Koraj y las cuatro palabras que pueden salvar tu vida

No alcanza solo con aprender el significado de este versículo de la Torá (pasuq). Les recomendaría que lo memoricen. O que lo impriman y lo guarden en su bolsillo, cartera o billetera. Es un pasuq muy corto, que pertenece a la Perashá que leeremos en unas semanas, pero se refiere a lo acontecido en nuestra Perashá KORAJ. El pasuq consiste en solo 4 simples palabras. “UBNE QORAJ LO METU”. Que significa literalmente “Y los hijos de Koraj no murieron”. Es decir, sobrevivieron. 
¿A qué se refiere este breve texto?   

HIJOS vs PADRE

Llevado por la ambición, la envidia y los malos consejos, Koraj decidió rebelarse contra Moshé y Aharón para quitarles el liderazgo político. Koraj no estaba solo. Más de 250 personas lo acompañaban en su aventura rebelde. El final de Koraj fue horroroso: murió tragado por la tierra. Todas las personas que estaban con Koraj sufrieron el mismo destino. Sin embargo, como menciona este pasuq, los hijos de Koraj fueron la excepción ¡y sobrevivieron! ¿Por qué? Los hijos de Koraj, que ya eran adultos, se habían sumado a la rebelión encabezada por su padre y participaron de las protestas y las manifestaciones en contra de Moshé. Sin embargo, «a último momento», cuando llegó la hora del enfrentamiento final con Moshé, reaccionaron. Se dieron cuenta que lo que estaban haciendo era un acto de locura y que si no daban marcha atrás en ese mismo momento, ¡el daño iba a ser irreparable! Los hijos de Koraj sobrevivieron porque se arrepintieron justo a tiempo, en el minuto final.  

Pienso en los desafíos morales que todos nosotros vivimos diariamente. 

LA IRA Y EL ENOJO

A veces nos dejamos llevar por la ira y estamos a punto de levantar la mano y dañar físicamente a alguna persona, u ofender seriamente a alguien insultándolo con palabras graves. Estos impulsivos actos de violencia, especialmente si se trata de violencia física, pueden tener consecuencias irreversibles para la víctima y para el victimario. En un acto impulsivo que dura unos pocos segundos, uno puede condenarse a sí mismo a sufrir las consecuencias de lo que hizo, por el resto de su vida.

ATRACCIÓN FATAL

Otras veces nos dejamos llevar por nuestras pasiones. Nos relacionamos con quien no debemos… nuestro sentido común se nubla y así, en un breve momento, nos dejamos arrastrar por el instinto, pudiendo echar a perder «para siempre» nuestro honor, manchar nuestro buen nombre y el de nuestros hijos y destruir nuestra familia… 

PERDERLO TODO POR TWITTER

Sucede que uno está a punto de mandar un texto que escribió con enojo, donde expresa toda su frustración sin filtros. Hacemos esto más para desahogarnos que para transmitir un mensaje. Y no medimos ni calculamos como va a reaccionar el que lo recibe.   Hay casos famosos de grandes personalidades que perdieron sus trabajos por un Twitter inapropiado que una vez enviado y registrado por un solo «follower», ya nunca pudieron borrar. En los tiempos de WhatsApp o Snapchat uno puede arruinar la vida de otra persona, o la propia, con tan solo enviar una fotografía inapropiada. Increíblemente, no siempre nos damos cuenta de la gravedad y de la irreparabilidad de lo que hacemos. ¿Por qué? Creo que porque inconscientemente suponemos que las cosas graves y con consecuencias de largo alcance suelen ser difíciles de ejecutar…. y hacer click en “send” ¡parece tan fácil!

EL ÚLTIMO RECURSO

Lo curioso es que en varios casos famosos de actos impulsivos, mensajes o textos inapropiados, los que cometen el error se dan cuenta de lo que hicieron ¡unos segundos DESPUES!

En todos estos casos, nuestro nombre, nuestra familia, nuestra reputación, nuestras vidas pueden ser salvadas recordando este pasuq “Y LOS HIJOS DE KORAJ SOBREVIVIERON”. Los hijos de Koraj que estaban a punto de arruinar sus vidas y perderlo todo se dieron de lo que iban a a hacer un breve momento ANTES, dieron marcha atrás y se salvaron. 

Recomiendo memorizar estas 4 palabritas y si alguna vez, ח»ו alguien está a punto de caer en la destructiva trampa de sus propios impulsos, que diga para sí mismo este Pasuq y recuerde que la sabiduría de dar marcha atrás en el último minuto salvó la vida de los hijos de Koraj. Y puede salvar la tuya.

וּבְנֵי־קֹרַח לֹא־מֵתוּ

¡Y los hijos de Qoraj, sobrevivieron!

Bamidbar 26:11




El miedo a la libertad

LA MISIÓN

Los hijos de Israel están en el desierto, a pocas semanas de llegar a la Tierra Prometida. Para asegurar el éxito de su expedición militar, Moshé envía a 12 hombres como espías en una misión de inteligencia. Estos hombres, que eran los líderes de las tribus, tenían que identificar las fortalezas y las debilidades de las personas que vivían allí y a las que pronto tendrían que enfrentar. La información que traerían con ellos sería crucial para el éxito militar.

Después de cuarenta días explorando la tierra de sur a norte, y de este a oeste, los espías finalmente regresan al campamento.

La información debía ser transmitida solo a Moshé, que era el comandante en jefe del ejército de Israel. Pero ocurrió algo inesperado: cuando la gente se enteró del regreso de los espías, a los que estaban esperando ansiosamente, rodearon a los espías y se quedaron allí a escuchar su reporte.

Sin pensar en las consecuencias de este pequeño cambio de planes, los espías, en lugar de informar privadamente a Moshe –y naturlamente motivados por la tentación de ser escuchados por cientos de miles de personas– presentaron su informe en público, lo que inició una cadena de eventos trágicos que nadie pudo anticipar.

EL INFORME DE INTELIGENCIA

Al principio, los espías elogiaron la tierra y hasta mostraron con orgullo las enormes frutas del lugar, que todos vieron con asombro. Pero luego, el discurso cambió. La mayoría de los espías, diez de los doce, comenzaron a verbalizar sus dudas sobre la posibilidad de proceder con el plan de conquistar la tierra de Canaán.

La larga lista de dudas incluye lo siguiente:

«Los hombres contra los que tendremos que luchar son gigantes… nos veíamos a nosotros mismos como langostas, y así nos veían».

Cuando uno está poseído por el miedo, ve, ¡necesita ver!, la realidad a través de lentes negativos, los lentes de lo imposible. Es decir: la óptica que lejos de disipar el miedo, lo justifica No mencionaron que ellos eran mucho más numerosos que sus enemigos. Y en lugar de enfatizar esta ventaja, se describieron a sí mismos como subhumanos (insectos) y al enemigo como superhumanos (gigantes).

LANGOSTAS

Este derrotismo psicológico también se pone de manifiesto en un detalle que yo nunca antes había notado: si te ves pequeño como un insecto, ¿por qué no te describes como una hormiga, una abeja o una avispa (la famosa Tzir’a que la Torá otras veces menciona)? ¿Por qué usar a la “langosta o el saltamonte» como metáfora? Me parece que eligieron compararse con un insecto como la langosta porque «no tiene aguijón”, es decir: no puede defenderse ni defender su colonia. En cierta manera, y con mucha sofisticacion, admitian su superiordad numérica, ya que las langostas vienen en plagas de millones. Pero fuera de su gran número,  se veían a sí mismos incapaces de defenderse y mucho menos de triunfar. Si queremos analizarlo más sofisticadamnte todavía: según la cultura gastronómica de aquellos tiempos, las langostas eran comestibles (muchas especies son Kosher) y quizás inconscientemente se estaban describiendo a sí mismos como “comida» para el enemigo».

