4 DE JULIO: Gershom Mendes Seixas (1745-1816), el primer rabino norteamericano


Nacimiento y origen familiar
Gershom Mendes Seixas nació en Nueva York el 15 de enero de 1745. Fue hijo de Isaac Mendes Seixas y Rachel Levy, ambos descendientes de familias sefardíes que emigraron de Portugal y España al Nuevo Mundo, estableciéndose en la pequeña pero influyente comunidad judía de Nueva York. Su padre, Isaac, era comerciante y uno de los fundadores de la sinagoga Shearith Israel, la más antigua de América del Norte.

Desde joven, Gershom se dedicó al estudio de la Tora. En esa época no había yeshivot ni centros rabínicos en América, pero estudió Tora, Tanaj y tradición judía con maestros locales y libros traídos de Europa. Aunque careció de estudios rabínicos formales, por su conocimiento, su fluidez en hebreo y su liderazgo, fue designado como jazán (oficiante), predicador y guía religioso en Shearith Israel, cargo que en las comunidades sefardíes equivalía al de rabino o jajam.

Educación y liderazgo religioso
Dominaba inglés y hebreo, y poseía conocimientos de castellano y portugués, reflejo de su herencia sefardí. En 1768, con apenas 23 años, fue designado jazán de Shearith Israel. Durante la Guerra de Independencia, su liderazgo se puso a prueba. La comunidad judía estaba dividida entre leales a la Corona británica y patriotas. Gershom apoyó firmemente la independencia. Cuando las tropas británicas ocuparon Nueva York en 1776, abandonó la ciudad junto con otros patriotas, trasladándose a Filadelfia.

Patriotismo y servicio en Filadelfia
En 1780, dejó Stratford y se estableció en Filadelfia, la capital revolucionaria. Allí fue nombrado jazán de Mikveh Israel, la segunda congregación más antigua de Estados Unidos. Durante los años críticos de la guerra, ofició, predicó y mantuvo viva la vida religiosa judía. Cuando terminó la guerra y los neoyorquinos comenzaron a regresar, Mikveh Israel no quería dejarlo ir, pero Seixas volvió a Nueva York, donde residiría el resto de su vida.

Familia y vida personal
Con su primera esposa, Elkaleh Cohen, tuvo dos hijos. Tras su fallecimiento, se casó con Hannah Manuel, con quien tuvo diez hijos. Su descendencia continuó siendo influyente en la vida judía americana, manteniendo el apellido Seixas como símbolo de orgullo sefardí.

Funciones comunitarias y cívicas
Sus deberes como jazán no se limitaban a dirigir los rezos. También era responsable de la educación, la circuncisión, el shejitá (faena ritual), y era la principal autoridad religiosa y comunitaria de los judíos neoyorquinos, una comunidad pequeña y unida.

Seixas también representaba a los judíos ante la sociedad general. Entre 1784 y 1815, fue miembro del consejo directivo (Regent) de Columbia College junto a personalidades como Alexander Hamilton y John Jay, siendo el primer judío en ocupar tal cargo en una universidad americana. Este puesto lo ejerció durante más de tres décadas, reflejando la integración de los judíos en la vida cívica estadounidense.

Predicaciones y estilo religioso
Característico de su servicio en Shearith Israel fue la costumbre de pronunciar sermones en inglés, algo inusual en un jazán tradicional. Este cambio reflejaba la influencia del protestantismo americano, así como los ideales liberales de la Ilustración. Sus contemporáneos lo llamaban “minister” o “reverend”, títulos más comunes entre cristianos, pero que reflejaban su nuevo rol como guía espiritual integral.

Aunque no publicó libros de halajá, sus sermones fueron transcritos y conservados por miembros de la congregación. Entre ellos destacan:

  • Su oración en el Día de Acción de Gracias proclamado por Washington en 1789, donde habló del deber de los judíos de agradecer a Dios por vivir en un país de libertad.

  • Sus mensajes de Rosh Hashana y Yom Kipur, insistiendo en la responsabilidad moral y en la importancia de las mitsvot como garantía de continuidad judía.

Cambio lingüístico y legado histórico
Durante su liderazgo, el español –lengua tradicional de los sefardíes– comenzó a ceder lugar al inglés, dado el crecimiento de los judíos ashkenazíes y la integración de la comunidad judía en la sociedad americana. Este proceso marcó el surgimiento de formas propias de judaísmo americano, donde la identidad sefardí y el idioma inglés se fusionaban en un mismo liderazgo.

Últimos años y legado
Falleció el 2 de julio de 1816 en Nueva York, a los 71 años, y fue sepultado en el cementerio antiguo de Shearith Israel. Hoy se le recuerda como el primer líder judío americano en apoyar abiertamente la independencia, un patriota que confió en que Estados Unidos sería un lugar donde los judíos pudieran practicar su religión con libertad y dignidad.

En palabras de los historiadores: “Seixas fue para el judaísmo americano lo que George Washington fue para Estados Unidos: un padre fundador”. Su vida y obra simbolizan la integración de los judíos en América sin renunciar a su fe y tradiciones.


Oración de Gershom Mendes Seixas en la inauguración de George Washington

30 de abril de 1789 | Congregación Shearith Israel, Nueva York

“Dios nuestro y Dios de nuestros padres:
Te suplicamos que derrames Tus bendiciones sobre el Presidente de los Estados Unidos y sobre todos aquellos que tienen autoridad bajo su mando. Que sean fortalecidos con Tu poder para cumplir los deberes de sus respectivos cargos con honestidad e integridad. Que sean guiados por la sabiduría, aconsejados por la comprensión y sostenidos por Tu fuerza.
Que este gobierno sea una bendición para todos los habitantes de esta tierra; que promueva el honor de Tu santo Nombre y el conocimiento de Ti y de Tu ley, para que la justicia y la paz prevalezcan, la verdad florezca en los días de nuestra vida, y se nos permita ver la venida del Redentor en paz. Amén.”


