la venta del Jamets y aboga por regresar al modelo original: deshacernos del Jamets. Al final del artículo, el lector encontrará la referencia del texto original del Rab Zini en hebreo.

BEDIQAT HAMETS
Esta semana hemos explicado las prohibiciones bíblicas de mantener cualquier producto comestible Jamets en nuestras propiedades. Para cumplir con estas Mitsvot, primero limpiamos nuestras casas, eliminando de las mismas cualquier alimento Jamets que encontremos. Luego, la noche antes de la noche del Seder, lo que este año corresponde al jueves 2 de Abril de 2015, después del anochecer (tset hakojabim) se procede a realizar la bediqat Jamets, es decir, la inspección final para buscar cualquier alimento Jamets que pueda haber quedado en nuestra propiedad después de la limpieza.

¿Cómo hacemos la bediqat Jamets?

Con la ayuda de una vela o una linterna, buscamos en todo lugar de nuestra casa donde podríamos haber traído, comido o almacenado algún tipo de alimento Jamets.  Debemos buscar muy especialmente en la cocina y en todos los espacios de almacenamiento de alimentos como la despensa, el refrigerador, el congelador o freezer y todos los otros lugares en los que por lo general se guarda comida. En la «bediqat Jamets» estamos buscando especialmente «comida» Jamets (galletas, pasta, alimentos congelados, sopas en polvo, alimentos de bebe, cereales, latas de cerveza, una botella de whisky, vodka de grano, bebidas de fibra, dulces, golosinas, etc.) que podríamos no haber detectado durante el proceso de limpieza.

Debemos buscar también en nuestros coches, ya que no es inusual comer o llevar  comida en el carro. Los automóviles deben ser lavados y limpiados antes de la noche del jueves, en preparación para la bediqa. También debemos inspeccionar nuestra oficina o lugar de trabajo, porque a menudo se trae comida o aperitivos allí. Si no es posible buscar en estos lugares el jueves por la noche después  que hacemos la bediqa en casa, hay que revisar nuestros coches y lugar de trabajo antes de la noche del jueves, o durante el viernes por la mañana, 3 de abril

PESAJ FUERA DE CASA
Cuando una familia va a pasar Pésaj fuera de la ciudad, la última inspección de Jamets (bediqa) en la casa de la familia se deberá realizar la noche antes de salir de casa. Si ese día es antes del Jueves 2 de abril , no se deberá recitar la berajá antes de la bediqa. El Jamets encontrado deberá eliminarse, como se explicó ayer. En este caso, la noche de la bediqa, el jueves 2 de abril, la familia deberá buscar  e inspeccionar el Jamets en la casa o en la habitación del hotel donde se encuentran alojados para Pésaj. Esta vez se deberá recitar la berajá antes de la inspección.

Los detalles de la Berajá y otra información de la bediqa los mencionaremos B’H más cerca de Pésaj.




PESAJ: ¿Vender o no vender el Jamets?

En nuestros días, en la mayoría de las comunidades judías, Ashkenazí y Sefaradí, se organiza un sistema  de venta de Jamets por el cual los miembros de la comunidad asignan al rabino coo su representante legal para vender su Jamets. Este procedimiento es una indulgencia Halájica para evitar que la gente mantenga productos Jamets de alto valor (whisky, vodka, etc.) en su propiedad durante Pésaj. Obviamente, la validez de esta venta no debe ser cuestionada, ya que cada rabino conduce a su comunidad de acuerdo a lo que considera lo mejor para sus feligreses.

Personalmente, yo no vendo mis Jamets y aliento a los miembros de mi comunidad a hacer lo mismo.

¿Por qué? Poeque históricamente, los judíos sefaradim  no practicaban  la venta de Jamets. Simplemente se deshacían de su Jamets antes de Pésaj, en conformidad con la mitsva de «tashbitu», como lo explicamos ayer.

El único caso excepcional en el que los rabinos sefaradíes autorizaban la venta de Jamets era el caso de una tienda de alimentos. En este caso, un comprador no-judío hacía un pago inicial por la mercancía Jamets y desde el momento que se realizaba el pago, la mercancía Jamets pertenecería por completo al comprador, y él era el único responsable por esos productos en caso de daños , robo, etc. Así, por ejemplo, si los productos Jamets eran robados durante Pésaj, el comprador tendría que pagar por ellos al vendedor después de Pésaj. El comprador también alquilaba la tienda donde se almacenaba la mercancía durante Pésaj y tenía en su posesión las llaves de la tienda, lo que le concedía un acceso total y sin restricciones a las instalaciones donde estaba el Jamets. El comprador no-judío tenía derecho a usar, consumir o incluso comerciar con la mercancía Jamets durante Pésaj. Luego, y si así lo deseaba,  podía pagar el balance y mantener la mercancía para sí mismo.