AL-QAEDA Y AMALEQ

Los isarelitas no conocían a los enemigos con los que se iban a enfrentar, con excepción de uno de ellos: Amaleq, que si bien fue derrotado en una guerra anterior creó y dejó un trauma y un miedo psicológico en el pueblo judío, ya que fueron los primeros en atacar a Israel, no de frente sino por la retaguardia: Amaleq atacó a las mujeres, los niños y los ancianos. Amaleq no mostró misericordia ni se inmutó de que Israel es el pueblo protegido de Dios. Los espías mencionaron a Amaleq porque proyectaban sus propios miedos hacia un enemigo que no duda en infligir dolor y muerte y que practica el terrorismo más que la guerra. Mencionar a Amaleq aterroriza. Sería como mencionar a ISIS o Al Qaeda a las víctimas del terror en Medio Oriente.

LA TIERRA QUE TRAGA

También mencionaron a la tierra de Israel. Primero positivamente: la leche —producto de la ganadería— y la miel, el sirope de los dátiles, —producto de la agricultura. Pero inmediatamente después la narrativa cambió. Y las palabras que los espías utilizan para describir a Israel son: «una tierra que se traga a sus habitantes». ¿Qué estaban tratando de decir con esta descripción totalmente falsa de la topografía de Israel? Creo que el mensaje subliminal de esta demonización geográfica era el siguiente: incluso si en el mejor de los casos conseguimos derrotar a los pueblos antivos, la tierra ¡no vale la pena!, ya que «se traga a sus habitantes». Los espías pintaron una imagen irreal, horrorífica y falsa de Israel, asemejándola a una región volcánica y seca, no apta para la agricultura y propensa a la actividad sísmica. En otras palabras, y este es el mensaje fundamental de los espías: ¡Israel como tierra es peor que el desierto en el que vivimos ahora… así que es mejor que nos quedemos aquí!

LA REACCION

Al escuchar este informe, las cosas se salieron completamente de control: la gente se puso a llorar, a gritar y a protestar. De nada sirvió que Yehoshua y Caleb trataran de hacerlos entrar en razón. La turba quería matarlos. Dios tuvo que intervenir directamente para evitar la sublevación. Hubo víctimas—los 10 espías y muchos más. Dios los castigó de la peor manera posible. Si no querían ir a la tierra prometida, aquí se quedarán hasta morir. Tendrán que quedarse en el desierto hasta que haya un cambio generacional.

Fue una noche tan trágica que la recordamos en luto todos los años en el 9 del mes de Ab.

¿PERO POR QUÉ?

Confieso que durante muchos años adopté la opinión de los comentaristas que responsabilizan a los 10 espías y los ven como instigadores políticos, con sus propias agendas personales: no “querían” conquistar Israel y preferían volver a Egipto, y ser recibidos allí como héroes, etc.

Este año, estoy ensayando un enfoque diferente. Quizás los espías fueron víctimas de su propio pánico. Un miedo incontrolable que se apoderó de ellos incluso antes de que la operación de espionaje hubiese comenzado. Quizás cuando dieron su informe no tuvieron la intención de desalentar al pueblo y simplemente se estaban «desahogando» de sus miedos personales, pero en el escenario incorrecto: frente a todos los demás.

ESCAPE A LA LIBERTAD

Lo que me llevó a pensar de esta manera es haber releído recientemente el libro de Eric Fromm, «Escape from Freedom» (o en español con el título “El miedo a la libertad”, que, irónicamente, capta mejor la idea que estoy tratando de expresar).

Los espías eran “líderes de Israel”, pero no podemos olvidar ni por un segundo que hasta hace un par de años eran “esclavos”: habían nacido y crecido en un sistema de abuso físico y mental. Habían sido entrenados por sus amos por generaciones a no defenderse: a no luchar por sus derechos o por sus sueños. Fueron programados para “no soñar” con un futuro mejor. Para reprimir cualquier deseo de libertad.

Probablemente debido a este «trastorno de personalidad», los espías verbalizaron su pánico, actuando con el instinto más importante de un esclavo: la supervivencia, que incluye «no asumir ningún riesgo innecesario».

Siguiendo las ideas de Eric Fromm, los esclavos judíos no pudieron ejercer completamente su libertad, que incluye la responsabilidad de luchar y arriesgar la vida por ella. Sin darse cuenta, estaban aterrorizados de la libertad e ironicamente, hicieron lo posible para no conseguirla. Quizás en un lapsus freudiano se describieron a sí mismos como «saltamontes» y no como «hormigas» porque estaban eligiendo inconscientemente “huir”, “volar” en lugar de “luchar con el aguijón hasta la muerte «.

Como sudamericano, puedo escuchar los ecos subconscientes de esta situación mental en los himnos de Argentina o de Uruguay: “Libertad o con gloria morir”. Estas palabras, quizás no expresan lo que sentían los libertadores del siglo 19, sino las arengas formuladas para convencer a los subyugados de que debían asumir con valentía el precio de la libertad. Y estar dispuestos a correr el riesgo de «morir con gloria” en el campo de batalla. Algo que la genración del desierto o supo conseguir. El miedo a la libertad, como afirma Fromm, los llevó a la autodestrucción.

Creo que si en lugar de haber presentado su informe al pueblo, los espías hubieran hablado primero con Moisés, él podría haberlos disuadido. Les habría transmitido con calma la «Emuná», la certeza de que Dios estaba con ellos, y les hubiera demostrado que todo lo que el Todopoderoso les había prometido lo había cumplido. Quizás si hubieran hablado primero con Moshé, como indicaba el plan original, esta tragedia se hubiera evitado. Pero trágicamente, una vez que verbalizaron sus miedos en público, las cosas se salieron completamente de control, porque el pánico es contagioso y el miedo lhizo que toda una generación olvidara su fe.




RESUMEN DE LA PARASHA BEHA’ALOTEJA

Primera Aliá:  Aharon recibe instrucciones de encender la Menorá, el candelabro de 7 brazos que iluminaba el interior del Tabernáculo, y se repasa la construcción y la función de la misma. La Menorá estaba hecha de una sola pieza, fundida de oro puro. Todas las velas de la Menorá se inclinarían hacia la vela del medio, mientras que la vela del medio se inclinaría hacia el lugar central mas sagrado, o Kodesh haKodashim.

Segunda Aliá: A Moshé se le ordenó preparar a los Leviyim (levitas) para el servicio religioso del Tabernáculo, el templo construido en el desierto.  Los Leviyim son instalados en su servicio que duraba desde los 25 hasta los 50 años.

Tercera Aliá: El pueblo de Israel mantiene su segundo Pésaj desde que salió de Egipto. Las leyes de Pésaj Shení – el segundo Pésaj (un mes después de Pésaj) se establece para aquellos que no pudieron traer el sacrificio de Pésaj en el momento apropiado. Nuestros sabios dicen que las personas que estaban impuras en ese momento eran las que habian cargado el sarcófago de Yosef.  Yosef les había hecho prometer a sus familiares que lo enterraran en la tierra de Israel. Cuando estas personas acudieron a Moshe para preguntarle qué hacer, Moshé no sabía que contestar. Moshe tuvo que pedirle instrucciones a Hashem, porque todo lo que Moshé hizo o dijo fue a través de la comunicación directa con Dios

Cuarta Aliá: Esta Aliá  relata el comienzo de la tan esperada travesía hacia la tierra prometida. El Tabernáculo o Mihskán estaba ya terminado  y ya se había delgado todas las tareas relacionadas al mismo a los Leviyim y a los Cohanim. Ahora, finalmente ¡era el momento de partir! ¡Antes de eso, los Yehudim necesitaban algún tipo de referencia (un GPS!) para saber cuándo partir y hacia donde ir. Recordemos que eran aproximadamente tres millones de personas.   HaShem les ordena que elaboren trompetas de plata para avisar a todo el campamento cuándo tenían que partir.  Además, la nube que se posaba sobre el Tabernáculo en todo momento se elevaría repentinamente y se movería en la dirección en la que tenían que ir.