 




JUQAT: Tres enseñanzas bíblicas para el nuevo ejército de Israel

LOS HOMBRES LANGOSTAS

En algún punto no especificado en la Perashá de esta semana, Juqat, el texto bíblico hace un salto en el tiempo y nos transporta desde el segundo año de la salida de Egipto al año 40. Los nuevos protagonistas son la joven generación del pueblo de Israel, que esta vez está lista para luchar y conquistar la tierra prometida.

La generación anterior nació y vivió toda su vida en la esclavitud. No sabían luchar ni defenderse. Se habían liberado de la esclavitud pero sufrían del miedo a la libertad. Vieron y experimentaron los milagros más imponentes de la historia —las diez plagas, la apertura del mar, la revelación de Dios en el monte Sinaí, el maná que caía del cielo— ¡pero no se convencieron! Dios estaba con ellos, ¡pero no lo veían!  Fue la generación derrotista que se definió a sí misma como “langostas” que no podían defenderse del enemigo.

Esta generación ahora ha desaparecido. El cambio en la mentalidad del pueblo judío, lamentablemente, no ocurrió como un proceso de transición desde la esclavitud a la libertad. Ocurrió, como lo dijo una vez sin compasión el secretario de Estado norteamericano Henry Kissinger: “Algunas veces el cambio de mentalidad no tiene lugar a través de un lento proceso de aprendizaje, sino funeral tras funeral”.

La nueva generación que no se crió obedeciendo al Faraón sino observando la voluntad de Dios comienza ahora su implacable campaña de conquista de la tierra prometida.

¿CÓMO NO NEGOCIAR CON SECUESTRADORES?

El primer desafío que enfrentan es sumamente relevante para nuestros días. Los cananeos de la ciudad de Arad, en el Negueb, atacan a los judíos.  ¿Saben qué hacen los cananeos? ¡Toman prisioneros judíos! ¿Y qué hace el nuevo ejército de Israel en su primer desafío? Primero rezan a Dios, le prometen lealtad y gratitud a Dios si les concede ese primer triunfo. Luego, ni se les ocurre negociar con los secuestradores, ya que en Medio Oriente eso refleja debilidad y estimula al enemigo a secuestrar más judíos.  La nueva generación ataca a los secuestradores del enemigo, los elimina y rescata a los rehenes. La Torá no parece muy a favor de negociar con terroristas. ¿Y el resultado?  No se escucha de ningún otro pueblo Canaanita que toma rehenes judíos. Lección número 1.

LA PRIMERA GUERRA

Inmediatamente después, encontramos a los judíos en lo que hoy es Jordania. Antes de atravesar el río Jordán para llegar a Israel, tienen que atravesar los territorios de Sijón y Og, reyes del Emorí y del Bashán respectivamente.

Sijón era un poderoso rey, con fama de invencible.

Ahora, el comandante en jefe del nuevo ejército de Israel, nada menos que “Moshé Rabbenu”, le envía a Sijón un “mensaje de paz”, . Moshé le dice a Sijón más o menos así:

“El pueblo de Israel solicita permiso para atravesar su territorio sin desviarse del camino principal, sin arruinar tus campos o viñedos, y sin intención de beber agua de tus pozos. No buscamos la guerra contigo. Solo queremos pasar por tu territorio para cruzar el río Jordán y llegar a nuestro destino: la tierra de Israel que nos fue prometida por Dios” (Bamidbar 21:22).

Sorprendentemente —o no— Sijón rechaza el generoso mensaje de paz de Israel y sin provocación alguna sale a atacar a los judíos. Irónicamente, el primer desafío militar para el nuevo ejército de Israel no fue atacar y conquistar sino “defenderse de sus atacantes”. Estamos ante la primera batalla del Ejército de “Defensa” de Israel.

Sijón calculó mal:

“Israel lo venció a punta de espada y heredó su territorio, desde Arnón hasta Yabok, hasta la tierra de Amón…”

No quedó nada del violento Sijón que no quería ni buscaba la paz.  E Israel “heredó su tierra”, del otro lado del Jordan, la anexó. Porque de acuerdo a la Torá, si alguien te ataca, te defiendes y le ganas, no le tienes que regresar su territorio: ahora es TU POSESIÓN. Lección número 2. Tierra conquistada, tierra anexada.

SEGUNDA GUERRA

Luego llega la segunda guerra que enfrentó el nuevo ejército de Israel. La batalla contra Og que también salió a atacar a Israel, sin provocación.

“El pueblo (de Israel) se dirigió hacia el norte por el camino de Bashán, pero Og, el rey de Bashán, salió con todo su pueblo para enfrentarlos en batalla en Edrei. Dios le dijo a Moshé: ‘No le temas, porque yo te lo entregaré a él y a todo su pueblo en tus manos. Harás con él lo mismo que hiciste con Sijón, el rey de los emoritas, que habitaba en Jeshbón.’ El pueblo de Israel lo derrotó a él y a todo su pueblo completamente… ” (Bamidbar 21:33-35).

Israel eliminó a Sijón y a Og porque no querían, y si los dejaban allí, era solo una cuestión de tiempo hasta que se rearmen de nuevo y ataquen, secuestren, violen o asesinen a los judíos. No se puede dejar lobos hambrientos alrededor del “rebaño de Dios” que solo quiere vivir en paz. Lección número 3.  ¡Los lobos son insaciables! Y cuando más los alimentas, más hambre tienen.

 

LOS NUEVOS SOLDADOS

No puedo dejar de conectar nuestra Perashá con nuestra realidad hoy en día, y con los valientes jóvenes soldados que hoy pelean con un espíritu bíblico indomable. Ellos comprenden que están luchando las Miljamot Hashem, “las guerras contra los enemigos de Dios, que son los enemigos de Su pueblo, Israel”. Estos soldados, que poseen una profunda Emuná, son cada vez más prominentes en el nuevo ejército de Israel.

