BERAJÁ 13 de la AMIDÁ: Protege a quienes cuidan de nosotros.

על הצדיקים ועל החסידים
Concede Tu compasión, HaShem nuestro Dios, a los justos y a los piadosos, 
a los sobrevivientes de Tu pueblo Israel, (a sus ancianos)  y a sus Sabios, que son perseguidos;  a los verdaderos prosélitos, y a nosotros.
Otorga una recompensa apropiada a todos los que confían verdaderamente en Tu nombre.
Y [ayúdanos para] que seamos contados entre ellos. 
Y que nunca seamos avergonzados por haber confiado en Tí, 
ya que siempre nos apoyamos en Tu infinita bondad. 
Bendito eres Tú, HaShem, que eres el respaldo y el amparo de los [hombres] justos.
Pedimos por los justos en esta sección que trata de las solicitudes «nacionales» porque los Tsadiqim son los héroes de nuestro Pueblo: los hombres y mujeres que la Nación de Israel tiene como modelo a seguir e imitar.
«Cuida con Tu compasión, HaShem nuestro Dios…»
En esta bendición pedimos a HaShem que proteja y ayude a las personas justas y piadosas. Y a todos aquellos que por su condición política (los Sabios de Israel, por ejemplo, eran perseguidos a muerte en la época del Imperio romano para erradicar la tradición oral del pueblo judío) física o moral son especialmente vulnerables a la opresión. Pedimos que cuide de aquellos que se comportan con bondad y justicia, que buscan el conocimiento de Dios y la obediencia de Sus mandamientos.
«…a los justos y a los piadosos…» 
Los justos, Tsadiquim, son los que siguen estrictamente los mandamientos de Dios; mientras que los piadosos o Jasidim se comportan en un nivel por encima de la rectitud. Me explico: los Jasidim son las personas justas que practican nuestra Torá más allá de sus deberes religiosos en un área específica de Mitsvot: Jésed, «bondad». Lo que incluye las buenas acciones que uno hace por otras personas: visitar a los enfermos, consolar a los dolientes, ayudar a los necesitados, cuidar y proteger a los más débiles, etc.  Mientras que el exceso en ciertas Mitsvot rituales puede ser considerado contraproducente, objetable o un síntoma de arrogancia, en el área de Jésed, «bondad», hacer más de lo que la Torá nos exige, es noble e incuestionable.  Es importante notar que la categoría de justos y piadoso es dinámica y completamente independiente de «castas». En otras palabras, cualquier persona puede pertenecer a la categoría de justos o piadosos, dependiendo exclusivamente de la rectitud y de las buenas acciones de uno.
«Otorga una recompensa apropiada… y que seamos contados entre ellos»
En esta Berajá pedimos a HaShem que recompense a los justos y a todos aquellos que ponen su confianza en Él. También le solicitamos a HaShem que nos inspire a seguir los pasos de los justos, y  que nos ayude e inspire para que también seamos parte de ellos.
«Y que nunca seamos avergonzados por haber confiado en Tí…» 
¿Por qué los Tsadiqim y los Jasidim merecen una protección especial y una recompensa apropiada?  Porque las personas íntegras, y especialmente los Jasidim, viven de acuerdo a standards de altruismo que son muy diferentes al del resto de nosotros. Se comportan como si hubieran venido a este mundo sólo para dar, y no para recibir. Son expertos en defender a los demás, pero no saben defenderse a sí mismos. Cuidan de otras personas, muchas veces desatendiendo sus propias necesidades. Conozco voluntarios, por ejemplo, que se dedican con tanto esmero y entrega a cuidar a los enfermos, a asistir a los necesitados y a ayudar a los pobres, que a veces no los queda tiempo o energía suficientes para cuidar de sí mismos o incluso de sus propias familias. Por eso le pedimos a HaShem que brinde a estos ángeles-humanos una protección especial.   Además, no es raro que las personas demasiado nobles queden expuestas no solo a la ingratitud sino también al abuso….  Por eso le pedimos a HaShem que no permita que las personas de bien se avergüencen por exceso de nobleza y bondad.
Pedimos que HaShem los proteja cuando exponen su vulnerabilidad, y que los recompense cuidando de ellos y de sus familias como ellos cuidan de otras personas.