Rabbi Aquiba y los peces judíos

DESOBEDIENCIA CIVIL

Alrededor del año 130 de la era común, 60 años después de la destrucción del Segundo Bet haMiqdash, los terribles decretos del emperador Adriano incluían la prohibición de estudiar y enseñar Torá. De esta manera, el malvado emperador romano buscaba borrar la Torá de la mente y el corazón de los judíos. Adriano sabía que mientras lo judíos fueran fieles a su Dios y obedecerían Sus leyes no lo considrarian a él como el soberano de los judíos.  Ahora, el decreto de Adriano dejaba a los judíos con una sola alternativa: la desobediencia civil. Los judíos se rebelaron contra este decreto y algunos de ellos pagaron este acto de fe con sus vidas. Sin embargo, no todos los judíos estaban de acuerdo en que había que luchar y arriesgar la vida para preservar la Torá. Tal como ocurre el día de hoy, en aquellos tiempos también había judíos a los que no les importaba vivir como romanos. Estos judíos asimilados criticaron a los Sabios los acusaban de “provocar a los romanos” y de “aumentar el antisemitismo” promoviendo la Torá. La Gemara en Berajot 61b registra un fascinante encuentro entre dos judíos con puntos de vista opuestos sobre este tema. Uno de ellos era nada menos que Rabbi Aquibá, el rabino más destacados de esa época.

EL PRIMER ENCUENTRO

 Esta historia transcurre durante el año 134 o 135. Ribbi Aquibá nació en el año 50, por lo que cuando ocurrió esta historia debió tener alrededor de 80 años. Desafiando el decreto de los romanos, Rabbi Aquibá enseñaba Torá en público. La Gemara nos cuenta acerca de un judío asimilado llamado “Papos hijo de Yehuda” ( פפוס בן יהודה). Lo primero que notamos es que este individuo ya había adoptado un nombre latino, “Papus”, desligándose de esta forma simbólica, pero muy elocuente,   de su pasado judío, representado por el icónico nombre de su propio padre: “Yehudá” (que significa «de judea» o «judío»).  Esta persona con un pasado hebreo y un presente romano se enfrentó a Ribbi Aquibá cuando enseñaba la Torá y le dijo: “Aquibá, ¿no tienes miedo de provocar a los romanos? Te atraparán y te condenarán a muerte por enseñar Torá».  Así, para Papos, los judíos que viven como judíos «provocan la ira de los romanos». Y la única forma en que los judíos podemos vivir en paz, y evitar el antisemitismo es viviendo como los romanos. Es asombroso ver lo relevante de esta historia, que tiene 2000 años de antigüedad, y no ha caducado. Millones de judíos en Estados Unidos y en el mundo piensan o actúan de una manara muyn parecida a la de Papos en esos tiempos.

EL ZORRO Y LOS PECES

Ribbi Aqiba le respondió a Papos con una extraordinaria parábola: Una vez, un zorro caminaba cerca del río y vio a los peces correr de un lado a otro, como si huyeran de algún peligro. El zorro, que trató de engañar a los apetitosos peces y les preguntó: ¿De qué están huyendo? Y los peces le respondieron: Nos escapamos de las redes de los pescadores .  Entonces el astuto zorro les dijo: ‘¿Por qué no suben a la orilla aquí junto conmigo? Aquí podrán vivir a salvo de las redes de los pescadores. Los peces le respondieron  al zorro: No se puede creer que digan de ti que eres tan inteligente: no te das cuenta que si en el agua, que es nuestro hábitat natural, tememos por nuestra vida, ¿cómo crees que podamos sobrevivir fuera del agua?  Ribbí Aqiba le explicó entonces la páranla a Papos :  La situación a la que nos enfrentamos los judíos en este momento es similar a la de los peces. En primer lugar, la Torá es para los judíos, lo que el agua es para los peces. Mientras sigamos dentro de nuestra Torá, aunque eso nos exponga al peligro, podemos seguir respirando y tratando de sobrevivir y evitar ser asesinados  por los soldados romanos que nos persiguen.  Pero si aceptamos la engañosa invitación del zorro, el gobierno romano,  y abandonamos la Torá, saltando fuera del agua, estaremos cometiendo suicido.

DOS TIPOS DE ROMANOS

Ribbí Aqiba le clarificó a Papos que hay dos tipos de romanos. El pescador y el zorro. Ambos buscan lo mismo: ¡tragarse a los peces! Hacer desaparecer a los judíos.   La única diferencia es que los pescadores no ocultan su intención. El ejército romano persigue a los judíos y tiende sus redes a plena luz del día y no trata de disimular su intención letal. El zorro, por otro lado, es más sutil. Los politicos e intelectuales romanos nos invitas a unirnos con ellos y vivir  juntos como un solo pueblo: el romano. Los romanos –como antes lo hicieron los griegos– ofrecían a los judíos la “Pax Romana”: formar parte del poderoso imperio romano, con una sola condición. Que los judíos simplemente salgan del agua, dejen su Torá. Ribbi Aquiba concluyó: “Prefiero estar expuesto a los pescadores y ser atrapado en el agua, que cometer suicidio espiritual. Y que te quede claro: una vez afuera del agua, cuando ya no puedas respirar como judío, el zorro te va a devorar. Esa fue su intención desde el primer momento” . 

Eventualmente Ribbí Aquibá fue atrapado por los romanos y fue condenado a muerte. Pero mientras esperaba su ejecución tuvo un nuevo encuentro con Papos ben Yehuda: esta vez el encuentro no tuvo lugar al lado del río sino en un lugar completamente diferente: el calabozo…  

Continuará 




La guerra que comenzó el día después

La victoria de Israel en la guerra de su independencia que comenzó el 15 de Mayo de 1945 y  duró 10 meses no tiene precedentes en los anales de la historia militar. Esto se debe por un lado, el increíble coraje, ingenio y sacrificio de nuestros líderes y nuestros soldados que lo dieron todo para triunfar. Y a la intervención Divina que, batalla tras batalla, milagro tras milagro lo hizo posible. 

Para entenderlo mejor, es importante recordar lo siguiente. 

LA COMPARACION DEL PODER MILITAR

El mismo día que Israel declaró su independencia las tropas británicas que habían estado allí desde 1922 abandonaron Israel. Inmediatamente después, esa misma noche, los ejércitos árabes comenzaron su ataque para destruir al recién nacido estado de Israel.  Los árabes tenían absolutamente todo a su favor, política y militarmente. 

Siria, Egipto, Líbano, Iraq y Jordania se habían independizado unos años antes, y tanto Inglaterra como Francia les habían vendido armamentos para que tuvieran un ejercito organizado. Israel, por el otro lado, recién se acababa de independizar. Inglaterra, Francia y los Estados Unidos habían declarado un estricto embargo de armas que prohibía al mundo entero venderle armas a Israel.

Al comenzar el conflicto armado, la diferencia entre el poder militar de Israel y el de los ejércitos Arabes unidos no podía ser más desigual. 

Por ejemplo. 

Los árabes tenían 50 tanques. Israel tenia 1.    

Los árabes tenían 200 vehículos con artillería. Israel tenía 2. 

Los árabes tenían 140 cañones. Israel tenía 5.

Pero la diferencia más importante era en la fuerza aérea. Los ejércitos árabes tenían 60 aviones de ataque y 14 aviones de transporte. Israel, al comenzar la batalla no tenía un solo avión. 