Ayer miraba el programa periodístico “Los Patriotas” (הפטריוטים) del canal 14 de Israel, que se transmite de domingo a jueves a las 21.00 horas. En ese programa entrevistaron a dos soldados que cubrían sus rostros por seguridad (ver foto). Habían regresado de Gaza después de varias semanas de combate cara a cara contra terroristas de Hamas. Pertenecen a la nueva unidad Jashmonayim, integrada por soldados jaredíes (ultraortodoxos) que en el pasado no se reclutaban al ejército. Fue emocionante escucharlos: “Alef” y “Shin” —sus nombres se ocultaban por seguridad— expresaron su orgullo de servir a su pueblo y protegerlo, conscientes de que están escribiendo historia. Dijeron una y otra vez que, a partir del 7 de octubre, no podían quedarse con los brazos cruzados y que todo lo que querían era servir en una unidad del ejército donde respeten sus principios religiosos. Y estaban muy orgullosos de que ahora exista es unidad: Jashmonayim.

Esta es la nueva generación, la de los judíos del 8 de octubre, que traerá más Torá y principios judíos más sólidos al ejército de Israel.

Estos soldados, familiarizados con nuestra historia bíblica, saben muy bien que con terroristas no se negocia. Y tienen muy claro que las tierras conseguidas con sangre no se devuelven. Además, entienden perfectamente que no se puede tener compasión por los enemigos “amalequitas” (aquellos que solo buscan matarte). Porque luego del 7 de octubre, los judíos reaprendimos una lección que la Torá nos había enseñado hace mucho tiempo: que cada vez que le perdonás la vida a un lobo, estás matando a una oveja.




JUQAT: Las serpientes del desierto y el tiranosaurio de Jurassic Park

וַיְשַׁלַּח ה’ בָּעָם אֵת הַנְּחָשִׁים הַשְּׂרָפִים

UN IDIOMA SOFISTICADO
El idioma hebreo original, el bíblico, es sumamente sofisticado. Casi todas las palabras tienen una “raíz” semántica de 3 letras, que con el agregado de prefijos y sufijos se diferencian una de la otra. Lo verbos, también de 3 letras, se pueden combinar de 7 formas distintas (binyanim) , con significados diferentes que pueden pasar desapercibidos para el principiante. Esta breve explicación debería ser suficiente para comprender una idea “filosófica” muy profunda que se esconde detreas de este tipo de detalles muy sutiles de la gramática bíblica.  En la Parashá de esta semana el pueblo nuevamente se queja y se rebela. En un momento sugieren que no deberían haber salido de Egipto. Dios castiga este intento de insubordinación “enviando” a las serpientes venenosas que se cobran numerosas víctimas. Esta es la traducción de casi todas las traducciones, judías y no judías, al español en un versículo de nuestra Parashá, Juqat, Bamidbar (Números) 21: 6: “Y Dios envío /mandó al pueblo las serpientes venenosas… “.Sin embargo, esta traducción no captura la sutileza de este versículo

¿ENVIAR O LIBERAR?
Hay dos maneras de vocalizar la misma palabra hebrea «וישלח»: una es VAYISHLAJ y la otra VAYISHAL-LAJ. Sin adentrarnos mucho en los detalles, la primera palabra, que figura muchas veces en esta misma sección semanal, significa “enviar” , “mandar”. Así, nuestra Parashá menciona por ejemplo que Moshé “envió” emisarios a hablar con los pueblos de Edom (20:14) y luego de Emor, (21:21), etc. Esta palabra se repite muchísimas veces en la Torá e incluso hay una Parashá con este nombre VAYISHLAJ (YAAQOB MALAJIM…). La segunda palabra, VAYISHAL-LAJ (con el daguesh, que duplica la letra «L») es menos común y su significado es diferente: Un ejemplo que se me ocurre es VAYHI BESHAL-LAJ PAR’O ET HAAM, también malinterpretado por casi todas las traducciones como “Y fue cuando el faraón ‘envió’ al pueblo”, como si los traductores no diferenciaran entre las dos palabras…  Ahora bien, ¿cuál es la diferencia entre VAYISHLAJ y VAYISHAL-LAJ ? La primer significa enviar, mandar: A envía a B para una misión específica (SHELIJUT o SHALIAJ). La segunda VAYISHAL-LAJ significa: “liberar”, ”dejar salir”, “soltar”, y expresa la idea de que A, que está de alguna manera “imitado” por B,  es ahora «dejado en libertad» y puede actuar por su cuenta. El Faraón no «envía» a los judíos con una misión fuera de Egipto: el Faraón los “deja salir”, “los libera” de su captividad y una vez libres los judíos actúan por su cuenta. La diferencia semántica no es pequeña.

EL MODUS OPERANDI DIVINO
Volvamos ahora a las serpientes: VAYISHAL-LAJ no significa que Dios “envió” a las serpientes a morder a sus victimas sino que Dios «las liberó». Nuestros Sabios explican que en el desierto Boré Olam nos protegió de nuestros enemigos y de los elementos naturales, el peligroso clima, los animales del desierto, las tormentas de arena, con los “‘anané kabod”,  una nube virtual, una cúpula trasparente, o en un idioma más comprensible en la era informática, un “firewall”. El castigo Divino entonces, no consisntió en que Dios “enviará” a las serpientes venenosas, sino en que Dios suspendiese su protección especial, y así las serpientes venenosas actuaron según su naturaleza e instinto. Recuerdo una escena inolvidable de “Jurassic Park” que puede ilustrar esta idea. El tiranosaurio Rex, el dinosaurio carnivoro y muy peligroso, estaba contenido por una cerca eléctrica de 10.000 voltios y esa cerca lo separaba de los cabritos, su comida diaria, y de los humanos que estaban visitando el parque.…

Por alguna razón la electricidad del parque dejó de funcionar, y la cerca era ahora inservible. El tiranosaurio se “había liberado” y ahora seguía sus instintos y devoraba a los cabritos. En nustro caso, Dios “desactivó”, “suspendido” Su protección especial. Y las serpientes quedaron libres y siguiendo su naturaleza comenzaron a morder y causar la muerte de sus víctimas.