Quinta Aliá: La nube del Mishkán se levanta el 20 de Iyar y así comienza la travesía que debía haber llevado meses y término llevando 40 años. La Aliá también nos habla de Yitró que se había unido a nosotros antes de la entrega de la Tora y ahora, un año y medio después, decide regresar a su tierra en Midyán.  Finalmente, la Torá nos cuenta que el Aron ha’Edut , el Arca del Pacto, siempre viajaría delante de todos. Eso es muy interesante porque indica que  principio, el Pueblo de Israel debe encaminarse siguiendo el Aron, es decir, la Torá. 

Sexta Aliá: El famoso versículo  «Vayhi Binso’a haAron» que  cantamos antes de sacar la Tora es lo que da comienzo a esta Aliya que describe las quejas del pueblo ante las condiciones de vida en el desierto. La Torá describe el «man» y lo hace para dejar en claro que tenían comida suficiente aunque estaban en pleno desierto y así dejar en claro que los que se quejaban no lo hacían por una necesidad real. Moshé expresa su gran frustración por el comportamiento de la gente. Dios, sin embargo,  promete esta vez satisfacer sus deseos y envía un contingente de «selav»,  codornices, para que erl pueblo coma carne. Moshé recibe instrucciones de nombrar un tribunal o Sanhedrín para ayudarlo a gobernar y enseñar la Torá a la nación.  Moshé, el profeta más grande de todos los tiempos, no puede liderar solo a todo un pueblo. El mensaje de la Torá es que siempre se debe tratar de liderar junto a otras personas capacitadas.

Séptima Aliá: Las codornices descienden sobre el campamento en una gran cantidad, por lo que la carne alcanzó y sobró. Por supuesto que este comportamiento obsesivo con la comida, tal desesperación por la carne cuando tenían el «man», no era apropiado para el Pueblo de Dios. E inmediatamente después de comer en exceso enormes cantidades de carne, muchos mueren.

Aharón y Miriam hablan acerca de Moshé en forma negativa (Lashon Hara) diciendo que Moshé estaba casado con Tzipporá pero estaba tan ocupado ocupándose de su misión con el pueblo que nunca estaba en su casa.  Aharón y Miriam también pensaron que no era correcto que solamente Moshé tuviera acceso a la comunicación con Dios o profecía, ya que ¡ellos también eran profetas y aparte tenían una vida normal con sus familias! HaShem responde que no pueden compararse con Moshé. Moshé era un profeta «de tiempo completo» que estaba en comunicación directa con Dios las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana. No era posible que tuviera una vida familiar normal. Por supuesto, Moshe fue la única excepción en toda la historia que estuvo exento de tener una familia. Y aún así, ¡estaba casado e incluso tenía dos hijos! Miriam es castigada con una especie de lepra por hablar contra Moshé, pero Moshé intercede por ella y se cura.

By Rab Jacob Bitton




BEHAALOTEJA: ¿Quién era Moisés?

וְהָאִ֥ישׁ מֹשֶׁ֖ה עָנָ֣ו מְאֹ֑ד מִכֹּל֙ הָֽאָדָ֔ם אֲשֶׁ֖ר עַל־פְּנֵ֥י הָאֲדָמָֽה

¿DE QUÉ ESTÁN HECHOS LOS HÉROES JUDIOS?

Los pueblos de la antigüedad no exaltaban las virtudes morales de su heroes, como la integridad personal o la humildad. Las civilizaciones antiguas admiraban el poder físico de sus líderes, como en el caso de Hércules, o su ingenio militar, como Alejandro Magno, o su astucia para engañar al enemigo, como Hermes. La humildad nunca fue vista como una virtud por los paganos. Por el contrario, la humildad se asociaba con la debilidad. La Torá, sin embargo, no enfatiza la fuerza militar o el poder físico nuestros  líderes: el buen líder judío —como el rey David, por ejemplo— es aquel atribuye la victoria en el campo de batalla, en última instancia, a Dios.

EL GENERAL MOSHÉ

Esta es la razón por la cual muy pocas personas recuerdan que Moshé fue un poderoso líder militar y que derrotó a sus multiples enemigos:

Moshé enfrentó al Faraón, el hombre más poderoso del mundo en ese momento y llevó de la esclavitud a la libertad a tres millones de personas.

Moshé también lideró y triunfó en las gloriosas batallas contra Sijón y ‘Og en trans-jordania.

Mientras que otros pueblos y culturas harían culto a Moshé por su proezas militares, lo que la Torá destaca no de él no son su victorias militares ni su habilidad política, sino su carácter y su personalidad. Particularmente, su humildad. ¿Qué es la humildad de un líder judío? ¿Y por qué es tan importante?

TORÁ Y POLÍTICA

Un líder puede tener dos tipos de objetivos: sus aspiraciones públicas y sus objetivos personales. Las aspiraciones públicas consisten en lo que el líder quiere hacer por el bien de su comunidad, su pueblo o su nación. Las aspiraciones personales consisten en lo que el líder quiere hacer para su beneficio personal: su riqueza, su imagen y su prestigio. A veces estas dos dimensiones coexisten armoniosamente. Y otras veces, estas dimensiones se vuelven inversamente proporcionales. En este último caso, cuando el principal objetivo de un líder político es su beneficio personal, el líder estará dispuesto a sacrificar el bien de su comunidad o su país para alcanzar sus objetivos personales. Hay muchos ejemplos de este tipo de liderazgo: ayer , hoy y mañana. Lo que no hay es muchos ejemplos de situaciones inversas, es decir: cuando un líder está dispuesto a sacrificar sus aspiraciones personales, su honor, sus bienes y hasta su dignidad personal por el bien de su pueblo.

Es por eso que Moshé era un líder excepcional.   

Veamos ahora algunos ejemplos del liderazgo de Moshé Rabbenu para descubrir este aspecto de su vida.  

EL BECERRO DE ORO

Moshé reacciona con indignación cuando desciende del monte Sinaí y ve al pueblo judío adorando al becerro de oro. Habían reemplazado a Dios con un ídolo egipcio y lo estaban adorando. La ira de Moshé en ese momento fue tan severa que rompió las Tablas.

LA GENTE SE QUEJA

En la Parashá de esta semana, beha’alotekha, cuando el pueblo se queja diciendo con insolencia que “solo tenían el maná para comer en el desierto” y comienzan a decir en voz alta que extrañan lo que comían en Egipto, Moshé también se ofende  (ובעיני משה רע). Recordemos que esas quejas de ingratitud estaban dirigidas hacia Dios, y no hacia la persona de Moshé …

MÁS QUEJAS

En el desierto, el pueblo nuevamente se quejó y manifestó su profunda falta de apreciación hacia Dios«¿Por qué Dios nos sacó de Egipto y nos trajo a este desierto? ¿Para hacernos morir de sed y hambre?” Moshé se ofendió y llamó al pueblo de Israel “rebeldes” (שמעו נא המורים).

En estos tres casos en los que Moshé reacciona con enojo y se ofende hay algo en común: las quejas no están dirigidas hacia Moshé; el pueblo se estaba comportando con desagradecimiento hacia Dios.