LA LOGICA DE LA GUERRA

Antes de continuar, quisiera detenerme aquí y reflexionar por unos segundos: en primer lugar es totalmente comprensible que los árabes hayan querido interpretar la declaración de independencia de Israel como un acto de guerra. Era de esperar que comenzaran esta guerra, ya que las chances de ganarla, con esa absoluta ventaja militar, eran del 100% .  También es entendible que los propios árabes avisaran por radio a todos los palestinos que vivían en Israel my no iban a tomar parte activa en la guerra que se retiraran de Israel. Y les aseguraron que iban a regresar muy pronto, cuando la corta guerra hubiese terminado y todos los judíos hubiesen sido “echados al mar” (un eufemismo de: “asesinados”). Cientos de miles de palestinos abandonaron el territorio de Israel y de esta forma los mismos países árabes crearon el “problema de los refugiados palestinos” por el cual nunca se hicieron cargo, y hasta el día de hoy siguen culpando a Israel. 

¿QUIÉN NO ES RELIGIOSO? 

Lo que resulta inconcebible es que, sabiendo la inferioridad militar, los líderes de Israel hayan tomado la decisión de declarar la Independencia de Medinat Israel, habiendo sido advertidos del inminente ataque árabe. Esta decisión no tenía sentido ni desde un punto de vista militar ni desde un punto de vista lógico. Viendo los números, uno solo puede pede pensar que ra un acto suicida.  Aunque hay otra posibilidad. Una teoría que me gustaría compartir con ustedes basándome un poco en lo que dicen los Rabinos de la Kabbala, que todo judío, incluso un judíos secular,  tiene un “nitzotz”, una chispa de Emuná escondida. Una conexión Divina, quizás no concientizada, que está allí, como el piloto encendido de un termotanque.  Y que en momentos críticos, a veces en temas de vida o muerte, enciende el alma judía.    Creo que David Ben Gurión y todos los lideres israelíes “seculares” de ese tiempo, cuando decidieron declarar el establecimiento de Israel, tuvieron un momento de inspiración Divina. Una chispa de Fe en Dios encendió sus almas y los llevó a actuar como Najshón Ben Aminadab, el hombre que ,cuando el pueblo judío estaba escapando del Faraón, se metió al mar hasta que el agua le llegó a sus narices y continuó. Sabiendo que el mar se iba a abrir.  Los lideres de Israel (milagrosamente, si se quiere) también se entregaron a un milagro que tenia que ocurrir y ocurrió. No encuentro otra explicación. 

EL MILAGRO QUE SE HIZO ESPERAR

El mundo entero estaba seguro que la derrota de Israel era cuestión de días, o en el mejor casos de algunas semanas.  Y no estaban muy equivocados. Durante las primeras semanas los ejércitos árabes avanzaron significativamente y llegaron hasta Ashdod,  quedando a solo 30 kilómetros al sur de Tel-Aviv.  Desde Ashdod llegaron hasta Hebrón y de esa manera, estaban por dividir al Neguev del resto del país. 

La poderosa legión jordana, que había sido entrada por los británicos, y estaba siendo comandada por generales británicos (sic.) logró sitiar Jerusalem desde todos los flancos. El ataque frontal era inminente.  Los jordanos también capturaron Lod y el aeropuerto, que hoy es Ben Gurion International,  y se acercaban a Tel-Aviv desde el este. 

Las fuerzas iraquíes habían atacaron desde el Shomrón y se acercaban peligrosamente a las ciudades de Petaj Tikva y Jadera, camino a Tel-Aviv. 

Los Sirios habían llegado por el norte y estaban cercando la ciudad de Tiberia. Junto con las fuerzas militares del Libano estaban aislando al Galil, el norte del país, del resto de Israel. Su destino final era Tel-Aviv.   

Todos los esfuerzos del recién creado Ejercito de Defensa de Israel para defender Jerusalem de los jordanos o para repeler a las fuerzas egipcias, sirias o iraquíes fracasaron.

Durante las primeras semanas de la guerra desde el 15 de Mayo de 1948, todos los pronósticos que predecían la brutal derrota de Israel se estaban cumpliendo. A pesar del sacrificio y la valentía de nuestros soldados, la superioridad militar de los ejércitos árabes era insuperable. No había ninguna manera de que las fuerzas Israelíes pudieran soportar los ataques ni siquiera unos días más…. el final era inminente. 

Y entonces, ocurrió el primer gran milagro de esta guerra.  Fue el 11 de junio, el 4 de Sivan, de 1948. 

Continuará 




El inexplicable cese al fuego del 11 de Junio de 1948.

ורדפו מכם חמשה מאה ומאה מכם רבבה ירדפו ונפלו אויביכם לפניכם לחרב 

LAS 4 PEORES SEMANAS DE LA HISTORIA DE ISRAEL

La guerra de independencia de Israel fue el conflicto armado más crítico para la supervivencia del estado judío. Comenzó el 15 de Mayo de 1948, la noche que los ingleses se retiraron de la región. Durante las primeras semanas los ejércitos árabes unidos aplastaron a Israel, que oponía una resistencia heroica, pero que no alcanzaba para detener el avance de 5 ejércitos con aviones, armas, municiones y el apoyo tácito del resto del mundo. Antes de comenzar su ataque, los árabes, muy confiados en su inminente victoria  habían dicho que “lo que Hitler había hecho no era nada comparado con lo que ellos harían con los judíos que vivían en Israel” .  Y el mundo, como en un horrible dejavú de la Shoah, permanecía en silencio. Pero HaShem estuvo con nosotros.  Y lo inimaginable ocurrió. Israel, no solo sobrevivió la invasión de 5 ejércitos árabes sino que, contra todos los pronósticos, triunfó de una manera que nadie hubiera previsto.  

EL INEXPLICABLE CESE AL FUEGO 

El milagro más grande de esta guerra, según el Doctor Jaguí Ben Artzi, profesor de historia en la Universidad de Bar Ilan (y cuñado del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu) fue que los ejercicios árabes aceptaron un cese al fuego luego de 4 semanas de batalla. La propuesta llegaba del conde sueco Folke Bernadotte, que había sido designado como mediador entre israelíes y árabes por las Naciones Unidas. El cese al fuego proponía una interrupción de la actividad militar de los ejércitos por 4 semanas, que permanecerían en control de las posiciones que habían conquistado.    Israel, que no había conquistado nada y que estaba siendo acorralada por todos lados,  inmediatamente dijo que sí.  Lo inexplicable fue que los árabes también aceptaron este cese al fuego . Cito a Ben Artzi en su libro (hebreo) Meguilat Hatequmá VehaAtzmaut: “Pero, ¿por qué los árabes aceptaron el cese al fuego …?  En realidad ya estaban casi alcanzado todos sus objetivos militares: Jerusalem estaba rodeada y sitiada; Tel Aviv, a muy poca distancia [de caer en su poder]; el sur de Israel [el Negueb] desconectado del resto del país, y el Galil, el norte, ya había sido conquistado. Un pequeño esfuerzo más de parte de los árabes y ya estaban en el corazón de Jerusalem, Tel-Aviv, Petaj Tikva, Netania, Jadera y Afula. …”.  Ben Artzi no oculta su convicción que este cese al fuego fue un milagro de proporciones Bíblicas. Y lo compara con los textos de la Torá que explican que cuando Dios está con nosotros, los enemigos de Israel caen presas de un pánico imaginario.