¿QUIEN DESACTIVO LA CERCA?
Por qué esta idea es tan importante? Porque nos ayuda a comprender que HaShem protege constantemente a Israel, y no solo en el desierto.… Israel, dijeron los Profetas y los Sabios, es como un cabrito entre las naciones, rodeado de enemigos que lo quieren destruir. Israel está protegido por Boré Olam a través de un invisible firewall Divino, una cerca de 10.000 voltios que mantiene alejados a nuestros enemigos, desbarata sus planes, desvía sus misiles, confunde sus ideas, etc. Cuando nuestra conducta no es la correcta, de alguna manera el firewall Divino se desactiva: HaShem “suspende” su protección especial y los enemigos de Israel hacen lo suyo.… Esta idea esta dicha de una manera muy explícita en Debarim 31:18 , ואנכי הסתר אסתיר פני ביום ההוא , cuando el pueblo judío abandona su pacto con HaShem, el mayor castigo es que HaShem oculta Su presencia, esto es , Su protección especial, hacia nosotros.

Pero creo que lo mas importante —y lo más hermoso— de esta idea de VAYISHAL-LAJ , es comprender que el Creador nos protege permanente y constantemente como pueblo y también como individuos sin que lo pidamos y sin que nos demos cuenta. Piensen, por ejemplo, que alrededor nuestro (o dentro de nuestro cuerpo) hay millones de bacterias, hongos, virus, parásitos y pequeños microbios, muchos de los cuales nos podrían afectar o hasta matar. El Creador nos protege permanentemente de la naturaleza que nos rodea, de accidentes que tan fácil pueden ocurrir. El Todopoderoso nos cuida conteniendo estas fuerzas naturales dañinas. Y tal como sucede con un firewall o un programa antivirus que protege a nuestras computadora, esta «protección Divina»  está permanentemente activa 24/7 sin que que lo percibamos. Todos los días, 3 veces por día, aludimos a este tipo de protección Divina cuando recitamos la berajá MAGUEN ABRAHAM. “Protector de Abraham ” HaShem nos cuida y nos protege con Su invisible escudo protector.

Shabbat Shalom




RESUMEN DE LA PARASHÁ JUQAT

Cenizas que purifican
La más severa de todas las impurezas rituales es la tum’at met, la impureza contraída por el contacto con un cadáver humano. Esta sección detalla el proceso de purificación para una persona u objeto que ha contraído esta forma de impureza. Se sacrifica una vaca de pelaje rojizo y se quema su cuerpo, se añade agua de un arroyo a las cenizas y esta mezcla se rocía sobre la persona u objeto que queda libre de esta impureza. Una persona impura no puede ingresar al Tabernáculo o al Templo hasta que el proceso de purificación esté completo.

Muerte de Miriam
La Torá registra la muerte de Miriam, la hermana de Moshé, en el cuadragésimo año de la estadía de los israelitas en el desierto. Con la muerte de Miriam, las aguas que fluían providencialmente se secan. El pueblo se queja amargamente por la falta de agua.

Moshé golpea la roca
Dios le dice a Moshé y a Aharón que tomen un bastón y reúnan al pueblo frente a una roca en la montaña y sin tocarla: Moshé debe “hablar” a la roca que milagrosamente dará su agua. Esto debía ser una demostración adicional del poder Divino y de su amor por Israel. Pero Moshé «golpea» a la roca, de la cual sale ahora agua, lo que da la impresion de haber sido causado por el impacto del bastón –o por un acto de violencia– en lugar de la intervención Divina. Dios castiga a Moshé y Aharón y ya no seguirán liderando por mucho más tiempo al pueblo de Israel.

Rechazo del rey de Edom
Moshé envía mensajeros al rey de Edom solicitando permiso para pasar por su tierra en su camino a la Tierra Prometida. A pesar de las promesas de Moshé de no causar daño a la tierra mientras pasan, Edom rechaza el paso de los judíos. Por lo tanto, los judíos se ven obligados a rodear la tierra de Edom y acercarse a Canaán desde el este.

Muerte de Aharón y batalla contra los cananeos
Los judíos llegan al Monte Hor. Por mandato de Dios, Moshé, Aharón y el hijo de Aharón, Eleazar, suben al monte. Aharón se quita las vestiduras de sumo sacerdote y Eleazar se las pone. Luego, Aharón fallece. Toda la nación lamenta la muerte de Aharón durante treinta días.

Los primeros rehenes judíos

Los cananeos de la ciudad de Arad en el Negev, atacan a los judíos y toman prisioneros. Los judíos rezan a Dios, y no negocian con los terroristas sino que emprenden una operación de rescate que gracias a Dios culmina con éxito.

El pueblo se queja de su comida

En una enorme demostración de falta de agradecimiento, los judíos afirman que están «hartos» del maná. Dios envía serpientes al campamento israelita, y muchos mueren. Moshé reza a Dios en nombre de los judíos. Siguiendo las instrucciones de Dios, Moshé diseña una serpiente de bronce y la coloca en lo alto de un poste para que los judíos miren hacia arriba, recen y sean curados.

Conquista de la tierra de los Emoritas (amorreos) y la nación del Bashán
Los judíos se acercan a la tierra de los amorreos, ubicada en la orilla oriental del río Jordán. Envían un mensaje a Sijón, su rey  pidiendo permiso para pasar por su tierra en ruta a Canaán. Sijón se niega y en su lugar reúne a sus ejércitos y ataca a los judíos. Los judíos son victoriosos y ocupan las tierras de los amorreos. Luego, Og, rey de Bashán, también ataca a los judíos. Los judíos triunfan nuevamente y ocupan su tierra.

Ahora la nación judía ha llegado a la orilla del río Jordán, justo enfrente de la ciudad de Jericó en la tierra de Israel. Listos para conquistar la tierra .