Como se puede ver, aunque la intención era que el vendedor judío finalmente volviera a comprar sus productos Jamets después de Pésaj, la transacción de venta era real, legal y vinculante. Los rabinos no habrían aceptado una transacción de venta «cuestionable» o ficticia que no cumpliera con los requisitos legales de venta de acuerdo a la ley judía y de acuerdo a las leyes locales porque, obviamente, los Jajamim tomaban muy en serio la prohibición de poseer Jamets durante Pésaj.

Excepto para los propietarios de negocios de alimentos, en las comunidades sefaradíes, la gente común no vendía el Jamets. ¿Qué hacían entonces con todo el Jamets sobrante, en preparación para Pésaj?

1. En primer lugar, antes de Pésaj, la gente adquiría sólo los productos Jamets que eran necesarios hasta Pésaj, evitando acumular comida Jamets extra cerca de Pésaj.

2. En segundo lugar, lo que sobraba de Jamets, si estaba en buenas condiciones, se daba de regalo o caridad a una persona no-judía, o si esto no era posible, el Jamets debía ser eliminado, como lo explicamos ayer.   Deshacerse del Jamets sobrante, tirándolo a los pájaros, peces o aun quemándolo el día anterior a Pésaj es una mitsva bíblica «tashbitu», así que no se consideraría «desperdiciar o tirar comida» (בל תשחית).

3. Si algún producto comestible Jamets queda en nuestras propiedades accidentalmente, entonces el bitul Jamets, la fórmula que pronunciamos renunciando a nuestra propiedad de cualquier Jamets que no hayamos visto y/o sacado de nuestras propiedades, previene la transgresión de poseer Jamets «accidentalmente» durante Pesaj.

Si uno sigue estos sencillos pasos, entonces no hay necesidad de «vender y comprar de nuevo»  el Jamets.

Yo, obviamente, aliento especialmente a quienes siguen las tradiciones Sefardíes, a preservar el antiguo Minhag y no vender el Jamets dejándolo en la casa, sino deshacerse de él. (Para describir los problemas técnicos halájicos concernientes al procedimiento de Mejirat Jamets, ver aquí este articulo en hebreo del rab Eliyahu Zini, o ver aquí este texto que escribí en inglés, y que espero traducir al español BH mañana.

Recuerde que uno sólo tiene que deshacerse del Jamets que es comestible (apto para el consumo humano o animal). Uno no necesita vender las ollas o sartenes, o cualquier cosa que pueda contener Jamets «invisible» (jamets balú’a). Los utensilios Jamets deben ser guardados en un lugar cerrado durante Pésaj.

Como ya lo explicamos, las pastillas o píldoras médicas que se tragan con agua, los perfumes, cosméticos, artículos de limpieza o cualquier artículo no comestible, puede quedar en nuestra posesión durante Pésaj, independientemente de su composición.

Con respecto a productos comestibles: Uno puede mantener hasta después de Pésaj cualquier producto alimenticio que no contenga algún ingrediente o derivado de  estos cinco granos: trigo, avena, cebada, centeno y espelta (FYI, todo producto que contenga gluten, una proteína que se encuentra en estos granos,  es Jamets).

En caso de duda respecto a la composición de un producto alimenticio o si esta permitido mantenerlo durante Pésaj, consulte con el rabino de su comunidad.

Conclusión: la venta o no venta del Jamets, es en última instancia una indulgencia o rigurosidad halájica, una elección que debemos tomar en consulta con el rabino de nuestra comunidad.



PESAJ: Entendiendo la prohibición de poseer Jamets

בל יראה
בל ימצא
השבתת חמץ

Uno de los elementos que hacen que la prohibición de Jamets sea algo excepcional es que, a diferencia de otros alimentos prohibidos, la prohibición de Jamets incluye también la restricción de su posesión.

Vamos a explicar detalladamente este tema que no es muy conocido.

Hay tres Mitsvot en la Torá relacionadas con la prohibición de Jamets que no se refieren a consumir Jamets:

1. bal yeraé (lit. tu Jamets, no será visto en tu propiedad, Ex. 13: 7).
2. bal-yimatsé (lit. tu Jamets no será encontrado en tu propiedad, Ex. 12:19).
3. tashbitu. Durante la víspera de Pésaj eliminarán el jamets de sus propiedades (Ex. 12:15).