EL MIEDO IMAGINARIO

Ben Artzi menciona entre otros ejemplos lo que ocurrió el 30 de Mayo de 1948. Israel comenzó la guerra sin un solo avión de combate. Mientras que los árabes tenían en actividad más de 75 aviones de guerra.  El único país que se atrevió a romper el embargo y vender armamento a Israel fue Checoslovaquia.  A fines de mayo llegaron a Israel 4 avionetas militares alemanas “Messerschmidt” desarmadas, dentro de un avión de transporte.  Los aviones fueron armados en muy poco tiempo y el 30 de Mayo, antes de que pudieran probarlos, salieron a su primera operación: tratar de frenar a las fuerzas egipcias que se encontraban a sólo 30 kilómetros de Tel Aviv. Los aviones atacaron por sorpresa a los egipcios, pero no causaron severos daños, ya que los equipos de ataque no funcionaban muy bien. Sin embargo, el comandante egipcio a cargo de esa fuerza envió un mensaje urgente a sus jefes diciéndoles que “ya no podían avanzar más. Y que estaba siendo bombardeados por una fuerza muy superior a ellos”.  Todo esto era más imaginario que real.  Ben Artzi también cita el reporte de un oficial egipcio que había participado en esa batalla y que fue tomado prisionero por Israel en la guerra de 1956.  Cuando le preguntaron por qué los egipcios no siguieron avanzando hacia Tel Aviv en 1948, cuando tenían todo el camino abierto ante ellos, declaró: “En los dos ataques …. israelíes vimos algo que nos estremeció: aún después de sufrir fuego directos y cuantiosas pérdidas, los soldados israelíes seguían avanzando como si fueran “locos” (meynunín). Y entonces nos dijimos a nosotros mismos: a estos locos es imposible vencerlos. Mejor [aceptar el cese al fuego] y conformarnos con lo que hemos conquistado”.   

TODOS LOS CAMINOS QUE LLEVAN A JERUSALEM

Otro evento providencial que ocurrió fue que un joven soldado, Moshe Eshed, descubrió “de causalidad” un camino alternativo a Jerusalem, a través de las montañas, al cual llamaron “Derej Burma”.  Y por este camino pudieron enviar comida, medicamentos, armas y refuerzos. Había 100.000 judíos en Jerusalem, especialmente concentrados en la parte occidental, la Jerusalem judía . Los judíos de Yerushalayim estaban completamente aislados y atrapados por los jordanos que habían bloqueado todas las entradas a Jerusalem para evitar cualquier tipo de suministros. Si este camino, que increíblemente ni los árabes ni las Naciones Unidas descubrieron durante 6 meses , no hubiera sido encontrado, Jerusalem hubiera caído y la guerra habría terminado de otra manera…  

CUANDO LO BUENO ES LO QUE NO PASA…

Lo que no se pudo conquistar, por más que se intentó, fue la Ciudad Vieja de Yerushalayim, donde está el Kotel y el lugar del Bet haMiqdash. Al finalizar la guerra de 1948 la Ciudad Vieja quedó en poder de los jordanos, hasta la guerra de los Seis Días. El profesor Ben Artzi también ve en esta operación fallida la mano Divina.  Dice Ben Artzi que si Israel hubiera conquistado la Ciudad Vieja de Jerusalem en 1948, las Naciones Unidas hubieron demandado la internacionalización de Jerusalem, por ser una Ciudad Santa «para las 3 grandes religiones» . La presión internacional hubiera sido insostenible Israel seguramente hubiera cedido. Una vez otorgado el estatus internacional a Jerusalem, difícilmente podría haber sido cambiado, y las terribles consecuencias a largo plazo para Israel hubieran sido impredecibles.  Al final, como la ciudad Vieja de Jerusalem NO fue conquistada por los judíos en esta guerra y quedó bajo la soberanía de Jordania, nadie dijo nada acerca del estatus internacional que deberia tener Jerusalem. Las Naciones Unidas y el Vaticano permanecieron en silencio (y obviamente, nadie se quejó de que los jordanos no permitían a los judíos visitar el Muro de los Lamentos, etc.).  Cuando en 1967 Israel conquistó la Ciudad Vieja, las Naciones Unidas ya no podían demandar de Israel lo que no demandaron de Jordania durante 19 años …

https://halaja.org/2017/05/18/pirqe-abot-quien-es-sabio/
https://halaja.org/2016/05/18/pirque-abot-31-el-sindrome-del-jinete-dormido/



Jayim Weizmann, la acetona y la Declaración Balfour de 1917

אמר לו ר’ חייא: כך היא גאולתן של ישראל, בתחילה קמעא קמעא, כל מה שהיא הולכת, היא רבה והולכת

En 1914 parecía que el proyecto de obtener un estado judío propio habla fracasado. La tierra de Israel estaba en manos del imperio Otomano, quienes no veían con buenos ojos el incremento de población judía en “Palestina”. Tampoco contábamos un mínimo apoyo político internacional para crear un hogar para los judíos. La inmigración se había detenido y lo peor era que muchos inmigrantes que habían llegado a Israel en las décadas pasadas regresaban a Europa o emigraban a Estados Unidos, ya que las condiciones de vida de los casi 60.000 judíos que vivían en Israel eran muy precarias.Parecía que ya todo estaba perdido. El 28 de julio de 1914 estalló la Primera Guerra Mundial. Fue una terrible guerra que cobró la vida de unos 40 millones de personas, entre militares y civiles.  La guerra trajo también grandes e inesperados cambios en Inglaterra y en el medio Oriente. El más importante de estos cambios fue que el Imperio Otomano que había gobernado medio Oriente por más de 500 años fue derrotado. Al final de la guerra, en 1918, Inglaterra estaba a cargo de lo que hoy es Irak, Siria, Líbano, Jordania, Arabia Saudita, Egipto y por supuesto, Israel.  

LA IGLESIA Y LOS JUDIOS

En 1916 Herbert Henry Asquith renunció a su cargo de Primer Ministro de Gran Bretaña y en su lugar llegó David Lloyd George. La actitud de estos dos líderes hacia los judíos era completamente opuesta. Asquith se oponía a un estado judío. Lloyd George, por otro lado, tenía una formación religiosa diferente. Para entender su ideología deberé explicar brevemente la diferencia entre la iglesia católica y la protestante, respecto a cómo cada una vio por siglos a los judíos. El catolicismo fue fundado bajo la premisa esencial que la iglesia (latín por: “congregación”) es el Nuevo Israel. Este Nuevo Israel REEMPLAZA al antiguo Israel —es decir, al pueblo judío— como nuevo pueblo de Dios. El Nuevo Israel tiene también un Nuevo Testamento, esto es, un nuevo pacto ( como en hebreo ברית החדשה ) que reemplaza al Viejo Testamento, que “caducó con la inminente extinción de los antiguos israelitas”.  El principal problema que siempre enfrentó este dogma fundacional fue que “el obstinado pueblo judío, a pesar de estar permanentemente en vías de extinción, ¡se empecinó en seguir existiendo!” . La iglesia entonces cambió su narrativa y argumentó que la caprichosa existencia del pueblo judío era un castigo divino por el deicidio. Y prueba de eso es que los judíos están condenados a un exilio permanente (el judío errante) ¡y jamás regresarán a su tierra!. Por lo tanto, el regreso del pueblo judío a la tierra de Israel fue (y aunque luego del Holocausto se lo trate de disimular “sigue siendo”) para la iglesia católica un enorme problema fundamental, del cual no se oye explícitamente, pero persiste. Un ejemplo es la actitud hostil del Vaticano hacia el derecho del pueblo judío a la tierra de Israel y especialmente a una Jerusalem judía (ver aquí ). 