JUQAT: Las vacas pelirrojas y la educación de nuestros hijos, por Rabanit Coty Bittón

DOS TIPOS DE PRECEPTOS
Nuestros sabios identifican dos clases de preceptos: MISHPATIM, aquellos mandamientos que coinciden con la lógica humana, y que podemos entender su beneficio para nuestras vidas personales y para nuestra sociedad. Por ejemplo: la Mitsvá de ayudar a los pobres, la prohibición de asesinar, etc. Y luego están los JUKIM, aquellas Mitsvot cuyo entendimiento escapa nuestra lógica. La Mitsvá de Pará Adumá, una vaca pelirroja, mencionada en nuestra Parashá JUKAT , que consiste en sacrificar al animal, quemar el cuerpo y usar sus cenizas para purificarnos después de haber estado en contacto con un cadáver, es el Jok por excelencia. Es difícil de entender no solamente cómo funciona, sino también cómo es que el uso de estas cenizas purifica a la persona que está impura, y a la vez ¡lleva a los que se ocupan de este proceso de purificación ¡a un estado de impureza!
OBEDECER SIN ENTENDER
Es mucho más fácil obedecer a HaShem y cumplir sus mandamientos cuando los entendemos, cuando tienen lógica para nosotros. Servir a HaShem en el máximo nivel implica hacerlo incondicionalmente, sabiendo que muchas veces somos incapaces de entender la «lógica Divina» y el por qué de algunos de Sus preceptos.  Lo más importante, sin embargo, es que cuando cumplimos los Jukim estamos demostrando que aceptamos a Dios como la máxima autoridad, y que estamos dispuestos a obedecerlo aun cuando no comprendemos bien los motivos y la lógica de lo que nos pide hacer.    Pero, ¿cómo llegamos a desarrollar esta aceptación de HaShem como la autoridad máxima?
LA IMPORTANCIA DE LA COMUNICACIÓN
En nuestra interacción con nuestros hijos es importante ser razonables. La mayoría de las veces cuando le pedimos que hagan o dejen de hacer algo, debemos explicarles por qué es bueno lo que les estamos aconsejando.  Esto, por supuesto, facilita a que tengan una buena predisposición y nos obedezcan con gusto. Además, nos ayuda a mantener una buena relación con ellos, ya que nuestros hijos aprenden a apreciar que queremos su bien.
Sin embargo, algunas veces nuestros hijos van a tener que obedecernos, aunque no entiendan la lógica de nuestras indicaciones, y aunque no les parezca bien. «No entiendo por qué no puedo desayunar helado todas las mañanas». «No entiendo, por qué dejas que esta enfermera me ponga esa vacuna que tanto me duele!». «¡No entiendo por qué no me dejas ir a la casa de ese amigo!» Nuestros hijos tienen que entender que hay instrucciones cuya «lógica» pueden captar –o compartir– y hay otras instrucciones o límites que deben aceptar simplemente «porque papá o mamá así lo dicen». Porque los padres somos la autoridad. Estos son los JUKIM de nuestros hijos. Y como padres no debemos tener miedo de imponer nuestra autoridad, aunque a nuestros hijos no les parezca que lo que decimos es razonable…
PADRES HUMANOS
Es verdad que, a diferencia de dios,  los padres a veces nos podemos equivocar. No tenemos la sabiduría y la justicia absoluta de nuestro Creador… Pero por el bien de nuestros hijos, debemos enseñarles a obedecer a una autoridad superior: esto es, nosotros, papá y mamá. Y cuando logramos que nuestros hijos confíen en nuestra autoridad, y aceptan que nuestra «imposición» está destinada a ayudarlos a hacer lo mejor para ellos, los estamos educando a que, cuando sean grandes, acepten la autoridad del Creador, aunque no siempre entiendan la lógica Divina.
SHABBAT SHALOM



JUQAT: Con la pluma, con la espada o la palabra

 Entre la Perashá de la  semana pasada y la Perashá de esta semana, Juqat, han pasado 40 años. Nos encontramos ahora en el último tramo de la travesía que comenzó cuando salimos de Egipto.  La generación que había vivido en la esclavitud la mayor parte de su vida, desapareció. Los que quedan son sus hijos, que si bien nacieron en la esclavitud han tenido tiempo, 40 años, para desprogramarse de la mentalidad de esclavos y pensar y actuar como seres humanos libres.  Las voces que reclamaban volver a Egipto y regresar a una vida de opresión pero sin responsabilidades, ha desparecido. Y a diferencia de sus padres esta nueva generación, no tiene miedo. Está preparada para luchar y conquistar la tierra de Israel.

LA PREGUNTA

De cualquier manera, la situación no es fácil. Quieren entrar a Israel por el camino de Edom, por el sur, la via mas directa hacia a la tierra prometida.  Pero Edom, un pueblo que será su futuro vecino,  no facilita el ingreso. Israel tiene que bordear Edom. El camino es muy largo y la gente ya está muy cansada. Ahora nos encontramos con un episodio memorable, pero muy triste. El pueblo se queja por la falta de agua. HaShem le indica a Moshé que tome su bastón (maté) y que congregue al pueblo frente a una roca. Moshé debe hablarle a la roca y por debajo de la misma surgirá un manantial de agua.  Moshé hace todo lo que HaShem le dice. Bueno, casi todo. La minúscula digresión de Moshé respecto a la orden divina es que en lugar de hablarle a la roca, Moshé la golpea con su bastón. HaShem le dice a Moshé, sin indicar explícitamente cuál fue su falta, que él y Aharón no van a liderar más al pueblo. Moshé morirá en el desierto. Y Yehoshua tomará el mando y los llevará a conquistar la tierra de Israel. Todos los comentaristas Bíblicos se preguntan qué fue lo que hizo Moshé para merecer una sanción tan severa. Según Rashí. “Moshé no tenía que haberle pegado a la roca, le tenía que haber hablado”. Creo que todavía puede parecer exagerado el castigo a Moshé.  ¿Es tan grave el error de Moshé? Especialmente si tomamos en cuenta que HaShem le pidió a Moshé que tomará su vara… Y que 40 años atrás, en una situación muy parecida, HaShem le dijo a Moshé que haría salir agua de una roca y que Moshé debía “golpear” la roca. ¿Cómo se justifica ahora un castigo tan grande por una desviación tan pequeña que puedo haber sido un error?