La Torá Shebe’al pe, es decir, la tradición halájica que es la máxima autoridad legislativa, explica que los primeros dos versículos, esas dos prohibiciones, deben ser consideradas como una sola e idéntica prohibición: la prohibición de poseer Jamets durante Pésaj. Maimónides consagra casi un capítulo entero, el capitulo 4 de Hiljot Jamets Umatsa, para explicar este concepto. Entre otras cosas aclara que aunque el jamets se encuentre fuera de mis propiedades físicas, si ese Jamets me pertenece, estoy transgrediendo estas 2 prohibiciones Bíblicas.   También clarifica que si por ejemplo, en mi casa hay Jamets, pero pertenece a un gentil, no estoy transgrediendo ninguna prohibición.  En Halajá 2, dice: «… si el Jamets pertenece a un judío, a pesar de que ese Jamets esté enterrado, o se encuentre en otra ciudad, o se le haya entregado a un gentil,  se estará violando [los mandamientos]: «[Jamets] no será visto…» y «[Jamets] no será encontrado.»
En otras palabras, lo que esta prohibido por estos dos pesuqim es «poseer» Jamets.

También tenemos la tercera mitsva llamada tashbitu

3. Durante el primer día [la víspera de Pésaj] eliminarán el jamets de sus propiedades (Ex. 12:15). Una vez más, la Tora shebe’al pe explica que está Mitsvá se refiere a «finalizar nuestra posesión de jamets» antes  que comience Pésaj.

En resumen, y siempre de acuerdo a Maimónides, hay dos prohibiciones idénticas (un caso excepcional!) y un mandamiento positivo, afectados a un solo tema: poseer Jamets durante Pésaj.

¿Qué hay que hacer entonces para «desposeer» nuestro Jamets antes de Pésaj? En un sentido estricto, (y siempre siguiendo la opinion de Maimónides) estas tres mitsvot se podrían cumplir a la vez con un solo acto: el «bitul jamets».  El bitul Jamets, también conocido como kal jamirá, es una declaración verbal por la cual una persona, privadamente,  renuncia a la posesión de cualquier Jamets que le pertenezca, independientemente de dónde se encuentre ese Jamets.  Al declarar que uno renuncia a la posesión de su Jamets, y afirmar que de ahora en más mi jamets se considera «sin dueño» (hefqer) uno estaría  1.  Cumpliendo la Mitsvá de «poner fin a la posesión de su Jamets» y 2. No estaría transgrediendo las dos prohibiciones de la Torá de poseer Jamets durante Pésaj.

Pero, evidentemente, esto no es lo que hacemos para Pésaj. Los Rabinos de la Gemará (Jazal) explicaron que habría un par de complicaciones prácticas si sólo «declaramos» que nuestro Jamets ya no tiene dueño y no lo sacamos de nuestras casas. En primer lugar, dijeron, podríamos declarar que no somos más dueños de nuestro Jamets, pero si poseemos algo Jamets valioso (una caja de whisky, por ejemplo), estaremos «realmente» renunciando con sinceridad a nuestra posesión de ese Jamets? En segundo lugar, dijeron los Jajamim, que el Jamets es uno de los alimentos más comunes (pan, galletas, pasta, etc.), por lo que incluso si declaramos que nuestro Jamets ya no nos pertenece, si no sacamos el Jamets de nuestras casas, correríamos el riesgo de comer Jamets accidentalmente …

Es por esto que nuestros Rabinos de la Gemará nos instruyeron deshacernos físicamente de nuestro Jamets antes de que comience Pésaj.  Al final de este proceso (conocido también como»bi’ur Jamets» o eliminación física del Jamets) hacemos el bitul Jamets como lo explicaremos en las siguientes líneas.

Hay cuatro pasos, entonces, que debemos tomar para 1. evitar transgredir las dos prohibiciones bíblicas de poseer Jamets 2. realizar el cumplimiento de la Mitsvá de poner fin a nuestra posesión de Jamets antes de Pésaj, 3. Seguir las directivas de nuestros rabinos que nos instruyeron sacar el Jamets de nuestras propiedades.

(1) Primero debemos limpiar nuestras casas, coches, oficinas y otras propiedades, antes de que comience Pésaj para identificar y eliminar todo Jamets de nuestras propiedades.

(2) Tenemos que realizar una inspección final de todas nuestras propiedades para asegurarnos de que hemos retirado todo el Jamets que se encuentre en las mismas. Esta inspección o búsqueda de Jamets se llama «bediqat Jamets.