LOS PROTESTANTES EVANGELISTAS 

La actitud de los protestantes modernos hacia el pueblo judío es muy diferente. Hay un apoyo muy grande hacia una Israel judía, y no es algo nuevo. Esta actitud histórica se podría comenzar con Oliver Cromwell (ver aquí) quien sostenía que para la segunda llegada del Mesias cristiano, los judíos deberían regresar a Israel, y particularmente Jerusalem. En nuestros días este punto de vista lo ejemplifica por ejemplo Michelle Bachmann, una importante figura política en los Estados Unidos (ver aquí ). 
Hay otros evangelistas que difieren con esta creencia y sostienen que es un gran mérito en sí apoyar al pueblo judío, ya que creen sinceramente en la bendición que HaShem le concedió a Abraham Abinu cuando le dijo “Los que te maldicen serán maldecidos y los que te bendigan serán bendecidos” . Esto es evidente hoy, por ejemplo, en el masivo apoyo del vicepresidente de los Estados Unidos, Mike Pence, hacia el Estado de Israel, al igual que muchos otros líderes cristianos (ver por ejemplo aquí ). Volviendo a nuestro tema, muchos ingleses protestantes sostenían esta creencia religiosa. El caso más famoso, pero insuficientemente apreciado, es el de la escritora inglesa no judía Mary Anne Evans, mas conocida por su nombre de pluma “George Eliot”, y su novela “Daniel Deronda” (1876), donde varios años antes del primer congreso sionista articuló lucidamente sus argumentos por un estado independiente para el pueblo judío . David Lloyd George y su Ministro del exterior Arthur Balfour eran partidarios entusiastas del pueblo judío y comprendían sus aspiraciones de regresar a casa. 

Y algo más.  

LA ACETONA Y EL ESTADO DE ISRAEL

Un importante factor que ayudó a la predisposición de los británicos a ceder un hogar nacional al pueblo judío en la tierra de Israel fue la contribución a Inglaterra del famoso científico judío Jayim Weizmann (1874–1952) .Weizmann, nacido en Rusia pero nacionalizado Británico, era un químico que descubrió la formula para producir acetona a partir del almidón de grano. Hasta ese entonces la acetona era producida a partir de elementos escasos que se obtenían en minas de Chile. La acetona se usaba para hacer detonar la dinamita y su producción era cada vez más cara y más critica para ganar la guerra. El Dr. Jayim Weizmann se encargó de producir 30.000 toneladas del critico elemento químico a través del proceso conocido como “ABE fermentation”. Por este y otro descubrimientos el Dr Weizmann es conocido en el mundo científico como el padre de la fermentación industrial. Al finalizar la guerra los británicos estaban muy agradecidos por el invaluable servicio del Dr Weizmann y le preguntaron cómo lo podían recompensar por sus servicios prestados. Dicen que el Doctor Weizmann contesto: “No quiero nada para mí; pero quiero un estado para mi pueblo”. Y así fue como en 1917 surgió la Declaración Balfour, donde los ingleses aprobaban oficialmente la creación de un hogar nacional para el pueblo judío en la tierra de Israel. Este fue el principio de lo que eventualmente culminó con el milagro del nacimiento de Medinat Israel en 1948. 

Continuará 




El Estado de Israel, y el privilegio de no darse cuenta (1880-1914)

אִם יִהְיֶה נִדַּחֲךָ בִּקְצֵה הַשָּׁמָיִם מִשָּׁם יְקַבֶּצְךָ האֱלֹקיךָ וּמִשָּׁם יִקָּחֶךָ וֶהֱבִיאֲךָ האֱלֹקיךָ אֶלהָאָרֶץ אֲשֶׁריָרְשׁוּ אֲבֹתֶיךָ וִירִשְׁתָּהּ וְהֵיטִבְךָ וְהִרְבְּךָ  מֵאֲבֹתֶיךָ

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Este miércoles 4 de Mayo por la noche celebraremos Yom HaAtzmaut, el día de la Independencia de Medinat Israel. En los próximos días, en honor a esta celebración, voy a escribir brevemente acerca de los eventos más importantes que culminaron con el nacimiento del estado judío.  El regreso del pueblo judío a su tierra es sin duda uno de los milagros más grandes en la historia de la humanidad. Nunca ocurrió que una nación exiliada haya sobrevivido entre otras naciones, y regresado a su tierra, luego de casi 2.000 años de exilio. 

Debemos tomar conciencia de la magnitud de lo ocurrido,  apreciar al Estado judío, y estar infinitamente agradecidos a HaShem por pertenecer a la generación de judíos que nacimos con un Israel ya existente, y que tiene el increíble privilegio de tomarlo como algo normal.

LOS PRIMEROS INMIGRANTES

En el año 1880 vivían en Israel solo unos 25.000 judíos, la mayoría Sefaradim. Entre 1880 y 1914 decenas de miles de judíos comenzaron a llegar a Israel desde Europa, escapando de las horribles persecuciones, pogroms y matanzas. El Rab Isaac haCohen Kuk (1865–1935) uno de los lideres más importantes del movimiento sionista religioso, dijo que él no podia evitar ver el antisemitismo europeo «como una forma providencial de empujar a los judíos a regresar a su tierra».  En la primera ola migratoria, que se suele llamar “La primera Aliá” (1880-1905), llegaron a Israel unos 25.000 judíos de Europa. Luego, en la segunda Aliyá, (1905–1914), llegaron a Israel otros 35.000 judíos.   Sin embargo, no todos los judíos que escapaban de Europa llegaban a Israel. Muchos emigraban hacia los Estados unidos, Argentina, Australia a Inglaterra.  ¿Por qué? Porque Israel —que en esos años era parte del Imperio Otomano— era una tierra de nadie, abandonada. No había trabajo. Y la vida allí era muy, muy difícil. Al principio de 1900 también llegaron unos 2.500 judíos del Yemen. 

EL PRIMER FRACASO 

Se hicieron muchos esfuerzos para apoyar a los primeros inmigrantes. Vale destacar a los grandes benefactores de esa época: Sir Moshé Montefiore (1784 –1885) y el Baron de Rothschild (1845–1934), que fueron instrumentales para comprar tierras, construir ciudades, y organizar las colonias agrícolas.  Pero a pesar de todos los esfuerzos, a los pocos años de haber llegado, la mayoría de los nuevos inmigrantes terminaron abandonando Israel por las dificilísimas condiciones de vida, la falta de trabajo y la hostilidad de la población árabe local. De los 25.000 judíos que habían llegado en la primera ola migratoria, solo quedaron 5.000, que incluía los 2.500 judíos de Yemen. Y de los 50,000 inmigrantes judíos que llegaron entre 1905 y 1914, la mitad terminó abandonando Israel. Algunos regresaron a Europa, pero la mayoría emigró a los Estados Unidos. Este país había absorbido ya un millón de judíos entre 1850 y 1900, y la tendencia continuaba en alza (en 1924 la población judía de Estados Unidos llegó casi a 3 millones de personas).