UNA POSIBLE RESPUESTA

¿Qué les parece si profundizamos el aspecto simbólico de “pegarle” a la piedra vs. “hablarle” a la piedra?  Recordemos el contexto: la generación anterior era una generación de esclavos que estaba entrenada a obedecer a los golpes.  La única forma de hacerlos reaccionar era con el látigo o el palo: los castigos físicos.  En un artículo llamado “Esclavitud, una institución que deshumaniza” Nell Painter explica que en el siglo 16, 17 los esclavos africanos estaban expuestos a todo tipo de torturas físicas y sicológicas, los marcaban como animales, los mutilaban, y los obligaban a ver las torturas aplicada a los miembros de su familia.  En Egipto , 3000 años antes, las condiciones de los esclavos hebreos no pueden haber sido mucho mejor…. y eso dejó sus secuelas.  Pero la nueva generación era diferente. Ya tuvieron tiempo para adoptar su nueva identidad: ahora se transformaron en el pueblo de HaShem, el pueblo que se somete voluntariamente a las instrucciones de Torá, la autodisciplina (quedushá).  Este nuevo pueblo elegido tiene que  ser educado y liderado con palabras; no con golpes. Pensemos en la diferencia entre nuestra sociedad moderna y la generación anterior. Hace solo 40 o 50 años atrás los maestros golpeaban a sus alumnos en la clase para disciplinarlos.  El mundo, en ese aspecto, cambió radicalmente.   En ningún país civilizado se concebirá que un maestro le pegue a sus alumnos. Un fenómeno parecido ocurre en el seno de las familias.  Conozco muchos padres que fueron criados “con el látigo”, y que hoy en día les cuesta liberarse de esa carga. Porque es difícil dejar de usar la fuerza como una herramienta de persuasión cuando uno no se entrenó en otras formas de imponer la autoridad. Los padres más jóvenes, sin embargo, aprendieron a sustituir el látigo por la palabra y establecer su autoridad por el peso de lo que dicen.  

Es posible que en el caso que trae nuestra Perashá sea algo parecido. La nueva generación tenía que olvidar el poder del «golpe». Es como si HaShem le hubiera dicho a Moshé  “Toma la vara, ¡pero no la uses! Háblale a la piedra ¡y no la golpees!. Quiero que la nueva generación se libere de la pesada herencia del látigo, y aprenda a usar la palabra.”

SHABBAT SHALOM

2024:

VIP: «drapetomania»,   segun el diccionario de Oxford: “Una forma de disfuncionalidad  que supuestamente afectaba a los esclavos en el siglo XIX, manifestada por un impulso incontrolable de escapar de sus amos blancos, que era prevenible mediante azotes regulares




KORAJ: La historia de dos influencers

EL MISTERIO DE ON
On Ben Pelet es un personaje misterioso en la Torá. No se sabe de él prácticamente nada. La Perashá de esta semana lo menciona en el contexto de la rebelión de Koraj: On es un líder de la tribu de Reubén que junto con Kóraj, cuestiona el rol político de Moshé. Luego que presentan su caso contra Moshé, la coalición anti-Moshé se prepara para el día siguiente: por la mañana se decidirá –de manera Providencial– quién es el líder de Israel. Al otro día, la Presencia Divina se revela, confirmando la designación de Moshé. Kóraj, sus secuaces y seguidores fueron trágicamente castigados y perdieron sus vidas. La Torá nombra a los que fallecieron en la insurrección. Pero a On Ben Pelet no se lo menciona entre los fallecidos. ¿Por qué? ¿Qué pasó con On?
YO NO SE POR QUÉ…
Uno de los elementos más especiales de la narrativa bíblica, es que la Torá nos cuenta lo que dijeron o hicieron los distintos personajes de la historia, pero casi nunca clarifica “por qué” los individuos actúan de la manera que actúan: ¿Por qué Cain mató a Abel? ¿Por qué los espías no quisieron continuar hacia Israel y desmoralizan al pueblo? En estas y en muchas otras ocasiones, el texto permanece en silencio. Son los Sabios del Talmud o el Midrasn los que llenan estas lagunas textuales con interpretaciones –históricas o alegóricas– ideas filosóficas, o deducciones gramaticales. Y con mucha humildad, siempre dejan un espacio abierto para otras ideas y opiniones. Y es así como la Torá siempre da para más. Y en cada generación invita “al lector” a transformarse en “el escritor” y descubrir una nueva interpretación del texto.
EL SEXTO SENTIDO FEMENINO
Volviendo a On Ben Pelet, el Midrash dice que On fue salvado por su esposa. Veamos. Luego que Koraj y sus secuaces se enfrentaron a Moshé, On regresó a su casa y le contó a su esposa que mañana se resolvería el tema del liderazgo y él intentaría transformarse en uno de los dirigentes del pueblo. La esposa de On no se impresionó. No se dejó llevar por la ambición del prestigio político. Dicho sea de paso, los Sabios también interpretaron que la esposa de Kóraj, llena de envidia y ambición, fue la que «le llenó la cabeza» a su marido para que acusara de nepotismo y usurpación del poder a Moshé e intentase reemplazarlo. La esposa de On, por otro lado, actuó de una manera opuesta. Desalentó a su marido a salir en contra Moshé. Esta mujer procedió, no solo con sentido común sino también con mucha inteligencia. Cuando su marido le contó su plan, no lo contradijo. Se dio cuenta de que de nada serviría decirle que no tenía razón. Pero, estratégicamente, lo convenció de que sin importar quién iba a ser el líder supremo, él iba a seguir en un segundo plano. Su papel no cambiaría. El suyo era “un caso perdido”.
LA ESTRATEGIA DE LA ESPOSA DE ON
On le dio la razón a su esposa. Sin embargo, le dijo que igual debía hacerse presente porque ya se había comprometido con Kóraj y sus amigos…. La esposa, viendo que On estaba decidido a seguir con su plan, no le dijo nada. Pero sabiendo que la presencia de su marido junto a los rebeldes podía terminar muy mal, decidió entonces tomar el asunto en sus propias manos.
¿Qué hizo la esposa de On? Seguramente esa noche lo mantuvo despierto durante el mayor tiempo posible. Y antes de dormir le dio de beber un vino muy fuerte, que lo hizo quedarse dormido más de lo habitual. Por la mañana, cuando sus amigos lo vinieron a buscar, querían entrar a su casa a despertarlo. Pero la esposa de On deliberadamente dejó su cabello suelto —algo que una mujer judía casada solo hace frente a su esposo— y por recato los amigos de On se quedaron esperando afuera*. Se me ocurre que en ese momento le habrán pedido a la esposa, gritándole desde fuera de la tienda, que despertara a On, que ya era tarde, que el motín estaba por empezar. Y ella les habrá dicho: “No se preocupen. Ustedes vayan adelante que yo ya despierto a mi esposo y enseguida estará allí con ustedes”. La esposa logró que su marido siguiese dormido por un par de horas más: el tiempo necesario para que terminase el trágico motín. Y así, con mucha inteligencia e intuición femenina salvó la vida de su esposo.
La esposa de Koraj alentó a su marido a rebelarse contra Moshé y lo llevó a su  destrucción. Mientras que la esposa de On usó toda su inteligencia, su encanto y su influencia para salvarlo de su perdición.
* Recuerdo hace muchos años haber visto un episodio de la serie «La familia Ingalls» (o «La casa de la pradera») donde un imprudente visitante se acercó a la casa de los Ingalss, y en ese momento Caroline, la esposa de Michael –que siempre llevaba su cabello recogido– estaba con su cabello suelto. Y cuando la vio , se percibió como una indiscreción . 