Ahora que vemos que Moshé es capaz de reaccionar y ofenderse en estas situaciones veamos otro tipo de casos que normalmente hubieran merecido una reacción por lo menos similar, si no mayor, de parte de Moshé.

COMPETENCIA

En la Parashá de esta semana, dos individuos, Eldad y Medad, estaban profetizando en el campamento de Israel. «Profetizar» era una prerrogativa exclusiva de Moshé, hasta ese entonces. Este aparente desafío al liderazgo espiritual de Moshé, una afrenta personal,  fue notado por Yehoshua, quien inmediatamente informa a Moshé y le propone neutralizar a estos dos hombres que le hacían la competencia» a Moshé. ¿Cuál fue la respuesta de Moshé a Yehoshua? (Bamidbar 11:29): «Y Moisés respondió (a Yehoshua): ¿Acaso estás celoso por mí? [yo no me ofendo. Es más:] ¡Ojalá todo el pueblo de Dios se volviera profeta!

OFENSAS PERSONALES

En otro episodio, también en nuestra Parashá (Bamidbar 12: 1-2), «Miriam y Aharón hablan en contra de Moshé…». En esta ocasión, nuevamente, Moshé no se enoja, no se ofende, no reacciona. No hay celos ni reproches ni contraataques. Moshé lo deja pasar y permanece en silencio.

¿Y POR QUE?

Moshé tiene un mecanismo de defensa emocional selectivo. Muy distinto, opuesto, al que tenemos los seres humanos normales. Moshé se «ofende» y reacciona, y no lo deja pasar cuando se trata de defender el honor Divino. Moshé se preocupa apasionadamente por la causa y el honor de Dios.  SU MAYOR AMBICIÓN Y DESEO ES QUE EL PUEBLO DE ISRAEL SE COMPORTE COMO EL PUEBLO DE DIOS. Y esa aspiración de Moshé, se transformó en la «única» que merece ser defendida.

Por eso, cuando se trata de temas personales, que afectan su propio honor, Moshé no se molesta ni se ofende, ni actúa con arrogancia,  PARA MOSHÉ LAS ASPIRACIONES PERSONALES SON UNA DISTRACCION DE LAS ASPIRACIONES QUE TIENE COMO LIDER: EL BIEN DE SU PUEBLO!  

La “Humildad” de un líder judío se manifiesta cuando ese líder  se despreocupa por su ego y sus aspiraciones personales.    

Por eso la Torá dice en la Parashá de esta semana acerca de Moshé : 

Y Moshé, el líder [del pueblo judío], era extremadamente humilde, más [humilde] que cualquier otro ser humano [que habita] en la faz de la tierra  

Bamidbar 12:3




NASO: ¿Cómo mantener y fortalecer la fidelidad en el matrimonio?

Uno de los temas mencionados en la Parashá de esta semana es el de SOTÁ, un caso relacionado con la infidelidad. La Torá y los Sabios discuten este tema en profundidad y describen no solamente las obvias consecuencias del adulterio sino también cuáles son los factores que contribuyen a esta desviación, o a la sospecha de infidelidad, y las conductas que previenen y fortalecen la fidelidad.

En las próximas líneas me referiré brevemente a tres temas relacionados directa o indirectamente con la preservación de la exclusividad sexual en un matrimonio judío.

CONSAGRANDO LA INTIMIDAD SEXUAL

A diferencia de otras religiones, el judaísmo percibe la sexualidad como algo positivo, sagrado. Nuestros Sabios explicaron que nuestro comportamiento debe aspirar a emular a Dios. Él es compasivo, equitativo y magnánimo. Así también nosotros debemos incorporar estas características en nuestro proceder. Esta «imitación de Dios» alcanza su punto más elevado cuando el esposo y la esposa se convierten en «creadores» de una nueva vida. La procreación nos ofrece una oportunidad —sin paralelo en ningún otro acto en la vida— de imitar al Creador Todoposeroso.

La sexualidad también nos completa: nos lleva a la plenitud física y emocional como individuos. La primera referencia bíblica acerca de la sexualidad afirma: “y el hombre… se unirá a su esposa y se convertirán en una sola carne/persona“ (Génesis 2:24). De este versículo, los Sabios dedujeron que un hombre o una mujer deben considerarse como media persona (pelag gufa), y que la culminación de la realización humana solo se puede lograr a través de la intimidad matrimonial.

La sexualidad es ciertamente sagrada, pero también es vulnerable a la corrupción. La Torá relata la generación del Diluvio, donde la corrupción sexual y la violación fueron los síntomas iniciales de la decadencia moral de esa generación corrupta. Para esas personas, el sexo dejó de ser un acto que acercaba a los humanos a lo Divino. Trataban al sexo como si no tuviera relación con el amor y la santidad, y lo consideraban simplemente como casual, sin ataduras: la vía para la satisfacción de los instintos primarios.

Debido a su importancia y sus poderes creativos (y destructivos), la sexualidad necesita ser “consagrada” (qiddushin). La consagración de la sexualidad tiene lugar cuando esta se desarrolla exclusivamente en el contexto del matrimonio. Así, nos permite imitar al Creador y nos ayuda a conocer íntimamente a la persona que más queremos, transformándonos en un ente más relevante que el “yo”: el “nosotros”.

Cuando tiene lugar fuera del matrimonio, el sexo se vuelve destructivo. La infidelidad suele jugar un papel decisivo en la mayoría de los casos de divorcio. El adulterio es, por lo general, la última línea roja que se ha cruzado. La infidelidad aleja a una persona de Dios y de los individuos que uno más ama: la esposa, o esposo, y los hijos.

1.PRESERVANDO LA PASIÓN

Pero el judaísmo va más allá de limitar la sexualidad al contexto del matrimonio. También es fundamental preservar la atracción sexual entre mariod y mujer y evitar aquello que la puede dañarla o destruirla. La Mitsvá de Niddá fortalece la fidelidad. Un matrimonio judío se abstiene de la actividad sexual durante aproximadamente dos semanas cada mes, correspondientes al ciclo de la mujer más siete días adicionales. Cuando los sabios del Talmud, específicamente Ribbí Meir, explicaron la razón detrás de esta regulación, dijeron que gracias a este período de separación física, el esposo y la esposa reviven el deseo del uno por el otro. En otras palabras, lejos de afectar negativamente el deseo sexual este período de separación lo intensifica, evitando uno de los mayores desafíos que enfrentan los matrimonios: el aburrimiento y la monotonía sexual. Este problema, bien conocido y analizado por psicólogos y sexólogos, surge de las teóricas oportunidades ilimitadas de intimidad en una relación matrimonial, lo que puede impulsar la búsqueda de novedades sexuales y conducir a la infidelidad.

El rabino Meir explicó que durante los días de separación física, un esposo judío desea pasionalmente a su esposa, y su atracción física hacia ella se intensifica a medida que se acerca la noche del Mikvé (la inmersión ritual que concluye el período de abstinencia). Y cuando la esposa regresa del Mikvé —incluso en el caso de una pareja que lleva muchos años casados—, el deseo de uno por el otro se regenera “con la pasión que sintieron en su noche de bodas”. Es como si período de Niddá produjera cada mes una nueva luna de miel (alguien dijo que si esta extraordinaria Mitzvá no existiera, ¡habría que inventarla!).

Ese intérvalo de restricción sexual también promueve un nivel más profundo de interacción entre el esposo y la esposa. La pareja aprende a comunicarse afectuosamente a nivel de amistad. Toda pareja debería aspirar a alcanzar un grado de relación no física, que fortalecerá al matrimonio para el resto de sus vidas. Especialmente cuando pasan los años y el deseo sexual disminuye naturalmente, es allí cuando la amistad entre el esposo y la esposa florecerá, basándose en esa «relación platónica» construida durante años en los períodos de Niddá.