UN SUEÑO QUE SE DESVANECE 

La situación en Israel en los años previos a la primera guerra mundial no eran buenos ni prometedores. La colonia judía en Israel, en lugar de crecer era cada vez más chica. La emigración desde Europa también se interrumpió, entre otros motivos, por la masiva ola de asimilación. Lamentablemente, como consecuencia de las persecuciones antisemitas, muchos judíos terminaron convirtiéndose al cristianismo para evitar el despojo y la muerte. Por el otro lado, muchos de los que abandonaban Europa buscaban otros horizontes, y especialmente en las Américas. 

Todo esto podría solucionarse si los judíos pudieran contar con un estado independiente y hacerse cargo del mismo, política y económicamente. Pero a pesar de los esfuerzos de los activistas  sionistas, no se pudo conseguir el apoyo politico para un estado judío.  Cuando el famoso líder sionista Teodoro Herzl (1860-1904) le solicitó desesperadamente su apoyo al Papa Pio X crear un estado a cual los judíos de Rusia pudieran escapar de los pogroms y la muerte,  la hiriente respuesta del Papa fue emblemática:  «mientras los judíos no se conviertan al cristianismo, no contarían con su apoyo»….

En 1914 parecía que el regreso del pueblo de Israel a la tierra de sus antepasados se había detenido, y el sueño de un Estado propio estaba más lejos que nunca…

Y en julio de ese año, comenzó la primera guerra mundial. Y todo iba a cmabiar radicalmente. 

Continuará…    

EL RENACIMINETO DEL IDIOMA HEBREO 

A pesar de todas las dificultades para restablecer un estado judío y comenzar una nueva vida en Israel, en los primeros años  del siglo XX tuvo lugar un evento increíble, sin precedentes en la historia universal: el renacimiento del idioma hebreo —una lengua que no se usó en la vida diaria por casi 20 siglos.   Eliezer Ben-Yehuda (1858–1922) fue instrumental en este area. Publicó artículos sobre la necesidad de renacer el idioma hebreo y participó en el proyecto conocido como el Diccionario hebreo de Ben-Yehuda. Sin embargo, lo que finalmente facilitó la revitalización del idioma fue el desarrollo de las escuelas en los asentamientos, las ciudades y las colonias agrícolas (ver foto arriba de un jardín de infantes en Israel de1905). El idioma hebreo sirvió como el idioma que unía a los nuevos inmigrantes Europeos, que hablaban ruso o Yidish, con los ya establecidos judíos Sefaradim, que hablaban árabe o ladino.  El hebreo, que comenzó como un idioma coloquial y para conversaciones cotidianas, finalmente se convirtió en el idioma oficial de los judíos y —recién a partir de 2018 — en el único idioma oficial de Medinat Israel.




Como e por que o New York Times ignorou o Holocausto?

RELIGIÃO MOSAICO OU POVO JUDEU?

Várias vezes escrevi sobre o problema de conceber o judaísmo como uma “religião”, em vez de entendê-lo como sendo o que une o povo judeu: Suas leis. Sua história. Sua terra. A diferença entre «religião judaica» e «povo judeu» pode parecer um jogo de palavras simples e supérfluo, mas quando entendemos a origem dessa distinção, e principalmente suas terríveis consequências, podemos avaliar melhor sua magnitude.

A diferenciação entre o povo judeu e a religião judaica começou no início do século XIX na Europa Ocidental, quando estimulados pela ideia de emancipação, os primeiros judeus reformistas renunciaram deliberadamente a qualquer ideia que pudesse relacioná-los com a terra de Israel, um elemento fundamental da nossa Torá. Os rabinos reformistas daquela época renunciaram explícita e abertamente à ideia de um Messias que os levaria de volta a Israel e à ideia de reconstruir o Bet haMiqdash ou orar por seu retorno a Yerushalayim, ou chorar por sua destruição. Todos esses conceitos que compõem o aspecto nacional do judaísmo foram deliberadamente eliminados dos livros de orações e do novo ritual de reforma. A ideia era muito clara: os judeus reformistas agora se apresentavam como franceses ou alemães «patrióticos», como parte integrante dos países europeus que habitavam. E como um gesto indiscutível de lealdade à sua nova «pátria» eles renunciaram abertamente a qualquer coisa que pudesse ser percebida como uma expressão de dupla lealdade e deliberadamente se separaram do resto do povo judeu. Os primeiros reformadores orgulhosamente se autodenominavam «alemães» do «credo mosaico» (eles tentavam usar a palavra «judeu» ou «religião judaica» o mínimo possível). Desta forma pretendiam comparar-se com outros grupos religiosos, como católicos ou protestantes, que não tinham uma fidelidade alternativa, nem nacional nem geográfica.

O LIBELO DE SANGUE DE DAMASCO

As terríveis consequências dessa mudança de paradigma aparentemente inocente não tardaram a chegar. Um exemplo: em 1840 houve um terrível libelo de sangue em Damasco, na Síria. A comunidade judaica daquela cidade foi ridiculamente acusada de ter matado uma criança cristã para usar seu sangue para fabricar as Matsot da Páscoa (sic!). Vários líderes comunitários foram presos, torturados e forçados a confessar este falso crime. Os líderes judeus da Europa, como Sir Moises Montefiore de Londres, Adolphe Crémieux da França, Eliyahu Picciotto da Áustria e muitos outros moveram céu e terra para ajudar a libertar esses pobres judeus e, após uma luta incansável, conseguiram tirá-los da prisão. Houve uma exceção a esses esforços: Abraham Geiger, o líder mais importante dos judeus reformistas na Alemanha. Geiger, considerado por muitos historiadores o fundador do movimento reformista, recusou-se a ajudar esses Yehudim, pois era um «alemão» de religião mosaica, e nada tinha em comum com aqueles «árabes». Isso não teve NADA a ver com sefarditas ou asquenazes. Geiger se via como pertencente ao povo «alemão», e para ele, consequentemente, não havia vínculo nacional (ou afetivo) com nenhum outro judeu, fora da Alemanha. O fato de que esses judeus sírios praticavam o mesmo credo que ele era inteiramente circunstancial e secundário. Rav Geiger não lhes devia nada. Geiger certamente não foi o primeiro judeu a se recusar a ajudar outros judeus. Mas que eu saiba, ele foi o primeiro líder religioso a usar esse novo argumento: a renúncia da ideia do povo judeu, em favor da ideia de “religião”, a fim de se desconectar da terra de Israel e do resto do povo judeu. Em sua imaginação ingênua, sua apatia e indiferença em relação aos outros judeus o ajudariam a ser percebido pelos cidadãos alemães como apenas mais um alemão: autêntico, patriótico e sem dupla lealdade.

DESINFORMAÇÃO E SEU CUSTO

Mas o que isso tem a ver com o Shoah e o New York Times?

Infelizmente, muito. Essa história dolorosa não é amplamente conhecida, especialmente fora dos EUA. Mas é uma lição muito importante e acho que é relevante para os nossos dias, onde a informação e a desinformação têm tanto poder.