(3) Tenemos que deshacernos físicamente de nuestro Jamets, regalándolo a un gentil si se trata de alimentos en buen estado, tirándolo a los pájaros o peces, si se trata por ejemplo de miguitas de pan, o quemándolo, etc. (be’ur hamets).

(4) Una vez que nos deshacemos del Jamets, en la mañana de la víspera de Pésaj,  debemos declarar que todo Jamets que nos pertenezca, que hayamos sacado o que no hayamos sacado de nuestra propiedad, ya no nos pertenece más, y de ahora en adelante se considerará sin dueño (hefqer) como si fuera polvo de la tierra. Esto es el bitul jamets.




PIRQUE ABOT: ¿Qué es el alma?

דע לפני מי אתה עתיד ליתן דין וחשבון

Aqabiá ben Mahalalel nos explica que la mejor forma de evitar pecar es recordar que luego de esta vida daremos cuenta ante D-s por lo que hemos hecho mal en este mundo.  Pero una vez que dejamos este mundo, ¿De qué manera ocurrirá este juicio?

Como dijimos anteriormente, nuestros Sabios nos enseñaron que el alma sobrevive la muerte del cuerpo.  Y que son nuestras almas las que se enfrentarán al Todopoderoso en el juicio celestial.

Hoy me gustaría explicar, muy brevemente, a qué nos referimos  cuando decimos «alma», o en hebreo neshamá.

En realidad, la mejor forma de describir el alma sería a través de la formula matemática:  ALMA  = YO – MI CUERPO. Vamos a profundizar un poco esta ecuación.

1. ALMA MORAL: Para entender neshamá hay que pensar en  «mente»,  en oposición a «cerebro».  Mi mente (Yo!) es la que decide, la que toma las decisiones. Nuestra libertad de elección no es una función cerebral o natural. Los animales tienen cerebro, y hasta cierto tipo de inteligencia Pero los animales no pueden tomar una decisión moral. En otras palabras, no pueden decidir entre un  «instinto» y un «valor». Por ejemplo, si un animal tiene hambre no puede decidir no comer y darle la comida a un animal de otra especie. Los animales no tienen «alma», sino instintos de supervivencia. El ser humano, por el contrario, puede tomar una decision moral, y elegir no comer y darle esa comida a otra persona.  La que toma este tipo de decisiones es el alma/mente. El alma es el verdadero «yo».

2. CONCIENCIA, MEMORIA: Más allá de la mente, el alma contiene -y retiene después de morir- nuestra identidad y conciencia. En otras palabras, aunque nuestros cuerpos mueren, todavía preservamos la noción de quiénes somos y fuimos, y en cierta forma, aunque desprovistos de cerebro , aún podemos pensar y percibir, obviamente de una manera completamente diferente a la que estamos acostumbrados.  Tan distinta qué es imposible imaginarla, cuanto más, describirla con palabras.  Cuando decimos que el alma preserva la «memoria» nos referimos a la película de nuestras vidas. No estamos hablando de las filmaciones que registran nuestras fiestas de cumpleaños o las vacaciones en Disneylandia, sino particularmente la memoria de nuestros actos morales: lo que hicimos bien y lo que hicimos mal, hacia D-s y hacia el prójimo.  Fue mi «alma» (yo!) quien decidió actuar bien o mal.   Eso es lo que dice Aqabia ben Mahalalel, es mi alma (YO menos MI CUERPO), mi conciencia, la «mente», quién tomó las decisiones, y quien enfrentará el juicio final.

3. MADUREZ ESPIRITUAL: Más allá del juicio final, los Jajamim también hablan del placer del mundo por venir. Este placer fue descripto como «el placer de estar frente a la Presencia Divina» y este placer depende totalmente del nivel de madurez que alcanzó nuestra neshamá. El alma/neshamá tiene la potencialidad de crecer. Y al igual que nuestro cuerpo, la neshamá necesita ser alimentada para crecer o «madurar».   Si no, no es que el alma muere, pero quedará en un estado «infantil», de subdesarrollo, incapaz de percibir y disfrutar de la Presencia Divina en el mundo por venir. Cómo si alguien estuviera escuchando el mejor discurso del mejor orador del mundo, pero no entiende su idioma. ¿Cómo crece nuestra neshamá?  Es a través de nuestra neshamá que establecemos nuestro contacto con D-s. Nuestra conexión con D-s, ידיעת השם se incrementa a través de nuestra neshamá. A diferencia de nuestro cuerpo, que HaShem formó del polvo de la tierra,  el alma proviene directamente de HaShem. Y su evolución depende de esta conexión con D-s: el alma de un Yehudi crece cuando estudiamos Su Torá, cuando rezamos a D-s y cuando hacemos Su voluntad.   Si nuestras almas no tienen y mantienen esta conexión con HaShem, entonces el alma permanece en su estado inmaduro, infantil: se hace irrelevante, y sin una neshamá madura nos podemos transformar en seres egoístas o materialistas.