2.PRESERVANDO LA FIDELIDAD

En la tradición judía, hay leyes y códigos de conducta diseñados específicamente para evitar la infidelidad. Una de estas reglas se conoce como «Yijud», cuando un hombre y una mujer que no es su esposa se aíslan en un lugar recluido. Los Sabios lo mencionan como uno de los errores que se cometen en el caso de Sotá y promueven las sospechas de adulterio. La historia de Amnón y Tamar en el libro de Shemuel ilustra la importancia de esta regla. Amnón, uno de los hijos del rey David, desarrolló una obsesión sexual por Tamar, su media hermana. Y para recluirse con ella, fingió estar enfermo y solicitó su ayuda. Pidió que todos dejaran su habitación y una vez a solas con su media hermana, Amnón abusó de ella. Este devastador evento impactó profundamente al rey David, quien se sintió culpable por no haberse dado cuenta de lo que ocurría en su propia familia. Para evitar que casos similares se repitieran en el futuro, el rey David, junto con su Corte de Justicia, instituyó la ley de Yijud, que prohíbe a un hombre judío estar recluido en una habitación cerrada junto a una mujer que no sea su esposa.

La prohibición del Yijud se enmarca en la categoría de «guedarim» o «siyaguim», que se traduce como “medidas de seguridad” o cercas halájicas, destinadas a prevenir que los individuos sucumban a transgresiones más significativas. El equivalente de un «siyag» podría ser cuando un guardabosques erige una cerca a unos pasos de un acantilado para proteger a los visitantes, y que estos no se acerquen demasiado e involuntariamente caigan al vacío.

También existen estos tipos de mecanismos preventivos, por ejemplo, en el campo de adicciones. A una persona que lucha con la adicción al alcohol se le aconseja que evite los bares, las reuniones donde se sirve alcohol, y que se abstenga de socializar con amigos que beben. Estas «vallas sociales» sirven para proteger a los individuos de sus propios impulsos y prevenir la posibilidad de enfrentarse a tentaciones irresistibles que no puedan controlar. Es más fácil evitar entrar a un bar que resistirse a beber alcohol una vez que la bebida está al alcance.

De manera similar, los rabinos reconocieron el poder del instinto sexual y subrayaron que confiar únicamente en el sentido común y la moral personal es insuficiente (אין אפוטרוסוס לעריות). Se requieren normas y vallados adicionales para evitar situaciones potencialmente catastróficas. Si se evita el Yijud —el aislamiento privado entre un hombre y una mujer—, se previene el escenario natural en el cual la infidelidad, o la conducta sexual inapropiada, se desarrolla.

El concepto de Yijud en nuestros días no solo se reconoce, sino que también se practica cada vez más, incluso en la sociedad no judía. En Estados Unidos es muy común que los asesores legales recomienden a los terapeutas, médicos, abogados y otros profesionales que eviten estar a solas en una habitación cerrada con un paciente o cliente del sexo opuesto para evitar situaciones inapropiadas o el alegato de las mismas. Esto demuestra la avanzada sabiduría de la Torá y de nuestros Sabios, que establecieron hace miles de años estas leyes que hoy en día son ampliamente reconocidas, valoradas y adoptadas en todo el mundo civilizado.

3.COMUNICACIÓN Y FIDELIDAD

En el judaísmo, la sexualidad se reserva exclusivamente para la relación íntima entre esposo y esposa. Esta sencilla pero crucial idea implica también que se deben evitar ciertos tipos de interacciones entre hombres y mujeres casados , más allá de la reclusión o el Yijud, incluso en el campo de la comunicación.

Un lenguaje o un comentario afectivo y sexual, o un comportamiento sensual de un hombre hacia una mujer que no sea su esposa se considera inapropiado. De manera similar, una esposa judía debe reservar su encanto físico para su esposo, asegurando que su comportamiento y su apariencia en público no sean provocativos y que de eda manera reflejen esta exclusividad.

Estos principios de conducta moral no son muy populares en la sociedad contemporánea, donde la sexualidad ha sido objetivizada a través de la publicidad, la pornografía y los medios de comunicación. La comercialización generalizada del sexo —y la política liberal moderna— ha normalizado la conducta sexual indebida y la intimidad ya no se percibe como un asunto exclusivo entre cónyuges y vinculada únicamente al matrimonio.

Preservar nuestros códigos de conducta judíos viviendo en una sociedad que promueve valores contrarios representa uno de los desafíos más formidables a los que nos enfrentamos los judíos hoy en día. Pero es imperativo hacerlo si buscamos la armonía en nuestra pareja y la felicidad de nuestra familia. Y para eso debemos reconocer cuáles son las conductas que facilitan la infidelidad o despiertan los celos fundados.

Veamos un último ejemplo.

La Torá nos enseña que la infidelidad puede desarrollarse a veces sin premeditación, como consecuencia del intercambio de comunicación emocional entre un hombre y una mujer casada. La primera vez que la Torá describe la relación sexual, usa la palabra “conocer”: «Y Adam conoció a Eva, su esposa». Este «conocimiento» se refiere a la conexión emocional que precede —¡y conduce!— a la intimidad física. Cuando una pareja sale por primera vez (dating), primero se tratan con respeto y cordialidad. Luego llega la amistad, que lentamente se va desarrollando en una relción emocional, que se reconoce cuando cuando la comunicación incluye el tema de sentimientos. Cuando se alcanza este nivel, la pareja está preparada para la intimidad, es decir, para el matrimonio.

Si observamos este progreso, que va desde el respeto a la intimidad, podemos comprender por qué los Sabios advirtieron que más allá de la prevención del contacto físico o la reclusión con alguien del sexo opuesto, una persona casada debe evitar que en su vida profesional o social se repita este proceso de manera involuntaria e inconsciente con otra persona.

Los Sabios describen esa cercanía emocional como «quirub da’at”, es decir, cuando una mujer y un hombre comparten y comunican sentimientos privados e información más íntima. Aunque inicialmente el contenido de esa información no esté relacionado con el ámbito sexual, este nivel de comunicación emocional facilita la atracción y promueve la intimidad.

Un hombre casado debe evitar este tipo de comunicación, especialmente con una persona del sexo opuesto con la que interactúa rutinariamente, como una empleada o una colega en su trabajo. Del mismo modo, una mujer casada debe evitar el diálogo emocional con un entrenador, un terapeuta o un maestro. Estas interacciones emocionales, quirub da’at, no se convierten en intimidad de la noche a la mañana, pero se desarrollan gradualmente.

Preservar la fidelidad es la piedra angular de la familia judía y del bienestar emocional de nuestros seres queridos. Esto requiere mantener la conciencia alerta y respetar los límites que previenen situaciones que pueden volverse progresivamente más difíciles de controlar. Las leyes de Niddá, de Yijud y de quirub da’at, cada una desde un ángulo diferente, contribuyen a salvaguardar la fidelidad: el aspecto más sagrado y esencial de nuestra vida familiar.




Resumen de la Parashá NASO

LOS LEVIIM Y SUS FUNCIONES

Dios le informa a Moshé acerca de las funciones y los deberes de las familias de Guereshón y Merari, de la tribu de Leví. La familia Guereshón debía transportar las cortinas y las cubiertas de tela del Tabernáculo, cuando este se desmantelaba para su relocación. La familia Merari se encargaría del esqueleto del Santuario, es decir:  las vigas de madera, y los pilares. También se presenta el número de miembros de la familia de Kehat, que eran  2.750, en edad de servicio, entre 30 y 50 años. La familia de Guereshón eran 2.630 en esta edad. La familia Merari: 3.200. Así, el total de levitas elegibles para ocuparse de desmantelar transportar y volver a contruir el Tabernáculo  era de 8.580 individuos.