Entre 1939 e 1945 havia cerca de 5 milhões de judeus vivendo nos EUA. Muitos deles muito influentes no governo e na cultura do país. No entanto, muito pouco foi feito por judeus americanos proeminentes para influenciar Franklin D. Roosevelt e, com isso, salvar seus irmãos na Europa, quando eles mais precisavam. Os judeus da Europa estavam pedindo desesperadamente que os militares dos EUA bombardeassem os trilhos do trem que levavam milhões de judeus para a morte, ou bombardeassem os campos de concentração. E como sabemos, nada disso aconteceu… até que fosse tarde demais.

O LONGO SILÊNCIO

Mas porquê? Uma das razões dessa falta de ação e desse silêncio ensurdecedor em resposta aos gritos sem fim é que a grande maioria dos judeus americanos (e não-judeus) NÃO SABIA o que estava acontecendo: eles não tinham ideia da magnitude do massacre que estava ocorrendo em solo europeu… Como isso aconteceu? Um livro chamado «Buried by The Times» de Laurel Leff explica esse enigma. Leff conclui que o principal responsável por essa desinformação deliberada foi um dos homens mais influentes nos Estados Unidos na época: Arthur Hays Sulzberger, editor-chefe e dono do New York Times (sua família ainda é dona deste jornal), o maior jornal do mundo. Na década de 1940, o New York Times, em especial, não era apenas o jornal mais importante do mundo, mas também o jornal «líder»; no sentido de que milhares de outros jornais e agências de notícias nos Estados Unidos e em todo o mundo obtiam suas informações do Times e seguiam sua liderança (isso obviamente está mudando no mundo moderno da mídia).

QUANDO O SANGUE DO SEU IRMÃO GRITA DAS CINZAS

Vejamos alguns exemplos que ilustram a atitude parcial do New York Times ao relatar as atrocidades que ocorrem na Europa.

Um artigo do New York Times de 2 de julho de 1942 relata o assassinato de 700.000 judeus, um quinto de toda a população judaica da Polônia. O artigo menciona campos de concentração e câmaras de gás. O artigo também diz: “Crianças em orfanatos, idosos em hospícios, doentes em hospitais e mulheres foram mortas nas ruas. Em muitos lugares, os judeus foram cercados e deportados para destinos não revelados ou massacrados em florestas próximas.» O artigo continua listando quantos judeus foram mortos em cada província, depois diz que «o massacre ainda continua em Lwow». o público americano desconhecia em grande parte a magnitude do que estava acontecendo. E aqui está o porquê. Esta história foi deliberadamente enterrada no meio do jornal. Este artigo de 2 de julho de 1942 apareceu na página 6, sob um pequeno subtítulo reservado para material insignificante.

Outro artigo de 27 de junho de 1942 descrevendo o mesmo massacre como «provavelmente o maior massacre em massa da história» estava na página 5 e nem tinha uma manchete separada! Essa indiferença horrível para com a Shoah não aconteceu porque a primeira página do jornal estava cheia de notícias importantes. No dia em que essa história horrível apareceu enterrada no New York Times, a primeira página apresentava artigos sobre tênis e frutas enlatadas. Então perguntamos novamente por quê?

NADA MAIS PERIGOSO QUE A INGENUIDADE

A resposta é: Arthur Hays Sulzberger. Sulzberger era o proprietário e editor do New York Times. E o mais surpreendente é que ele era judeu!

Sulzberger declarou que não sentia nenhuma ligação religiosa ou emocional com a massa de judeus europeus que estavam sendo assassinados. Parecia que, ao contrário, ele estava fazendo o impossível para ignorá-los.

Sulzberger escreveu o seguinte:

«Não há um denominador comum entre o pobre judeu infeliz sendo levado [à morte] na Polônia e… eu. Certamente, na Polônia, esse judeu é parte de uma minoria perseguida… felizmente, não estou nessa categoria.»

De acordo com Leslie Leff, autor de «Buried by the Times» («Enterrado pelo NY Times») que denuncia o silêncio de Sulzberger, a falta de empatia e preconceito de Sulzberger em relação aos judeus europeus se deveu à sua ideologia reformista. O sogro de Sulzberger, Isaac Wise, foi o fundador do movimento de reforma judaica nos EUA. Naquela época, o judaísmo reformista promovia a ideia de que os judeus não são uma nação ou um povo, mas simplesmente seguidores de um credo.

Sulzberger era um judeu assimilacionista: para ele os judeus não são um povo, da mesma forma que católicos ou protestantes não são um povo. Em dezembro de 1942, em uma nota para a equipe do New York Times, ele escreveu: «Eu tenho tentado educar as pessoas em meu jornal sobre o assunto da palavra ‘judeus’; que eles não são uma raça ou um povo, etc.» O ex-jornalista do New York Times Ari Goldman, em sua resenha do livro de Leff, escreve: «Não há dúvida de que as opiniões de Sulzberger sobre o judaísmo influenciaram o que ele fez em seu jornal».

Em sua espantosa ingenuidade, que deve ter custado milhões de vidas de judeus, Sulzberger pensou que era ele quem estava escrevendo a história de acordo com seus caprichos «liberais».

QUEM ESCREVEU A HISTÓRIA?

Mas a história estava sendo escrita por Adolf Hitler, י»ש, e para Hitler não havia diferença entre Sulzberger e os pobres judeus da Europa… Hitler sabia muito bem que nós judeus somos um povo.

Repetidamente, essas opiniões de Sulzberger são refletidas nos editoriais do New York Times, nos quais a situação dos judeus não é mencionada, mas deliberadamente ignorada.

Sobre as crianças refugiadas alemãs, quase todas judias, o New York Times generalizou: «[essas crianças] são de qualquer raça e credo».

Sobre o regime de Hitler, o New York Times escreveu: «É a decência e a justiça que estão sendo perseguidas [por Hitler], não uma raça, nem uma nacionalidade, nem uma fé».

Sobre os milhões de refugiados judeus, o New York Times disse: «Eles não têm nada a ver com uma raça ou credo específico. Não é um problema judeu ou gentio».

E notavelmente em um editorial sobre a Revolta do Gueto de Varsóvia em 1943, o New York Times não menciona os judeus!

«Os judeus da Europa», conclui Leff, «não tinham advogado de defesa na redação do New York Times».

Este vídeo denuncia o silêncio cúmplice do NYT e da imprensa internacional nos dias da Shoah

YOM HASHOAH: Como o New York Times ignorou o Holocausto

OUÇA ESTE ÁUDIO EXTRAORDINÁRIO SOBRE O MESMO ASSUNTO (Inglês)

Downplaying the Holocaust — Sulzberger & NY Times TED Talk by Anna Blech .mp3




Reglas básicas de la cuenta del Omer

Explicamos previamente que al contar los días del Omer conectamos la fiesta de Pésaj, la conmemoración de nuestra libertad física, con Shabu’ot, el día que recibimos la Tora y logramos nuestra libertad «mental».

A continuación, un breve resumen de las leyes básicas de la cuenta del Omer..

¿QUIÉN?
Contar los días del Omer es obligatorio para los varones adultos. Las mujeres también pueden contar los días de Omer, pero no deben recitar la bendición. En algunas comunidades Ashkenazim es costumbre que las mujeres digan la berajá para contar el Omer. Los niños pueden contar el Omer y recitar la bendición, como un entrenamiento para el futuro (Jinuj).