Resumen de la Parashá Koraj

Kóraj, el primo hermano de Moshé, lidera una rebelión contra Moisés y Aharón junto a los miembros de la tribu de Rubén: Datán, Abiram y On el hijo de Pelet, los dos hijos de Eliab y 250 líderes de la comunidad. Acusaban a Moshé de haberse arrogado el liderazgo y elevarse sobre todos los demás: “Todo el pueblo es santo, ¿por qué ustedes se consideran más que los demás?” Cuando Moshé oye esto le dijo a Koraj y a sus seguidores que mañana Dios hará saber quién es el líder. Y luego añadió: ¿No es suficiente que Dios los haya consagrado en la comunidad de Israel para realizar las funciones del Tabernáculo y que también busquen el sacerdocio? En realidad, les explicaba Moshé, no se estaban rebelando contra él y Aharón sino contra el orden impuesto por Dios. Moisés llamó a los dos hijos de Eliab, pero ellos no quisieron venir, diciendo que era injusto que Moisés se sintiera por encima de ellos y los obligara a morir vagando en el desierto. Moisés entonces le dijo a Koraj y a sus seguidores que prepararan un fuego sacerdotal y ofrecieran incienso a Dios.

En la entrada del Ohel Mo’ed (Tienda de Reunión) Moshé y Aharón se reunieron frente a los rebeldes y al resto de la comunidad. La Presencia de Dios apareció a toda la asamblea y Dios dijo a Moisés y Aharón: «¡Apártense de estos rebeldes para que Yo los destruya en un instante!» Moshé y Aharón se postraron en sus rostros y dijeron: «Oh Dios, si un hombre peca, ¿te enojarás con toda la comunidad?” Dios entonces le dijo a Moshé que le dijera al pueblo: “Apártense de estos hombres malvados y no toquen nada que les pertenezca, para que ustedes no sean destruidos por todos sus pecados.» El pueblo se apartó de ellos. Entonces Moisés dijo: «Por lo que van a ver a continuación se darán cuenta de que es Dios quien me envió y yo no estoy aquí por mi propia voluntad”. Cuando Moisés terminó de hablar, la tierra que estaba bajo los pies de Koraj y los demás lideres se partió y se los tragó con todas sus pertenencias. Luego, la tierra se cerró sobre ellos y desaparecieron. Un fuego descendió del cielo y consumió a los doscientos cincuenta hombres seguidores de Koraj que ofrecían incienso. Moisés instruye a Elazar, hijo de Aarón, que recupere los utensilios que se usaron para la ofrenda de incienso, los aplane y cubra el altar con ellos, como una advertencia testimonial para cualquier individuo que alguna vez desee desafiar el sacerdocio de Aharón.

Al día siguiente, la comunidad se queja de que Moisés y Aarón son los culpables de las muertes del pueblo de Dios. Dios le pide a Moisés y Aharón que se separen del resto de la comunidad porque Dios quiere destruirlos. Una plaga azota a la nación y muchos estaban muriendo. Moisés le dice a Aharón que rápidamente tome el incienso consagrado, vaya en medio de la congregación y expíe por su pecado. Aharón lo hace, se posiciona entre los vivos y los muertos, y la plaga se detiene.

Dios le dice a Moisés que tome una vara de cada una de las doce tribus, con el nombre del líder de cada tribu escrito en su vara. Otra vara se tomaría para representar a la tribu de Leví, y el nombre de Aharón estará escrito en esa vara. Las varas se colocaron durante la noche en el lugar mas sagrado del Tabernáculo. A la mañana siguiente se retiraron, y milagrosamente la vara de Aharón había florecido con flores de almendra. Esto fue una prueba adicional de que Aharón era la elección de Dios para ser el Sumo Sacerdote. Dios ordena a Moisés que devuelva la vara de Aharón en el Arca del Pacto  donde permanecerá para siempre com o testimonio.

Los judíos expresan a Moisés su temor de entrar por error en un área restringida del Tabernáculo y morir como resultado. En respuesta, Dios ordena a los sacerdotes y a los levitas que cuiden estrictamente el Tabernáculo para evitar la entrada no autorizada de aquellos que no son sacerdotes.

La Torá enumera luego las diversas ofrendas a las que tienen derecho los sacerdotes. Estos incluyen el privilegio de obtener ciertas porciones selectas de los sacrificios; recibir los cinco siclos de plata por la redención de los primogénitos israelitas; una porción de todas las cosechas de grano, aceite y vino; las primicias, etc. Pero también se le informa que sus descendientes no recibirán una porción en el territorio de Israel, que era lo mas preciado m materialmente: Dios será su herencia y su porción.

Los levitas tampoco recibirán una parte de la tierra de Israel. En su lugar, tienen derecho a una décima parte de todas las cosechas de las demás tribus, a cambio de los servicios que prestan en el Templo. Al recibir este diezmo, los levitas deben, a su vez, separar una décima parte de este diezmo y dárselo a los sacerdotes.