PUREZA E IMPUREZA 

Dios instruye al pueblo judío acerca de las leyes de pureza e impureza y explica que las personas ritualmente impuras deben alejarse del campamento de Israel temporiaramente hasta su purificación. 

RESTITUCION Y ARREPENTIMIENTO

También se discute el tema de restitución en el caso de robo y el sacrificio del Templo que se requiere del que roba a su prójimo y luego jura falsamente para mantener su inocencia y se aclara el tema de restitución cuando la víctima de robo ya no está con vida.  Otro tema muy importante que trata nuestra Parashá es la confesión verbal, a uno mismo,  de los pecados que uno cometió como parte del preciso de Teshubá, o arrepentimiento.

OTROS CASOS ESPECIALES

También se describe el caso de “Sotá”, una ceremonia ritual en el caso de sospecha de adulterio por parte de la esposa. Se mencionan asimismo las leyes del “nazir” , un individuo que toma sobre sí mismo restricciones adicionales a las que ha prohibido la Torá: por ejemplo, no beber vino.  En esta Parashá encontramos también las bendiciones de los Cohanim,  o sacerdotes, que siguen siendo pronunciadas hasta nuestros días.  

LA INAUGURACION DEL TABERNACULO

La sección mas extensa de esta Parashá –que dicho sea de paso, es la más extensa de la Torá– describe la inauguración del Tabernáculo, y las ofrendas voluntarias que los líderes de cada tribu trajeron en le momento de la inauguración. Por ejemplo: carretas y bueyes para  transportar el Tabernáculo de un lado al otro.  Dios instruye a Moshé aceptar estas ofrendas, que la Torá describe individualmente. El último versículo de la Parashá menciona cómo Dios se comunica con Moises, Su voz emanando de entre los dos Querubines que reposaban sobre el Arca Sagrada.




NASO: La bendición de los Cohanim

יברכך ה’ וישמרך 

יאר ה’ פניו אליך ויחנך 

ישא ה’ פניו אליך וישם לך שלום

El texto de Bircat Cohanim, la bendición de los Sacerdotes, se encuentra en la Perashá de esta semana, Nasó. Este texto contiene las palabras con las cuales Dios instruye a los Cohanim bendecir a la congregación de Israel. Vale aclarar que si bien los Cohanim son los que “recitan” esta plegaria, es el Creador, y no los Cohanim, quien nos concede estas bendiciones.  

Antes de examinar su profundísimo contenido, cabe destacar que el texto está presentado en una progresión matemática que sorprende por su impecable diseño: el primer versículo tiene 3 palabras y 15 letras. El segundo 5 palabras y 20 letras. Y el tercero 7 palabras y 25 letras.

Nos enfocaremos ahora en el contenido.

El primer pasuq dice

 «Que HaShem (= Dios) te bendiga y te proteja».

TE BENDIGA: Esto quiere decir: quiera Dios concederme todas las bendiciones materiales que necesito: casa, comida, vestimenta, dinero, etc.  Por supuesto que el hecho que Dios me bendiga no quiere decir que yo no necesito trabajar para merecerlo. La bendición de Dios no reemplaza el esfuerzo humano. El hombre trabaja la tierra y planta las semillas. Y cuando Dios le concede Su bendición –por ejemplo: la lluvia, la salud, la ausencia de plagas, etc. — el hombre recoge los frutos.  La bendición Divina, por lo tanto, implica una suerte de asociación entre el hombre, que debe esforzarse y trabajar, y  Dios que bendice ese esfuerzo para que culmine con éxito.  

TE PROTEJA: Necesitamos la asistencia Divina para poder disfrutar de Sus bendiciones.  ¿Cómo? Protegiéndonos de enfermedades, accidentes, tragedias. En este caso también tenemos la obligación de dar el primer paso y convertirnos en un receptor “merecedor” de esta bendición: si pedimos que HaShem proteja nuestra salud, tenemos que hacer todo lo que esté en nuestras manos para mantenernos sanos. Y debemos evitar correr riesgos innecesarios para no exponernos a accidentes, etc.  Además, la protección Divina viene a complementar la bendición Divina. En cierta manera, aquí le estamos pidiendo a Dios que nos proteja de Su bendición material.  En primer lugar, porque cuando todas mis necesidades materiales están cubiertas,  mi carácter puede verse afectado negativamente. Puedo caer en la ostentación, la arrogancia, el desagradecimiento y el olvido de Dios.   

Pedimos a HaShem que nos conceda generosamente lo que necesitamos y que nos proteja de los efectos adversos de la abundancia material.   

«Que HaShem te ilumine con Su presencia y te agracie».

TE ILUMINE:  Este versículo no describe las bendiciones materiales, sino espirituales, intelectuales y emocionales.  ¿Cómo nos ilumina Dios? Concediéndonos la sabiduría para comprender Su Torá. Por nuestro lado, debemos esmerarnos en estudiar la Torá. Y el Todopoderoso nos bendecirá iluminando nuestra inteligencia, inspirandonos, abriendo nuestros ojos para que comprendamos la Torá y absorbamos sus valores.  Pero la sabiduría no alcanza.…  

TE AGRACIE: De hecho, cuando una persona tiene demasiada sabiduría a veces no posee “inteligencia emocional”. Un individuo puede ser muy sabio pero insensible hacia los demás. El niño más inteligente de la clase, no siempre es el más popular. En esta bendición le pedimos a HaShem que “nos agracie”, es decir, que nos ayude para ser queridos por los demás. En hebreo se dice “ encontrar gracia en los ojos de los demás”.  Pedimos a HaShem que nos aparte de sabiduría nos conceda inteligencia emocional. 

El tercer pasuq dice: 

«Que HaShem dirija Su presencia hacia ti y te conceda la paz».

SE DIRIJA HACIA TI:   Esta bendición significa “que Dios te favorezca”,  que te preste una atención especial, particular. El mayor castigo para el pueblo judío es ser “abandonado” por Dios. De hecho la Torá afirma que si el pueblo judío abandona la Torá, Dios retirará su protección de los judíos, y estaremos expuestos a nuestros nunca pocos enemigos. Cuando la Torá describe este estado de abandono, producto de nuestro propio abandono de Dios,  lo llama “hester panim”,  “Dios oculta Su Faz de nosotros”.  Esta bendición, por otro lado, habla de la situación ideal: cuando Dios dirige Su Faz (Su Presencia, Su Protección, Su bendición) hacia nosotros.  Este es un privilegio que también debemos merecer.  Cuando más nos acercamos a Dios, más se acercará Él a nosotros.   

Y TE CONCEDA PAZ: La mejor forma de entender esta segunda parte es pensar en el Estado de Israel.  Si Israel fuera un país tercermundista, corrupto, marginal —como los otros países de la region—  el mundo nos dejaría en paz. Pero Israel está bajo la permanente protección Divina. Israel sobrevive el constante ataque de sus incansables enemigos. Ganó todas las guerras. Crece y prospera.    Esto es un mérito de los judíos que viven en Israel, que luchan para protegerla y para hacerla crecer.  Pero esto no es suficiente. Israel también cuenta con la asistencia Divina.  Los “ojos de Dios” supervisan permanentemente nuestra querida tierra y sus habitantes.   Ahora bien: cuando el Creador nos concede el privilegio de Sus bendiciones, nuestros enemigos, no lo pueden tolerar. Y harán todo lo posible para evitar que vivamos en paz y prosperidad.   Por eso, en esta bendición le pedimos a HaShem que nos favorezca con Su Providencia, pero también le pedimos «paz», es decir, que nuestra prosperidad «no despierte la envidia y la agresividad de nuestros enemigos».  