¿CÓMO?
La cuenta del Omer tiene lugar por la noche y es precedida por la bendición: ... asher qiddeshanu bemitsvotav vetsivanu ‘al sefirat Ha’omer. Luego se procede a contar los días y las semanas. Hoy, por ejemplo, es el décimo día del Omer, es decir, una semana y tres días desde [que se ofreció la ofrenda del] ‘omer.

¿QUÉ PASA SI….?
Si nos olvidamos de contar el Omer por la noche, todavía podemos contarlo durante el día siguiente hasta la puesta del sol. Pero sólo cuando contamos el Omer por la noche recitamos la bendición.
Si perdimos todo un día, y no contamos el Omer durante esa noche o al día siguiente, debemos seguir contando, pero en adelante no debemos recitar más la bendición. Es costumbre en la mayoría de las comunidades anunciar el día del Omer en los Minyanim de la mañana para que nadie se pierda de contar un día entero.

¿CUÁNDO?
Los días del Omer se cuentan por la noche. Porque para nosotros los judíos, el nuevo día comienza por la noche. Ahora bien, en qué momento exacto comienza el nuevo día y en qué momento termina el día anterior es una cuestión Halájica técnica complicada.
Muy brevemente: hay dos indicadores astronómicos para la transición entre el día # 1 y el día # 2. «La puesta del sol» (shequiá), cuando el sol desaparece de la vista, y la «caída de la noche» (tset hakojabim), que se caracteriza por la visibilidad de tres estrellas de tamaño mediano. Todos los rabinos están de acuerdo en que antes de la puesta del sol todavía se considera día # 1, y la mayoría de los rabinos están de acuerdo que una vez que hay tres estrellas medianas visibles se considera día # 2. El tiempo entre la puesta del sol y la aparición de las tres estrellas, se conoce en español como «crepúsculo» o en hebreo, «ben hashemashot». Este período de tiempo puede oscilar entre 13 minutos y medio (por ejemplo, en Israel, o aún menos tiempo en otras áreas más cercanas a la línea ecuatorial) y 3 horas o más en lugares extremos en el sur o en el norte del planeta. En el área de Nueva York, por ejemplo, la duración del crepúsculo se estima en aproximadamente 30 minutos (también varía según las diferentes estaciones del año). De acuerdo con una muy famosa Guemará, el día # 1 termina y el día # 2 comienza en un brevísimo e inidentificable instante dentro de este «crepúsculo». Ahora bien, ¿Qué hacemos en la práctica cuando tenemos que realizar una mitsvá para la cual hay que determinar con precisión el principio de un nuevo día? Para Shabbat, por ejemplo, tomamos el standard más estricto y recibimos Shabbat siempre unos minutos antes de la puesta del sol, y nos despedimos de Shabbat solamente después de que tres estrellas medianas sean visibles.
Para el Omer,  idealmente se deben contar los días del Omer sólo después del anochecer (en cada lugar del mundo esto ocurre a una hora diferente). En muchas comunidades Sefardíes de Nueva York los rabinos autorizan a contar el Omer 15 minutos después de la puesta del sol (así dice por ejemplo el rab Eliyahu ben Jaim, Shelita). En circunstancias excepcionales, se autoriza también a contar con berajá antes de ese tiempo, pero nunca antes de la puesta del sol. Cada individuo debe seguir las costumbres de su propia comunidad.




La Bendición por los Árboles – Birkat Hailanot

Los Sabios dijeron: «Aquel que sale a los campos o jardines durante el mes de Nisán y ve árboles frutales en flor y brotes que comienzan a florecer , debe recitar la siguiente bendición:

«Bendito eres Tú, HaShem nuestro Señor, Rey del universo, que no ha hecho faltar nada en Su mundo y ha creado en él buenas creaciones, y buenos y hermosos árboles para que el hombre obtenga provecho de ellos.” (Rambam, Leyes de Berajot 10:13).

Esta Berajá debe ser recitada únicamente cuando uno ve árboles frutales, excluyendo los arboles que no dan frutos como el pino, el eucalipto, etc.   Los Sabios fijaron decirla durante el mes de Nisán pues es la época en que florecen los árboles en la Tierra de Israel.




¿Qué hizo el Pueblo de Israel mientras cruzaba el mar?

Esta noche y mañana celebraremos el séptimo día de Pésaj, que es la contnuciaon de la firat ade nustra libertad pero a la vez  conmemora un evento independiente, muy especial en la historia del pueblo judío. Después de salir de Egipto el 15 de Nisán, comenzamos a caminar hacia el desirto del Sinai. A los seis dias de haber escapdaod del cauitverio  no sencontramos literlmante en un callejon sin salida. Frente a a nustra izquierda y a nustra derecha habian cadeanas monañosas impentrables y fnete a nostros teniamos el mar.  NO teniamos como avanzar. Y para peor, el Faraón escucho que estabamos atrapadso por el desierto, y allí se arrepintió de habernos dejado salir, alisto a su hombres  y nos persiguió con su poderoso ejército. Estábamos en la frontera de Egipto, ahora teníamos el mar frente a nosotros y el ejercito egipcio detrás. No había dónde escapar. ¡Estábamos realmente desesperados, literalmente, entre la espada y la pared! La gente lloraba y le gritaba a Moshé culpandolo de haberlso sacdado de Egipto: «¿Para qué nos sacaste a Egipto? ¿Para que nos maten a todos en el desierto?». Se aproximaba la noche y Moshé rezó a HaShem. Y entonces ocurrió el milagro más grande de todos los tiempos. HaShem envió un fuerte viento del este y otro fuerte viento del oeste durante esa noche y el mar se abrió frente a nuestros ojos. Por la mañana muy temprano cruzamos el mar, y cuando los egipcios nos persiguieron, HaShem cerró el mar sobre ellos. Y una vez que estuvimos a salvo, en la otra orilla del mar, fuera de la frontera de Egipto, cantamos la famosa Canción del Mar, o Shirat haYam.

¿QUÉ ES EL HALEL?

Todo esto es más o menos conocido. Lo que es menos conocido es que de auredo a la tradcion rabinica mientras cruzábamos el mar también cantamos una canción. ¿Cuál era esa canción? ¡El Halel! El Halel es la plegaria judía «oficial» de alabanza y gratitud a HaShem. Consiste en la recitación de 6 Salmos de Tehillim, desde el Salmo 113 hasta el Salmo 118. Estos Mizmorim (poemas religiosos) expresan nuestra más profunda gratitud y reconocimiento al Creador por todos los milagros que hizo y hace por nosotros.

Según Ribbí Eliezer, los Salmos del Halel fueron recitados por primera vez cuando el pueblo de Israel cruzaba el mar (בשעה שעמדו על הים), cuando nuestros ancestros caminaban entre las dos columnas de agua (¡Trata de visualizar esto!). Viendo y experimentando este milagro tan extraordinario, manifestamos nuestro asombro y gratitud, en una explosión espontánea de canción y alabanzas a HaShem recitamos el Halel.

Según algunos Jajamim, aunque el origen temático del Halel se remonta a este momento especial, las palabras definitivas de estos Salmos fueron formuladas y escritas por el Rey David, e incorporadas en el libro de Tehilim para ser recitadas por las generaciones siguientes durante Pésaj y las festividades relacionadas con Yetsiat Mitsarym, el éxodo de Egipto: Shabu’ot y Sucot (los jajamim luego agregaron Janucá y en nuestros días, Yom haAtsmaut).