Koraj y las cuatro palabras que pueden salvar tu vida

No alcanza solo con aprender el significado de este versículo de la Torá (pasuq). Les recomendaría que lo memoricen. O que lo impriman y lo guarden en su bolsillo, cartera o billetera. Es un pasuq muy corto, que pertenece a la Parashá que leeremos en unas semanas, Pinejás, pero se refiere a lo acontecido en nuestra Parashá KORAJ. El pasuq consiste en solo 4 simples palabras. “UBNE QORAJ LO METU”. Que significa literalmente “Y los hijos de Koraj no murieron”. Es decir, sobrevivieron. 

¿A qué se refiere este breve texto?   

HIJOS vs PADRE

Llevado por la ambición, la envidia y los malos consejos, Koraj decidió rebelarse contra Moshé y Aharón para quitarles el liderazgo político. Koraj no estaba solo. Más de 250 personas lo acompañaban en su aventura rebelde. El final de Koraj fue horroroso: murió tragado por la tierra. Todas las personas que estaban con Koraj sufrieron el mismo destino. Sin embargo, como menciona este pasuq, los hijos de Koraj fueron la excepción ¡y sobrevivieron! ¿Por qué? Los hijos de Koraj, que ya eran adultos, se habían sumado a la rebelión encabezada por su padre y participaron de las protestas y las manifestaciones en contra de Moshé. Sin embargo, «a último momento», cuando llegó la hora del enfrentamiento final con Moshé, reaccionaron. Se dieron cuenta que lo que estaban haciendo era un acto de locura y que si no daban marcha atrás en ese mismo momento, ¡el daño iba a ser irreparable! Los hijos de Koraj sobrevivieron porque se arrepintieron justo a tiempo, en el minuto final.  

Pienso en los desafíos morales que todos nosotros vivimos diariamente. 

LA IRA Y EL ENOJO

A veces nos dejamos llevar por la ira y estamos a punto de levantar la mano y dañar físicamente a alguna persona, u ofender seriamente a alguien insultándolo con palabras graves. Estos impulsivos actos de violencia, especialmente si se trata de violencia física, pueden tener consecuencias irreversibles para la víctima y para el victimario. En un acto impulsivo que dura unos pocos segundos, uno puede condenarse a sí mismo a sufrir las consecuencias de lo que hizo, por el resto de su vida.

ATRACCIÓN FATAL

Otras veces nos dejamos llevar por nuestras pasiones. Nos relacionamos con quien no debemos… nuestro sentido común se nubla y así, en un breve momento, nos dejamos arrastrar por el instinto, pudiendo echar a perder «para siempre» nuestro honor, manchar nuestro buen nombre y el de nuestros hijos y destruir nuestra familia… 

PERDERLO TODO POR UN TEXTO

Sucede que uno está a punto de mandar un texto que escribió con enojo, donde expresa toda su frustración sin filtros. Hacemos esto más para desahogarnos que para transmitir un mensaje. Y no medimos ni calculamos como va a reaccionar el que lo recibe.   Hay casos famosos de grandes personalidades que perdieron sus trabajos por un Twitter inapropiado que una vez enviado y registrado por un solo «follower», ya nunca pudieron borrar. En los tiempos de WhatsApp o Snapchat uno puede arruinar la vida de otra persona, o la propia, con tan solo enviar una fotografía inapropiada. Increíblemente, no siempre nos damos cuenta de la gravedad y de la irreparabilidad de lo que hacemos. ¿Por qué? Creo que porque inconscientemente suponemos que las cosas graves y con consecuencias de largo alcance suelen ser difíciles de ejecutar…. y hacer click en “send” ¡parece tan fácil!

EL ÚLTIMO RECURSO

Lo curioso es que en varios casos famosos de actos impulsivos, mensajes o textos inapropiados, los que cometen el error se dan cuenta de lo que hicieron ¡unos segundos DESPUES!

En todos estos casos, nuestro nombre, nuestra familia, nuestra reputación, nuestras vidas pueden ser salvadas recordando este pasuq “Y LOS HIJOS DE KORAJ SOBREVIVIERON”. Los hijos de Koraj que estaban a punto de arruinar sus vidas y perderlo todo se dieron de lo que iban a a hacer un breve momento ANTES, dieron marcha atrás y se salvaron. 

Recomiendo memorizar estas 4 palabritas y si alguna vez, ח»ו alguien está a punto de caer en la destructiva trampa de sus propios impulsos, que diga para sí mismo este Pasuq y recuerde que la sabiduría de dar marcha atrás en el último minuto salvó la vida de los hijos de Koraj. Y puede salvar la tuya.

וּבְנֵי־קֹרַח לֹא־מֵתוּ

¡Y los hijos de Qoraj, sobrevivieron!

Bamidbar 26:11




SHELAJ LEJA: La generación langosta

El derrotismo psicológico de la generación del desierto también se pone de manifiesto en un detalle que por muchos años no había notado: los espías se veían chiquitos como insectos, pero ¿por qué no se describieron como hormigas, abejas o avispas, insectos que la Torá describe en otros contextos? ¿Por qué usar las “langostas” como metáfora?

Se me ocurrió que eligieron compararse con un insecto como la langosta porque las langostas no tienen aguijón, es decir: no pueden defenderse ni defender a su colonia. En cierta manera, y con mucha sofisticación, admitían su superioridad numérica —tengamos en cuenta que el efecto devastador de las langostas se produce cuando llegan en plagas de millones— pero fuera de su gran número, individualmente, las langostas son totalmente inofensivas y vulnerables.

Los hombres de la generación del desierto, diría el Dr. Freud, se veían a sí mismos como langostas porque se creían incapaces de defenderse ¡y, mucho menos, de triunfar!

Si queremos analizarlo más sofisticadamente todavía: según la cultura gastronómica de aquellos tiempos, las langostas eran comestibles (muchas especies son kosher), y quizás inconscientemente se estaban describiendo a sí mismos como “comida” para el enemigo.

Caleb y Yehoshua, por el otro lado, en un momento presentaron una visión opuesta cuando dijeron «Lajmenu hem»: los enemigos serán como pan para nosotros, en el sentido de la expresión en español argentino: “son pan comido”.