Esta es la situación ideal a la que aspiramos como individuos y como pueblo.  




Rosh Jodesh Siván y las tres palabras de Tehilim que más me asustan

Rosh Chodesh Sivan and the three words from Tehilim that scare me the most
אך טוב לישראל
(Aj tob leIsrael)
TEHILIM 73
EL LADO POSITIVO DE LA CRISIS
El Rab Moshé Azancot, z”l (el abuelo de mi colega y amigo, el rab Aryeh Azancot de Beth Torá, NY) me enseñó un significado muy original (una derasha?) de estas tres palabras de Tehilim. Literalmente, este pasuq dice que HaShem eternamente bondadoso con el pueblo judío. Pero nosotros, los Yehudim, tenemos que pasar por el «aj» para apreciarlo. “Aj” es la primera palabra de este pasuq. Y para entender un nuevo significado de este versículo hay que tomar «aj» como onomatopeya, es decir, una palabra cuyo significado está en su sonido. En español, como en hebreo o incluso en inglés (“argh” ) la onomatopeya “aj” es negativa. En español expresa “desagrado”. En hebreo: sufrimiento, frustración, angustia. En este sentido (quizás no literal), las palabras de Tehilim están diciendo algo un poco irónico. “Aj», es decir, el sufrimiento, una crisis que a veces nos ocurre a los Yehudim “tob leIsrael” al final tiene un resultado positivo para el pueblo de Israel colectivamente. Es muy triste, pero es parte de una dura realidad, que cuando los Yehudim estamos bien y no nos enfrentamos a un enemigo exterior, nos cuesta ponernos de acuerdo, nos peleamos, nos dividimos y cada uno tira para su lado. Lamentable solo el enemigo de turno nos hace despertar y estar unidos otra vez.
¿QUIEN NECESITA UNA GUERRA?
Israel ya tuvo 4 elecciones parlamentarias en los últimos meses. Como la sociedad israelí está muy dividida ningún partido llega a la mayoría automática de los 61 votos necesarios para formar gobierno, así que la única manera de tener gobierno es a través de alianzas entre los distintos partidos políticos. Básicamente hay 2 grupos: la derecha y la izquierda, con muchas variantes en el medio. La derecha de Israel, entre otras cosas, tiene una mano dura con el terror, y hace las mínimas concesiones posibles. Esta posición más que ideológica es pragmática: del lado Palestino NO HAY con quién hablar. No hay ningún líder palestino que declare abiertamente, y en árabe, que quiere “y vivir en paz junto a un estado judío al cual reconocen». Tomando solo este dato en cuenta, los partidos de derecha cuentan con más de 70 votos. Pero esta vez en las elecciones hubo otro factor: los partidos de derecha se dividieron y no formaron una coalición por “resentimientos personales” (שנאת חינם) entre los líderes políticos más que por variables ideológicas. Y literalmente, «unas pocas horas” antes de que comenzarán los bombardeos desde Gaza, 3 partidos de derecha se preparaban a traicionar sus principios y formar una coalición con partidos políticos ¡que se oponen explícitamente a la religión judía o que no reconocen el derecho del pueblo de Israel a un Estado judío!
Y entonces comenzaron los bombardeos de Gaza, los disturbios y los “progroms” árabes en Lod, Aco, Haifa, etc. Y recién allí un representante de los partidos de derecha decidió dejar de lado sus resentimientos personales y evitar una coalición que, en mi opinión, hubiera sido trágica para Israel. En este momento, y como los sugieren esas 3 palabras de Tehilim, los líderes políticos de Israel de derecha y centro por fin se unieron . «Aj», la crisis sufrida terminó por ser beneficiosa para el pueblo de Israel colectivamente. Es muy triste que para volver a la unidad tuvieron que caer cohetes, causar cuantiosos daños materiales y provocar la pérdida de preciosas vidas humanas. Asusta que la única forma de estar unidos sea una guerra contra el enemigo…
EL VERSÍCULO MAS POSITIVO
La entrega de la Torá, que celebramos en Shabuot, solo fue posible gracias a que estuvimos unidos. Así comienza el texto que describe la revelación Divina en el Monte de Sinai: VAYIJAN SHAM ISRAEL NEGUED HAHAR «y el pueblo de Israel acampó allí, frente al Monte [Sinaí]». Los Sabios explican que el pueblo judío estaba unido «orgánicamente» como si se tratara de “un solo individuo, con un mismo corazón”. En ese momento dejamos de lado nuestras diferencias y nos sentimos parte de un mismo pueblo. En ese momento estábamos “unidos” frente al Monte Sinai. Esta palabra frente “negued” también significa “enfrentando” y en este contexto el pasuq nos quiere decir que el pueblo de Israel no permanecía unido porque estaba enfrentando a un enemigo común, sino que estaba unido frente a un objetivo común: recibir la Torá y transfórmanos así en el Pueblo de Dios.
No tengo dudas que B”H Israel triunfará en esta terrible guerra “en todos los frentes”, y no tengo duda que saldremos de esta crisis más fortalecidos de lo que estábamos antes de este conflicto.
Pero rezo a HaShem , y ruego a cada uno de nosotros, que aprendamos a «estar y permanecer unidos» no por los misiles mortales del enemigo sino por las palabras inmortales de nuestra Torá.



¿Cómo se celebraba Shabuot en el Gran Templo de Jerusalem?