Aprender el origen del Halel nos ayuda a comprender la estrecha relación entre esta hermosa Tefilá y la fiesta de Pésaj.

UNA LECCIÓN DEL HALEL

El Salmo 113, el primer Salmo, nos invita a alabar a HaShem (Halelu-y-ah) recordándonos que HaShem (113: 7): «Levanta al pobre [que duerme en] el suelo, y redime a aquellos pobres [que para comer buscaban comida] en la basura (113 : 8) … y los hizo sentar entre los nobles y los príncipes de Su pueblo. “ Esta es una clara alusión a lo que celebramos en Pésaj: durante siglos, fuimos esclavizados y humillados en Egipto, hasta el punto de que para sobrevivir nos alimentábamos de la comida que tiraban los egipcios. HaShem nos rescató de la situación más baja, nos protegió, nos llevó al desierto, nos dio una tierra hermosa y próspera, y nos colmó con Sus bendiciones … y ahora en Pésaj somos libres, y festejamos nuestra redención «sentados como nobles (reclinados, como lo hicimos en el Seder) y celebrando con comidas festivas y brindando por nuestra liberación .

El próximo Salmo, 114 es considerado junto con el salmo 107 uno de los 2 salmos oficiales de Pésaj: Este hermosos Salmo menciona 4 grandes milagros:

  1. El haber sido rescatados de Egipto.
  2. La apertura del mar Suf (conocido popularmente como el Mar Rojo)
  3. El momento de la revelación de HaShem a Su pueblo, cuando nos entregó la Torá.
  4. Cuando HaShem nos proveyó de agua en el desierto.

QUE TENGAMOS TODOS UN JAG SAMEAJ




VISPERA DE PESAJ: ¿Qué tenemos que hacer esta noche y mañana?

Jueves 14 de Abril de 2022
Una de las prohibiciones bíblicas de Pésaj es poseer o mantener Jamets en nuestra propiedad durante Pésaj. Para evitar esto, antes de Pésaj limpiamos nuestras casas y otras propiedades (automóvil, oficina, etc.) y sacamos todo los alimentos Jamets que puedan encontrarse allí. Luego, esta noche, cuando salen las primeras estrellas (en NY a las 8.00pm), hacemos la Bediqat Jamets, es decir, la última inspección para buscar cualquier alimento Jamets que pudo haber quedado en nuestra propiedad después de la limpieza. Recuerda que sólo tienes que deshacerte del Jamets que es comestible (apto para el consumo humano o animal).
Las pastillas o píldoras médicas que se tragan con agua, los cosméticos, artículos de limpieza o cualquier artículo no comestible, puede quedar en nuestra posesión durante Pésaj, independientemente de su composición. Los utensilios Jamets, limpios de cualquier Jamets visible, deben ser guardados en un lugar cerrado hasta después de Pésaj. No hay necesidad de incluirlos en la venta de Jamets o deshacerse de ellos.
BEDIQAT JAMETS
¿Cómo hacemos la Bediqat Jamets? Con la ayuda de una vela o una linterna, buscamos en todos los lugares de nuestra casa donde podríamos haber traído, comido o almacenado alimentos. Debemos buscar especialmente en la cocina y en todos los espacios de almacenamiento de alimentos, como la despensa, el refrigerador, el freezer y los lugares en los que por lo general se guarda comida. Recordemos que nuestra misión es estamos buscar “comida” Jamets: snacks, golosinas con jamets, galletas, pastas, alimentos congelados, bebidas de proteínas, cereales, y bebidas alcohólicas hechas a base de grano (cerveza, whisky, la mayoría de vodkas, etc).
Antes de comenzar la bediqá decimos esta berajá (bendición)
“Baruj Ata A- donay, E- lohenu Melej ha’Olam Asher Quiddeshanu beMitSvotav veTsivanu Al Bi’ur Jamets”
Al finalizar la bediqá guardamos en un lugar seguro el Jamets que vamos a “eliminar” mañana por la mañana, junto al Jamets que vamos a consumir mañana en el desayuno.
Y entonces decimos el primer Kal Jamirá, la fórmula para renunciar a la posesión de cualquier Jamets que no hayamos encontrado en la Bediqá.
KAL JAMIRA DEIKA BIRSHUTI, DELA JAZITEH VEDELA BIARTEH, LIBTIL VELEHEVE HAFQER KE’AFRA DEAR’A.
“Todo Jamets o levadura que me pertenezca, que no haya visto ni haya eliminado, que sea considerado sin dueño como el polvo de la tierra”
Viernes 15 de Abril de 2022
BIUR JAMETS (Deshacernos del Jamets).
El miércoles por la mañana, sólo podemos comer Jamets hasta la cuarta hora del día (en NY, hasta las 10 de la mañana) . Una vez que terminamos de comer el Jamets, recogemos los restos y lo juntamos con el resto del Jamets que dejamos ayer y procedemos a “eliminarlo”. Esto se puede hacer tirando el Jamets a los pájaros, a los peces o en una basura pública. La mayoría acostumbra a quemarlo, ya que el Jamets simboliza la arrogancia y de esta manera demostramos que nos queremos deshacer de la soberbia.
Al terminar la eliminación del Jamets procedemos a su última anulación (=declararlo sin dueño). Y una vez más pronunciamos la declaración “Bitul jamets”, pero más detallada:
KAL JAMIRA DEIKA BIRSHUTI, DEJAZITEH VEDELA JAZITEH, DEBIARTEH VEDELA BIARTEH, LIBTIL VELEHEVE HAFQER KEAFRA DEAR’A
“Todo jamets o levadura que me pertenezca, que haya visto o no haya visto, que haya eliminado o que no haya eliminado, que sea considerado sin dueño como el polvo de la tierra”
La eliminación, en cualquiera de sus formas, y la anulación del jamets, tiene que ser hecho hasta la quinta hora del día. En Nueva York eso es hasta las 11 de la mañana.
La venta del Jamets también debe ser realizada antes de la cuarta hora del día.
A partir de esa hora, ya no puede consumir ni hacer ninguna venta o anulación del Jamets.
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AJILAT MATSA: En la víspera de Pésaj no debemos comer Matsá . Reservamos el sabor de la Matsá para su momento ideal: la noche del Seder. Podemos comer Matsá ‘ashira, conocida también como Matsá de huevo o Matsá dulce. Y en general, en este día debemos comer sólo hasta el mediodía, para reservar nuestro apetito para la noche del Seder.
TAANIT BEJOROT: En la víspera de Pésaj se estableció (minhag) que los hombres primogénitos deben ayunar, como un reconocimiento a la protección de HaShem, cuando en la última plaga todos los primogénitos de Egipto murieron y los Yehudim primogénitos fueron salvados. Sin embargo, como este no es un ayuno mandatorio (no fue promulgado por la Torá o por los rabinos de la Guemara) se acostumbra a evitar este ayuno participando de una ceremonia religiosa festiva. Por ejemplo, Berit Mila o un Pidión. Pero como estas ocasiones no se pueden anticipar, es costumbre que las comunidades organicen un Siyum Masejet, la conclusión de un tratado del Talmud, que es un evento considerado festivo y con suficiente mérito para evitar este ayuno. Participando de este ayuno los primogénitos podrán comer durante la víspera de Pésaj normalmente.