Mañana, BH, vamos a escribir sobre un Jajam, rabbi Shimón bar Yojai, que llegó a un nivel espiritual altísimo, tan alto que, excepcionalmente, el diá que falleció, Lag La’Omer,  se celebra como si se tratará de su «graduación» (o Hilulá, como decimos los Sefaradim).




El rab Moshé Alshej haQadosh (1507- 1600)

El Rabino Moshe Alshej nació en Adrianopoli, (hoy Edirne en Turquía) en 1507. A temprana edad, su familia se trasladó a Salónica, donde estudió en la prestigiosa Yeshiva de Rabí Iosef Taitatsaq. En 1535 se trasladó a Safed (צפת) donde se convirtió en uno de los más importantes discípulos del rabino Yosef Caro, el autor de la Shuljan Aruj. El Rab Iosef Caro ordenó al rabino Alshej y se convirtió en su virtual sucesor liderando el Bet Din de Safed después de la muerte del rabino Caro. Entre los estudiantes de Rabi Alshej podemos mencionar al famoso Rabino Jaim Vital (1542-1620) y el rabino Yom Tob Tzahalon (1559-1638).

A pesar de que fue considerado por muchos historiadores como predicador o agadista, el rabino Alshej se describe a sí mismo como un Talmudista. Así escribió en esta nota autobiográfica:

«Nunca me orienté a los temas demasiado altos o más allá de mí. Desde mis primeros días hice del estudio del Talmud mi principal ocupación, y diariamente asisto a la Yeshiba donde me he familiarizado con las discusiones de Abaye y Raba. Por la noche me dedico al análisis Talmúdico y durante el día a la Halajá. Por la mañana leo el Talmud y por la tarde los Posqim (decisiones legales rabínicas). Sólo los viernes encuentro tiempo para la lectura del Tanaj y el Midrash, en preparación para mis sermones sobre la Parasha de la semana y temas similares, que presento cada Shabbat antes un gran público…».

El Rabino Alshej era un excelente orador. El cariño y la veneración que la gente sentía por él puede ser visto por el hecho de que el rab Alshej era popularmente conocido con el título «haQadosh», el santo. Sólo unos pocos rabinos fueron conocidos por el título «haQadosh». Rabenu haQadosh (Rabí Yehuda haNasi), el Ari haQadosh, el Shela haQadosh y el Oraj Jayim haQadosh (algunos rabinos también llaman el rabino Yosef Caro «Maran haQadosh»).

Aproximadamente en 1590, después de una terrible epidemia que azotó Safed en 1589, y cuando la situación de los judíos de Safed era insostenible, el rabino Alshej visitó las comunidades judías de Siria, Turquía y Persia con el fin de recaudar fondos para los Yehudi de Erets Israel. Rabino Alshej fue quien estableció la famosa «Qupa de Ribbi meir ba’al hanes» que fue una enorme ayuda para los judíos de Israel.

La última información sobre su paradero proviene de Damasco. Participó allí de una sesión de la corte rabínica en la primavera de 1593. Murió el 13 de Nisán del año 1600, y está enterrado en Safed, Israel.

SUS LIBROS

El Rab Moshe Alshej haQadosh fue un escritor muy prolífico. Escribió respuestas rabínica que fueron recogidas en su libro más importante conocido como Sheelot utshubot Mahara»m Alshej. Este importantísimo libro consiste en una colección de 140 casos en el que fue consultado de todo el mundo judío.

Algunos de sus otros libros son,

«Torat Moshé», es tal vez el más conocido de sus libros. Un comentario sobre el Pentateuco

«Marot haTsobeot», sobre los profetas y sus profecías,

«Romemot E-l», sobre el libro de Tehilim.

«Rab Peninim», sobre Mishle.

«Helqat Mehoqeq», sobre el libro de Job.

«Shoshanat ha-‘Amaqim», sobre Shir Hashirim.

«Ene Moshe», sobre Ruth.

«Habatselet ha-Sharon» sobre el libro de Daniel.

«Yarim Mosheh» sobre Pirqe Abot. Haga clic aquí para descargar este libro.