רֵאשִׁית, בִּכּוּרֵי אַדְמָתְךָ, תָּבִיא בֵּית ה’ אֱלֹקיך
Shabu’ot, el día que celebramos la entrega de la Torá y el comienzo de nuestro pacto con Dios, es también conocido como Jag haQatsir, o la fiesta de la cosecha, y Jag haBikkurim, la fiesta de las primicias. Veamos por qué.
En este periodo, entre la primavera y el verano de Israel, comenzaba la cosecha de las plantas, granos y frutas que ya estaban madurando. Y lo primero que hacíamos los Yehudim era agradecer a HaShem por habernos dado nuestra tierra de Israel y habernos bendecido con sus frutos.
La parte más importante de la celebración de Shabu’ot en los tiempos de nuestro Bet haMiqdash era la ofrenda de los Bikkurim, las primicias, los primeros frutos y granos.
Los Yehudim llegaban desde todos los poblados de Israel y traían unas canastas con los primeros frutos. Pero, ¿cómo sabían cuales habían sido los primeros frutos?
El siguiente fue el método de selección de frutas para la ofrenda: Al visitar su campo y ver un higo, o una uva, o una granada que estaba madura, el propietario ataba una fibra alrededor de la fruta, diciendo: «Esto estará entre los bikkurim «.
La Mishná cuenta que cuando los campesinos iban a inspeccionar sus campos, prestaban mucha atención a los primeros frutos que crecían. Y cuando descubrían un higo, o una uva, o una granada la marcaban haciendo un nudo con una cinta de fibra vegetal alrededor de la fruta.
Luego, cerca de Shabu’ot, cuando llegaba el momento de ir a Yerushalayim, esas frutas ya maduras se recogían y se colocaban en una canasta. En cada ciudad y pueblo se organizaba una caravana de varias familias para ir juntos al Bet haMiqdash. Aparte de las frutas también llevaban palomas y por lo general, un toro, que solía estar adornado. Cuando pasaban por algún pueblo, la gente de esos pueblos salía a recibirlos, homenajearlos y ofrecerles reposo, alojamiento o agua, si era necesario. Cuando se acercaban a la ciudad, mandaban una persona para anunciar su llegada. Una delegación de Cohanim (sacerdotes) del Bet haMiqdash salía a recibirlos con todos los honores y los acompañaban. Por lo general las caravanas llegaban la víspera de Shabu’ot. Pasaban la noche en un lugar especial asignado por los Cohanim fuera de la ciudad. Al amanecer los Cohanim acompañaban a la caravan a ingresar a la ciudad de Yerushalayim, con canciones e instrumentos musicales (flautas).
En Yerushalayim eran recibidos por los dignatarios de la ciudad, quienes los acompañaban hasta el Monte del Templo y el Bet haMiqdash. En este punto la alegría se mezclaba con la emoción de ingresar en el Gran Templo de Yerushalayim, verlo en todo su esplendor y escuchar las hermosas canciones de los Leviim (levitas). Una vez allí, los Yehudim presentaban individualmente sus canastas ante a los Cohanim y mientras mantenían la cesta sobre sus hombros recitaban la siguiente declaración: “Hoy vengo a declarar [en agradecimiento] ante HaShem…, que he llegado a la tierra que Él nos dio, tal como lo juró a nuestros antepasados”. La canasta con frutos era recibida por el Cohen mientras el que que la ofrecía recitaba la siguiente Tefilá de agradecimiento: “Mi padre [Abraham Abinu] fue un arameo nómada, [su descendencia luego] descendió a Egipto con muy poca gente y residió allí hasta llegar a ser una gran nación, fuerte y numerosa. Los egipcios nos maltrataron, nos hicieron sufrir y nos sometieron a trabajos forzados. Y entonces clamamos HaShem, el Dios de nuestros padres. Él escuchó nuestra plegaria y vio nuestra miseria, los trabajos forzados y la opresión que nos habían impuesto. Y HaShem nos sacó de Egipto con milagros y un gran despliegue de Su poder.… Y nos trajo hasta este lugar y nos dio esta tierra, donde abundan la leche y la miel. Y por eso [en señal de agradecimiento] traigo ahora las primicias de la tierra que tu HaShem, mi Dios, me has concedido”.
Quiera HaShem renovar Su Presencia en Yerushalayim, pronto, en nuestros días, AMEN.

MAS SOBRE SHABUOT




La Ketubá escrita en Gaza

En la mayoría de las congregaciones Sefaradíes, antes de la lectura de la Torá del primer día de Shabu’ot se recita un “acta de matrimonio o Ketubá muy especial que compara la relación entre Dios e Israel con un matrimonio. El pacto de amor entre Dios e Israel que recordamos en Shabu’ot fue formalizado con la entrega de la Torá, de la misma manera que un matrimonio se formaliza con la entrega de la Ketubá. Esta comparación entre el pacto Dios – Israel y un matrimonio es muy antigua. Y está mencionada numerosas veces en el Tanaj. Curiosamente,  la Haftara que leímos este último Shabbat (Hoshea 2:21-22) menciona las hermosas palabras que Dios le dice a Israel: “Te tomaré como Mi esposa para siempre. Te desposaré con justicia, derecho, bondad y compasión. Te desposaré y te seré eternamente fiel y así sabrás que Yo soy Tu Dios…”. Estas palabras las repetimos todos los días al vestir el Tefilín, cuando anillamos las tiras de cuero alrededor del dedo mayor, recordando así nuestra alianza matrimonial.

Una Ketubá matrimonial comienza mencionando el día de la semana, luego el día del mes, luego el año, el lugar donde se realiza el matrimonio, los nombres del novio y la novia y luego las obligaciones de los novios. El novio también presenta a la esposa con regalos y le cede a la novia otros generosos presentes como garantía y expresión de su fidelidad. También se habla de la dote, y se establece dónde residirá la pareja.  La novia finalmente acepta lo que el esposo le concede y el contrato matrimonial se formaliza ante dos testigos.

EL TEXTO DE LA KETUBA DE SHABUOT

«Hoy, día viernes, el sexto día del mes de Siván, el día elegido por el Santo Bendito Él para la revelación de la Torá a Su amado pueblo … El invisible pero Omnipresente novio salió hacia el Monte Sinaí, brilló desde Se’ir y apareció desde el Monte Parán ante todos los reyes de la tierra, en el 2448 desde la creación del mundo, …en esta tierra cuyos cimientos fueron sostenidos por Él, .. el Esposo [Dios], Gobernante de los gobernantes, y Rey de Reyes ….declara a la hermosa y virtuosa novia [el pueblo de Israel] que ganó Su favor por encima de todas las otras doncellas, que es hermosa como la luna, radiante como el sol … para siempre serás mía y Yo seré tu redentor. He aquí, te regalo Mis preceptos preciosos, por medio del legislador Yequtiel [Moisés]. Y tu serás mi esposa de acuerdo con la ley de Moisés e Israel, y Yo te honraré, to sostendré y te mantendré, y seré tu amparo y refugio en todo momento y eternamente. Y he asignado para ti, tu fidelidad y lealtad la Torá, “un manual de vida”, y que al seguirla tanto tú como tus hijos vivirán en paz y tranquilidad. Y la novia [Israel] aceptó y se convirtió en Su esposa. Y así se estableció entre ellos un pacto eterno que los unirá para siempre. Luego, el Novio acordó agregar a lo anterior todas las lecciones de vida en que le futuro se desprendan de las Sagradas Escrituras: incluyendo la Sifrá, el Sifré, la Aggadá y la Toseftá. Y estableció la validez de 248 mandamientos positivos que y les añadió las 365 prohibiciones. La dote que esta novia trae de la casa de sus padres [nuestros antepasados] , consiste en un corazón abierto para comprender [la Torá], oídos que la escuchen y ojos que la estudien. Así, la suma total de la Ketuba y la dote, con la adición de los mandamientos positivos y negativos, equivale a la siguiente [obligación por parte de Israel] : “Respeta a Dios y observa Sus mandamientos; porque este es el propósito de la vida del ser humano”(Kohelet 12:13). El Novio, deseando conferir privilegios a Su pueblo Israel y transmitirles estos valiosos bienes, asumió la responsabilidad de este contrato matrimonial… la herencia que recibiera la novia, será la inmortalidad en el mundo por venir… y la residencia, [aunque no estén en la tierra de Israel], en cada lugar que se estudie la Torá [allí residirá Su Presencia] .  Y la novia ha respondido afectuosamente a todo lo propuesto por el Novio: «Haremos y escucharemos». Todas estas condiciones serán válidas y no podrán ser alteradas por los siglos de los siglos. El Esposo ha hecho su juramento a favor de su pueblo y se compromete a serle fiel y nunca reemplaza por otra mujer. El Novio, siguiendo la formalidad legal hace entrega de este documento [La Torá, que es la Ketubá entre Dios e Israel] … y se invoca al cielo y a la tierra como testigos presenciales [y eternos] de este compromiso. ¡Que el Novio siempre se alegre con la novia a quien ha tomado como Su esposa, y que la esposa se regocije con su Esposo, recitando siempre Su alabanza”.

Esta ha sido una traducción abreviada, pero creo que fiel, del texto de la Ketubá que escribió el Rab Israel Najara z»l (1555-1625). Dicho sea de paso: a que no adivinan en qué ciudad vivió el Rab Najara los últimos años de su vida? Allí también murió y allí fue enterrado.  En la ciudad judía de Gaza.

Ver mas sobre el Rab Israel Najara aquí: https://www.halaja.org/2015/06/el-rab-israel-najara-1555-1625-y-la-sinagoga-mas-antigua-del-mundo/